«La gestión deportiva de la última temporada me parece muy mala y Abelardo ha sido víctima de decisiones propias pero también ajenas. Ojalá haya tiempo»
Sporting 1905
Juanma Castaño Periodista deportivo
23 Mar 2017. Actualizado a las 16:39 h.
Juanma Castaño (Gijon, 1977) vive seguramente su momento más dulce en la profesión. Después de hacer la maleta y volar a Madrid desde su orígenes en la emisora local de la Cadena Ser, este periodista deportivo dirige actualmente El Partidazo en la Cadena Cope y lo compagina con Deportes Cuatro Fin de Semana. Pocas horas de sueño pero con una ilusión intacta y un desparpajo que ya dejaba entrever en su juventud cuando correteaba por los pasillos de aquel local ubicado en el número 1 de la calle Jovellanos. Antes de que entre en capilla repasamos junto a él algunos de los temas más interesantes del Sporting. Con ustedes Juan Manuel Castaño.
Regresa a su casa.
Vuelvo literalmente porque además duermo en casa. Cuando el equipo de producción de la Cope estaba preparando el viaje me decían vamos a este hotel y les dije que no, que no me cogieran hotel, que dormía en mi casa (risas). Es una situación extraña ir de trabajo con un equipo de 30 personas y que de repente todos se quedan a dormir en un hotel y tú te vayas a dormir a tu casa.
¿Nervioso?
No. La verdad que no produce tengo tantas ganas de ver a tanta gente y estar allí que realmente estoy ansioso porque llegue el momento, por ir allí y comerme una fabada, preparar el programa en Gijón y hacerlo con toda la naturalidad que lo hacemos cada día.
¿Qué espera del programa de hoy?
Espero que la gente vea cómo hacemos el programa. Esto tampoco es un concierto de rock ni una obra de teatro. Es un programa de radio y se trata un poco de que los que cada día lo escuchan vean un día cómo lo hacemos, un día distinto al habitual pero donde trataremos de hacer lo que hacemos cada noche a partir de las 23:30. Creo que cuantos más adornos se le pongan es peor porque la gente lo que quiere ver es un programa de radio y es lo que sabemos hacer. Si tratamos de hacer otra cosa no creo que seamos capaces así que espero que la gente se lo pase bien, se divierta y disfrute de dos horas de radio en el Teatro Jovellanos.
¿Estará toda la banda?
Se van todos. Paco González no va a poder ir porque operan a su mujer el viernes y, evidentemente, lo primero es lo primero. Tampoco va a poder hacer Tiempo de Juego ni viernes, ni sábado, ni domingo por razones de causa mayor es baja pero somos por lo menos 30. No he querido ni contarlos porque me daba hasta vergüenza pasar las hojas de gastos a la Cope pero vamos que son un regimiento. La gente verá allí a Maldini, a Guasch...
Entrando en materia. ¿Cómo ve al Sporting?
Creo que ha habido una reacción y lo que hay que ver ahora es si continúa y si ha llegado tarde o no. Para mí ha habido dos partidos clave contra el Celta y Deportivo que pueden marcar el futuro y que pueden suponer una auténtica pena y un lamento a final de temporada. Ojalá que haya tiempo pero es que creo que es un poco exigente el momento y ganar seis partidos de diez que quedan me parece mucho.
Una de las noticia de esta temporada es, sin duda, la dimisión de Abelardo. ¿Cómo vivió la salida del Pitu y todo lo que se generó alrededor de ello?
Con mucha tristeza y pena porque además es una persona con la que tengo una muy buena relación y sobre todo porque algunas personas gritaron contra él en El Molinón. Eso le dolió profundamente. Al final Abelardo fue víctima de decisiones propias y ajenas en torno a la confección de la plantilla. En realidad pagó las culpas de una gestión deportiva que no era exclusivamente suya ni muchísimo menos. Es injusto pero en el fútbol la cuerda siempre se rompe por el mismo lado, el del entrenador.
Hay una situación conocida por todos y negada hasta la saciedad por el club. Hablo de la guerra entre Nico Rodríguez y Abelardo que finalmente se reconoció de forma muy suave ¿Esto acaba pasando factura?
Mal asunto cuando en un equipo el director deportivo y el entrenador tienen una situación de enfrentamiento o al menos de no colaboración es un problema y al final probablemente parte de las cosas que están pasando en este equipo se deba también a esa falta de entendimiento entre ambos. Evidentemente ellos dirán que no y el club dirá que no pero yo creo que al final esas cosas acaban perjudicando notablemente al equipo.
El máximo accionista aseguró en El Partidazo de Copeque recibía ofertas a diario. Incluso que le habían ofrecido 20 millones de euros
Si es verdad no me puedo explicar que hace en el Sporting porque con el sufrimiento que conlleva en lo personal ese cargo y ese apellido después de los últimos veinte años... La verdad es que no lo entiendo. Yo no estaría al frente del Sporting si tuviera una oferta como la que comentó y si tuviera una situación en la ciudad y en la grada de El Molinón como la que existe. Ellos sabrán lo que tienen que hacer con su patrimonio porque al final el club es suyo pero no le veo rédito de ningún tipo a estar en ese puesto.
Una de las grandes frases de esta temporada sale de la boca de Javier Fernández donde habla de haber iniciado un crecimiento sin retorno. ¿Usted ve en este Sporting un crecimiento sin retorno?
No. En lo deportivo indudablemente no y en lo económico lo que veo es que el ascenso a Primera salvó al club de la desaparición y que ahora seguramente estén llevando las cuentas de una forma en la que el Sporting evite entrar en ese problema tan grave como es la amenaza de desaparición. Lo que supongo es que el crecimiento sin retorno tiene que ir acompañado de éxitos deportivos, es decir, no se puede hablar de crecimiento sin retorno cuando sólo entendemos ir liquidando una deuda. Crecimiento sin retorno es lo que hizo en su día el Villarreal o el Sevilla pero no comprendo que en el fútbol se hable de crecimiento sólo desde el punto de vista de los números. Es una parte de la gestión pero hay otra que es la deportiva y que muchas veces es la que más interesa a los aficionados.
Una de las medidas más polémicas de la última Junta de Accionistas fue la aprobación de que el presidente cobrara un sueldo. ¿Qué le parece?
Me parece perfecto. Creo que todos los presidentes de Primera División deberían cobrar. Es una forma de que la gente les pueda exigir responsabilidades porque cuando alguien hace algo gratis siempre te pueden decir que están por amor al arte. Además entiendo que una persona que le dedica ocho o diez horas al día a trabajar para una SAD merece un sueldo acorde al presupuesto de la entidad. Esto son empresas y los presidentes de las empresas aunque sean suyas cobran, con lo cual para mí no hay discusión. No sé que tiene de extraño que el presidente de una empresa cobre. El Sporting aunque no nos guste es una empresa.
Oiga usted ha teñido varias agarradas en Twitter con aficionados rojiblancos. Entre otras cosas se le acusa de no señalar a los culpables de la situación del club. ¿Lo que más le molesta es el insulto?
Molesta porque es un síntoma de mala educación y una forma de demostrar que no hay posibilidad de discusión. No es un problema conmigo, es con todo el mundo. Por lo que veo a la mayoría de periodistas deportivos le sucede lo mismo con los temas que ellos controlen. A mí con el Sporting hay gente que piensa que no le doy suficiente caña a los directivos y están en su derecho de pensarlo pero exactamente no sé qué me reclaman. Estoy diciendo que no me gusta la gestión del Sporting en los últimos años, la gestión económica que se ha hecho en los últimos tres años parece que va encaminada a sanear las cuentas del club y la gestión deportiva, por ejemplo, de la última temporada, me parece muy mala. ¿Qué quieren que haga? No voy a salir a la calle con una pancarta que diga «Fernández vete ya». No puedo hacer eso, yo tengo que contar que la gente sale a la calle con una pancarta que dice «Fernández vete ya» pero no soy nadie para pedir la dimisión de alguien.
Lo último es la que ha liado con un tweet relacionado con el Oviedo.
Sorprendentemente de eso no me he enterado porque desde hace mes y medio más o menos me he quitado las menciones de Twitter. El Oviedo puso un tweet después de que perdiera el Sporting y evidentemente vi el sentido que no era otro que echar sal en la herida del Sporting. Lo puse y ahí lo dejé. Cuando llegué por la noche a la radio me dijeron que se había liado en Twitter con mi comentario y no sabía a qué se referían. Ahí me di cuenta de lo feliz que soy sin las menciones de Twitter porque estuve ocho horas recibiendo insultos y no tenía ni idea.
Luego vi que había más de 700 comentarios. No los leí pero me imagino lo que hay. Vivo en la gloria porque tengo la sensación de que todo el mundo está de acuerdo con lo que pongo (risas). Ahora leo a la gente a la que sigo y he tenido que hacer esa criba porque sino era imposible y te acabas contaminando. Soy de sangre caliente y sino acabo entrando en debates que no me aportan nada y lo que me van a provocar un día es meter la pata. Tengo cosas mucho más importantes en las que pensar que acabar metiendo en un lío el nombre de la Cadena Cope o Mediaset y no quiero.