Las 20 curiosidades del Museo de Bellas Artes de Asturias que seguro que no sabías

El Museo de Bellas Artes de Asturias es una de las pinacotecas más importantes de nuestro país. Así lo consideran por «unanimidad» los visitantes «profesionales» que cada año transitan esta galería instalada en cuatro edificios situados a escasos metros de la catedral de Oviedo, entre las calles Rúa y Santa Ana. En ellas se albergan obras de autores tan dispares como Francisco de Goya, El Greco o Pablo Picasso, entre otros muchos de época contemporánea, que pueden apreciarse de forma totalmente gratuita. Además, estas construcciones son testigos de las numerosas curiosidades que envuelven al museo y de las que muy pocos asturianos son conocedores. Por ello, repasamos algunos de los datos o anécdotas más sorprendentes.

1. Construido sobre un antiguo colegio de niñas

El Museo de Bellas Artes de Asturias tiene 43 años de historia. Aunque a día de hoy está instalado en un conjunto de cuatro edificios, en sus orígenes, y antes de tener tales dimensiones, su primera sede fue el Palacio de Velarde. Construido entre 1765 y 1770 por el arquitecto Manuel Reguera, durante casi un siglo esta construcción acogió el colegio de primera y segunda enseñanza femenina de la Congregación de Religiosas del Santo Ángel de la Guarda hasta que en el año 1980 se convirtió en dicha pinacoteca. Actualmente en este espacio se albergan las colecciones más antiguas, que datan de los siglos XIV al XIX.

2. Casi 8.000 metros cuadrados de pinacoteca

Con el paso de los años y debido al aumento del volumen de los fondos pictóricos, el Museo de Bellas Artes fue ampliando sus espacios a edificios anexos. En un primer lugar, en 1986, se abrió al público la Casa de Oviedo-Portal, que a día de hoy está dedicada «íntegramente» al arte del siglo XIX. A finales de la década de los 90, desde la institución vieron la necesidad de acometer una nueva ampliación que permitiese, por un lado, exponer más obras y, por el otro, dotar a la pinacoteca de nuevos almacenes. En este edificio, la Casa de Solís-Carbajal, se exponen actualmente las colecciones más contemporáneas, de los siglos XX al XXI, aparte de contar con un cuarto en el que se albergan las oficinas y otros servicios internos del Museo. De esta manera, la pinacoteca asturiana ha duplicado su superficie, de 4.000 a casi 8.000 metros cuadrados.

3. La primera colección que albergó

Cuando el Museo de Bellas Artes de Asturias abrió sus puertas el 19 de mayo de 1980, la pinacoteca contaba en aquel momento con siete salas en las que se exponían un total de 78 obras. Esos fondos inaugurales procedían de la extinta Diputación Provincial, «en donde confluyeron la colección de la Comisión Provincial de Monumentos Históricos Artísticos, la del antiguo Museo de la Academia Provincial de Bellas Artes de San Salvador, los depósitos del antiguo Museo de Arte Moderno y los de la Comisaría General de Patrimonio Artístico Nacional, tal y como asegura su conservador-jefe de Arte Antiguo, Gabino Busto Hevia. Aparte, se expusieron las adquisiciones de la propia Diputación, «especialmente» de lotes «muy selectos» de los artistas asturianos Evaristo Valle y Nicanor Piñole.

4. Más de una veintena de salas de exposición

En total, el Museo de Bellas Artes cuenta con 27 salas de exposición. Todas ellas numeradas. Además, dispone de varios espacios de transición, así como exposiciones temporales en el Palacio de Velarde, en la Casa de Oviedo-Portal y en el edificio de Ampliación.

5. La colección, en cifras

El Museo cuenta en la actualidad con «una de las mejores colecciones públicas de arte de España», integrada por un total de 18.000 obras aproximadamente. De estas, 2.246 son pinturas y 603 esculturas. Unos fondos a los que hay que sumarles «las nutridas» colecciones de dibujos, estampas, carteles —en gran parte cinematográficos—, fotografías y artes aplicadas —especializadas en vidrio y loza—. 

6. La obra más antigua tiene siglos de historia

Si tenemos en cuenta la antigüedad, la obra con más años de historia registrada en las colecciones del Museo de Bellas Artes es la de un anónimo sienés. Bajo el nombre de Crucifixión, esta data del año 1350.

7. Más de medio metro de diferencia entre el cuadro más grande y el más pequeño

De todas las obras, el Retrato de María Teresa del Riego y Riego es la de menor tamaño. Perteneciente a Álvaro Flórez Estrada-Cornejo, se trata de un óleo sobre marfil de 5,5 X 5,2 centímetros. En contraposición, la obra de mayor tamaño pertenece al Maestro de Palanquinos y Maestro del Retablo de Santa Marina. Con el título de Retablo de Santa Marina, este óleo sobre tablas de pino tiene una estimación de dimensiones en disposición lineal a su máxima amplitud de 600 x 830 centímetros.

8. La obra que atrae todas las miradas

Son varias las obras expuestas en el Museo de Bellas Artes que llaman la atención del público. No obstante, las que por lo general acaparan todas las miradas son los grandes retablos, las piezas del Greco o de artistas como Zurbarán, Murillo, Ribera, Carreño, Meléndez o Goya. También la pintura y escultura asturianas del siglo XIX y las pinturas de Sorolla generan interés. De la misma manera, los trabajos de Anglada Camarasa, Evaristo Valle, Nicanor Piñole, Luis Fernández, Dalí, Picasso o Miralles, entre otros, acaparan las miradas. Las causas por las que los visitantes se quedan embelesados ante estos trabajos son muy diversas. Van desde motivaciones psicosociológicas hasta culturales, tal y como asegura Gabino Busto Hevia.

9. Grandes obras que pasaron por la pinacoteca

Desde que abrió sus puertas, el Museo de Bellas Artes ha acogido numerosas e importantes obras con un valor «inmenso e insustituible» para el patrimonio cultural asturiano. Algunas de ellas a día de hoy ya no están expuestas en la pinacoteca, pero cabe recordar que La venerable madre Jerónima de la Fuente, de Velázquez; La Condesa de Chinchón, de Goya; Botella, vaso y frutero, de Georges Braque; El Bufón, la mujer y el gato a la ventana, de Jacob Jordaens; Cabeza de hombre III y Cabeza, Pájaros, de Joan Miró, o el Vestido, de Yves Saint Laurent, entre otros, han tenido su hueco en la pinacoteca asturiana.

10. El artista con más obras

El pintor, escultor e ilustrador asturiano Faustino Goico-Aguirre es el artista que actualmente cuenta con más obras en el Museo de Bellas Artes. En total son 925 los trabajos de este ovetense que fue muy apreciado en los círculos artísticos en la pinacoteca asturiana.

11. Los grandes pintores de la historia que tienen obras en el museo

Uno de los mayores atractivos del Museo de Bellas Artes de Asturias es que alberga numerosas obras de algunos de los pintores europeos e internacionales más relevantes de los últimos siglos. «La lista es muy extensa» y entre ella destacan nombres como Pedro Berruguete, Tiziano, El Greco, el Taller de Velázquez, Murillo, Claudio Coello, Goya, Antonio Solá, Sorolla, Picasso, Dalí, Tapies, Miró o Zurbarán, entre otros muchos. En cuanto a artistas asturianos, sobresalen Dionisio Fierros, Álvarez Catalá, José Uría, Menéndez Pidal, Martínez Abades, Evaristo Valle, Nicanor Piñole, Orlando Pelayo, Amador, José María Navascués, entre un largo etcétera.

12. ¿Cómo llegaron estas grandes obras al museo?

Las principales vías de ingreso de las obras en el museo son la adquisición por compra, el depósito, la donación, el legado y la dación. Entre todas ellas destacan las que integran la Colección Pedro Masaveu, que pasó al Principado de Asturias a finales de 1994 como dación en pago de impuestos de sucesión, y que fue depositada en el Museo a partir de 1996, tal y como apuntan en su página web. De la misma manera, en el año 2017, la colección se ha visto notablemente enriquecida con 33 obras importantes donadas por Plácido Arango Arias. Y el año pasado recibió una nueva donación de obras y objetos del artista Aurelio Suárez.

13. Obras pertenecientes al Museo Nacional del Prado de Madrid

El Museo de Bellas Artes de Asturias acoge en su sedes obras pertenecientes al Museo Nacional del Prado. Un depósito que es «uno de los más selectos y mejor vinculados del llamado Prado disperso». Formado por 44 piezas, abarca desde el siglo XVI hasta principios del XX, con ejemplos significativos de los principales estilos de la historia del arte moderno y contemporáneo: renacimiento, manierismo, barroco, neoclasicismo, romanticismo y realismo. Entre ellas destaca Santa Catalina, de Alejandría de Tiziano; la Anunciación, de Vicente Carducho, o Ayer y hoy, de Cecilio Pizarro, entre otros muchos. Además, la pinacoteca también hace intercambios con otras galerías nacionales como puede ser el Museo de Bellas Artes de Bilbao o el Museo Thyssen de Málaga, con quien son «muy frecuentes» las relaciones.

 14. Intercambios internacionales

De la misma manera que el Museo de Bellas Artes intercambia obras con pinacotecas españolas también lo hace con galerías internacionales. Hasta la fecha se han dado relaciones con la National Gallery de Londres, la National Gallery de Washington, el Museo Guggenheim de Nueva York, el Museo Meadows de Dallas, el Museo del Barroco de Puebla (México) y muchos más.

 15. Obras del Museo de Bellas Artes, en el palacio de Presidencia

La pinacoteca mantiene depósitos «controlados» en 13 importantes instituciones; entre todas ellas destaca el palacio de los presidentes. El edificio que acoge la Presidencia de Gobierno del Principado de Asturias cuenta con varias obras pictóricas y esculturas de tiempos y estilos muy diferentes pertenecientes al Museo de Bellas Artes.

16. Una biblioteca dentro de la pinacoteca

El Museo de Bellas Artes dispone de una biblioteca en la que se lleva a cabo el estudio y la investigación histórico-artística. Con una colección que supera los 30.000 volúmenes, esta cuenta con títulos sobre las diferentes disciplinas artísticas, además de la museología. También alberga las colecciones de museos, obras sobre conservación y restauración, historia y, por supuesto, todas las publicaciones editadas por el Museo. Entre su fondo antiguo, la biblioteca atesora una serie de destacados títulos de la historiografía artística española: 24 anteriores al año 1801 y más de 400 correspondientes al siglo XIX, «muchos de ellos con interesantes grabados y encuadernaciones».

17. Actividades culturales

Con el objeto de acercar sus colecciones y exposiciones temporales a la sociedad, el Museo de Bellas Artes de Asturias organiza durante todo el año una serie de visitas, talleres, conferencias, ciclos de cine y un largo etcétera de actividades didácticas. Todas ellas son gratuitas y están adaptadas a los distintos públicos. 

18. Ni un solo robo

Durante todos los años que lleva en funcionamiento, el Museo de Bellas Artes de Asturias no ha sufrido ni un solo robo, tal y como asegura el conservador-jefe de Arte Antiguo. «El equipo actual del museo actúa permanentemente con la debida profesionalidad para evitar cualquier incidente o accidente que suponga degradación, pérdida o daño para las obras de arte que custodia», resalta Gabino Busto Hevia.

19. Un alto nivel de visitas

Aunque el número de visitas varía, lógicamente, dependiendo del año, uno de los registros más altos se dio en el 2019 con un total de 111.841 visitantes. Los usuarios, en su mayoría, proceden de Asturias y de diversos puntos de nuestro país. No obstante, «hay un repunte importante del visitante extranjero». El perfil dominante, como ocurre en otros museos de similares características, corresponde a visitantes con nivel cultural medio y alto.

 20. Una asociación de Amigos del Museo

Con el objetivo de apoyar e impulsar las actividades de la pinacoteca asturiana desde la colaboración y la divulgación de sus colecciones y actos culturales, en el año 2019 se fundó la asociación Amigos del Museo de Bellas Artes de Asturias. El colectivo persigue «potenciar la integración del mismo en la sociedad, darlo a conocer y favorecer el incremento de sus fondos artísticos». Es por ello que cualquier persona en conservar y difundir el valor patrimonial de la galería puede ser socio de la misma. Tan solo hace falta rellenar un boletín de mecenazgo y el consentimiento de tratamiento de datos personales. Una vez estén cubiertos estos documentos se pueden enviar los mismos por correo postal o correo electrónico a la dirección amigos@museobbaa.com o bien entregarlos en la recepción del Museo de Bellas Artes de Asturias.