«El Numancia nos amarga la victoria»
Sporting 1905
Artículo de opinión
04 Mar 2019. Actualizado a las 19:30 h.
El C.D. Numancia nos amarga la victoria. La trayectoria el equipo de José Alberto invitaba a muchas cosas, pero no precisamente a viajar a animar. Aún así en torno a un millar de sportinguistas decidieron viajar. Soria nuevamente era el destino, enésima visita a Los Pajaritos reflejo de la deriva del equipo asturiano en los últimos años. Dos equipos que deambulan por la mitad de la tabla de segunda división con escasas opciones de poner algo de picante a su temporada ni por arriba ni por abajo.
No fue óbice para la directiva local la intranscendencia del encuentro para cobrar 25€ por el fondo y 30€ por el lateral de la esquina visitante del estadio. No contentos con estos precios populares el C.D. Numancia tuvo a bien intentar situar más personas de las debidas en el córner de la afición visitante. Sin entrar a valorar si se trató de un error o hubo alguna otra circunstancia para justificar este “overbooking”, el caso es que un estadio que lucía más cemento que aficionados mantenía a gente viendo el fútbol de pie o en los vomitorios del campo. Tras los registros habituales, revisión de bufandas y demás obligaciones de seguridad nos encontramos que los derechos del aficionado se les habían olvidado.
Parte de la afición desplazada encontró sus asientos ocupados, no siendo esto mayor problema salvo por la circunstancia que todas las localidades visitantes también lo estaban. Puesta esta circunstancia en conocimiento de los agentes de la Policía Nacional allí desplazados. Estos comprobaron que no había sitio y que decenas de personas se encontraban con entrada pero sin asiento. Los agentes solicitaron la intervención de sus superiores y el responsable de la XI Unidad de intervención policial se personó allí.
Dicho mando policial habló tanto con miembros de la seguridad privada del club como con dos acomodadores, solicitando la apertura de la verja para reubicar a estas personas en los asientos colindantes fuera de la jaula visitante. Se negaron, apareció un responsable del club soriano que igualmente se negó a abrir aquella verja. Gran gesto por parte de un club que habitualmente tiene el campo vacío, que salvo que el rival venga acompañado de muchos seguidores, tiene dificultades para superar los 3500 espectadores en el campo se niega a solucionar un problema que ellos mismos han generado. Al menos los policías tuvieron el gesto de permitir ver el partido en zonas habitualmente prohibidas.
El Numancia nos amargó la victoria, ahora tras unas horas de autobús quedan unas horas de reclamaciones. Caerán en saco roto, entre consumo y protección civil se pasan la pelota, UNIPES va a intentar interceder también por estos aficionados, pero el final de la historia está claro. Los aficionados, una vez más, se ven perjudicados. Está claro que hay club que no merecen estar en el fútbol profesional, el equipo soriano uno de ellos.