Policías de Siero exigen la dimisión del alcalde tras su condena por lesiones

Algo más de un centenar de personas se ha manifestado este jueves frente a la Junta General y la sede de Presidencia del Principado para exigir la dimisión del alcalde de Siero, Ángel García, después de que la Audiencia Provincial haya ratificado su condena por un delito leve de lesiones a un vecino de localidad.

Miembros del Sindicato Independiente Policía Local de Asturias (SIPLA), familiares y vecinos de Siero, respaldados por PP, Vox y Ciudadanos, se han concentrado para pedir el cese inmediato del regidor socialista. El representante del SIPLA de Siero y subinspector, Javier Martín, ha manifestado que los vecinos no se pueden ver «representados por un señor condenado».

«Nosotros somos policías y nuestro jefe, el alcalde de Siero, está condenado. Tiene antecedentes penales. Esto es muy serio y no se le está dando la importancia que tiene», ha declarado Martín. «Siero no se merece a un alcalde condenado por un delito. Si tiene dignidad, que presente su dimisión», ha declarado por su parte el secretario general del SIPLA, Juan José Verdugo, que también ha reclamado a la Federación Socialista Asturiana (FSA) que, de no producirse, aplique su código ético y cese a García.

Además de la concentración, una marcha ciclista con más de 20 personas con camisetas serigrafiadas con «Cepi delincuente» ha salido desde el Ayuntamiento de Siero hasta la Junta General del Principado para pedir la renuncia del alcalde socialista. Los delegados sindicales han avisado de que, de no dimitir el alcalde de Siero, habrá mayores manifestaciones «con todos los afiliados del SIPLA».

La Audiencia Provincial confirmó a principios de este mes la condena del alcalde a pagar una multa de 270 euros y a indemnizar con 219 euros a un vecino de su edificio, en Lugones, por un delito leve de lesiones cometido en el marco de una discusión. Según el fallo judicial, los hechos ocurrieron el 25 de abril del pasado año, cuando el alcalde reprochó a su vecino que le hubiera denunciado ante el ayuntamiento por las obras que realizaba en su vivienda y tras discutir con él, le insultó, le agarró por el cuello y le amenazó. El vecino acudió al Centro de Salud de Lugones, donde fue diagnosticado de contusión en el cuello y aportó en el juicio el parte médico y la valoración del forense.