La Pizarra: José Alberto sí marca goles

El nuevo entrenador del Real Sporting de Gijón sigue ofreciendo brotes verdes en su primer encuentro al frente del conjunto rojiblanco en Asturias, aunque todavía existen muchos aspectos por mejorar, sin olvidar que el Tenerife bien pudo remontar el 2-0 inicial.

El Sporting comenzó muy bien el encuentro, incluso tuvo una clara ocasión de gol en los primeros segundos, con 15 minutos presionando fuerte y robando balones en campo rival al estilo Tuchel en el Borussia Dortmund. El Sporting era un avispero para el rival, pero los problemas llegaron cuando esa anarquía controlada se convirtió en descontrolada, convirtiendo el encuentro en un ida y vuelta que parecía interesar más al Tenerife, ya que igualaba fuerzas y riesgos pese a jugar como visitante.

En el comienzo de la segunda parte el Sporting siguió desinflándose hasta que José Alberto realizó un doble cambio en el minuto 55, algo pocas veces visto, tanto en cantidad, como en dicho momento del encuentro. Así como se trató de una variante ofensiva, dando entrada a un nuevo delantero y a un mediocentro más ofensivo.

El movimiento fue clave, con 2 goles en los siguientes 10 minutos, aunque el equipo perdió por completo la consistencia una vez superados esos momentos de locura ofensiva. Lo que resulta una asignatura pendiente para las próximas jornadas, saber cerrar partidos ganados.

La propuesta inicial

José Alberto apostó por un 4-3-3 que por momentos se convirtió en un 4-1-4-1, aunque la movilidad era tal que por momentos resultaba complicado adivinar la posición real de sus jugadores desde el pivote en adelante.

Mariño en portería, defensa de cuatro para Geraldes, Peybernes, Babin y Cordero. Los zagueros sufrieron más de la cuenta, especialmente por el costado izquierdo, donde Carlos Cordero fue de más a menos, si bien es cierto que los atacantes fueron perdiendo consistencia defensiva y la zaga no recibió las ayudas que debería. A nivel ofensivo, se notó la consigna de no especular con el cuero atrás buscando un fútbol más vertical, en el que los laterales deben doblar a su par por banda.

Por delante de ellos y como hombre ancla se colocó Cofie, que se vio desbordado por el desorden que encontraba en la parte ofensiva, lo que le fue sacando del encuentro. Pese a todo, en sus 55 minutos realizó 9 acciones defensivas y solo falló 2 pases.

Unos metros más adelantados se encontraban André Sousa y Carlos Carmona como interiores, aunque por sus movimientos ambos cayeron de forma constante a la bandas para buscar triángulos de superioridad junto al extremo y el lateral o Djuka. En el mismo sentido, también se pudo encontrar por dentro a los hombres de banda, Traver y Lod. De hecho, ambos empezaron el encuentro a pierna cambiada y durante la cita fueron alternando su posición.

Ninguno de los cuatro estuvo especialmente fino a nivel ofensivo, siendo el finlandés el hombre más productivo al crear 3 ocasiones de gol con sus pases. En cuanto a la presión defensiva, el posicionamiento no fue el correcto cuando tocaba acumular hombres, pero la intensidad en la primera presión provocó hasta 7 recuperaciones cerca del área del Tenerife, que por centímetros no resultaron más, además de otras 6 en campo rival.

El ariete volvió a ser una semana más Djuka, que esta jornada se estrenó a nivel goleador. El serbio estuvo más activo que nunca en la participación ofensiva y la misión defensiva, y pese a que no estuvo muy acertado en sus acciones, la intensidad aportada y el acrobático gol anotado bien compensaron sus estadísticas.

Los cambios

Blackman por Carmona. Cambio de sistema a un 4-4-2 añadiendo un delantero más, lo que por ejemplo resultó clave para que Djuka pudiese anotar su gol al tener dos referencias que marcar en el área. Al igual que ocurrió en Granada, la entrada al campo del inglés revolucionó al Sporting con sus movimientos de ataque y ayudó a pelear más balones en campo rival.

Cris Salvador por Cofie. Hombre por hombre, aportando intensidad y mayor presencia ofensiva desde la zona ancha. Lo cierto es que no estuvo muy acertado y sus fallos pudieron costar dos puntos al Sporting. Aunque a nivel táctico fue un movimiento interesante sobre el papel.

Álvaro Jiménez por Robin Lod. Entró al campo en el minuto 79 para buscar alguna contra y ayudar Cordero cerrando la banda, pero no estuvo acertado ni en ataque ni en defensa, pese a que tuvo varias ocasiones para intentarlo mientras el encuentro se volvía loco.

Balón parado

Correctos en defensa, gol en ataque. El equipo mejoró las marcas después de sufrir mucho en Granada, donde los locales habían logrado coger al Sporting en varios errores básicos. A nivel ofensivo Babin anotó un gol tras un saque de esquina en el que no se apreció alguna jugada ensayada.

Nota final para José Alberto y su cuerpo técnico

Bien. A nivel global se vio a un Sporting más vertical, con mayor capacidad para robar balones en campo rival, aunque debe mejorar la defensa estática y el control de los partidos. No obstante, resulta evidente que los cambios fueron clave para vencer mediante 10 minutos de locura. El Sporting progresa adecuadamente.