El Sporting ojeó en vivo al «Huevo» Acuña

El director deportivo del Real Sporting de Gijón ha ojeado varios jugadores de la primera división argentina y sus inferiores, pero si un nombre destaca por encima de su listado para el mercado de invierno y verano, es el de Marcos «Huevo» Acuña.

El extremo zurdo de 25 años es una de las sensaciones del campeonato argentino, hasta el punto de jugar en la segunda parte del pasado Argentina-Colombia en sustitución de Di María. Por ahora, Acuña acumula 5 goles en 10 partidos jugados y 4 asistencias, la última de ellas con el técnico sportinguista en sus gradas:

Desde el pasado verano se viene especulando con su salto a Europa y su club se remite a la cláusula de rescisión, cercana a los ocho millones de euros según la fluctuación de la divisa, pero lo cierto es que pese a los rumores de verano sobre una oferta de 5 millones de euros del Toulouse, así como el seguimiento de Inter, Marsella y Atalanta, el Racing de Avellaneda, que sólo tiene el 50% de sus derechos económicos, no ha querido pagar durante estas semanas los casi 2 millones euros exigidos por el otro 50%, ni tampoco un año atrás una cuarta parte del precio por un 25% de Ferro Carril.

Acuña desea dar el salto a Europa ya, pero lo cierto es que los asturianos no están en disposición de acercarse a las cifras solicitadas, pudiendo llegar a rondar la mitad del valor de su rescisión tirando de ingeniería financiera; como se hizo en el escenario de Duje Cop, quien en un primer momento del verano tampoco estaba al alcance de las cuentas de Nico Rodríguez y surgió al no pujar por él otros clubes con el paso de las semanas.

Una cesión “low cost” para demostrar su valía en la liga de estrellas y revalorizarse, con opción de compra obligatoria en caso de permanencia y variables por diversos objetivos deportivos a futuros, se asoma como la única posibilidad de aspirar a una figura de su caché.

No obstante, una operación de tal calibre se antoja complicada, ya que también se requiere contratar a un mediocampista titular con poderío físico y capacidad de echarse al equipo a sus espaldas a nivel ofensivo. Sin olvidar el lateral izquierdo, donde sólo la salida de Roberto Canella podría facilitar la llegada de otro hombre.

Demasiados deseos para un escaso presupuesto invernal, que salvo sorpresa en forma de marchas u oportunidades únicas en la ventana de enero, sólo daría alcance para un único fichaje que sobre el papel eleve notablemente el nivel.