El ayuntamiento de Oviedo pide a los gobiernos central y regional poder contar con el remanente sin limitaciones

El pleno del Ayuntamiento de Oviedo ha aprobado una proposición para pedir a los gobiernos central y regional que pongan en marcha medidas para afrontar la crisis económica ocasionada por el coronavirus, entre las que se encuentra el uso de todos los remanentes de tesorería sin limitación, la interrupción temporal del Plan Económico Financiero y la flexibilización de los criterios de estabilidad presupuestaria y la regla de gasto.

La iniciativa ha contado con el apoyo del PP, Ciudadanos y Vox y el rechazo del PSOE y Somos Oviedo, que han votado en contra después de que se rechazase la inclusión de las enmiendas que habían propuesto para sumar un plan de actuación municipal al texto. En el caso de la enmienda socialista, el bipartito de PP y Ciudadanos accedió a incluir el punto que instaba al Gobierno central a flexibilizar la tasa de reposición, aunque finalmente no fue sumado a la propuesta al no poder desligarlo de la petición de un plan de actuación municipal que incluya a los agentes sociales y empresariales del concejo.

El concejal de Personal, Mario Arias, ha reconocido que una parte de la enmienda socialista «mejoraba el texto» presentado por el Gobierno municipal, pero entendía que el plan actuación municipal no debía ser incluido porque «es algo en lo que ya se está trabajando» y que se llevará a cabo en futuras sesiones plenarias. Respecto a la iniciativa propuesta por su grupo, Arias ha subrayado que esta crisis exigirá «un gran esfuerzo económico» a los ayuntamientos, por lo que necesitarán disponer de todos sus recursos.

En su intervención también ha emplazado a los gobiernos central y regional a que sean «solidarios» y que «repartan a los ayuntamientos lo que es suyo». Por su parte, el portavoz socialista, Wenceslao López, ha lamentado que no se haya podido llevar este punto como «declaración institucional», ya que demuestra que no se ha podido llegar a consenso en una situación tan delicada, algo en lo que «todos tenemos parte de responsabilidad», ha reconocido.

Acerca de la iniciativa del bipartito, ha explicado que su voto en contra se debe a que incluye «deberes para los demás, pero ninguna obligación» para el consistorio. Desde su punto de vista, la enmienda planteada por el grupo socialista mejoraba la propuesta porque incluía al Ayuntamiento de Oviedo como «tercera administración», entendiendo que es «imprescindible en esta lucha», y pedía que se contara con los agentes sociales y empresariales para superar esta situación.

Esta crítica al texto también ha sido compartida por la portavoz de Somos Oviedo, Ana Taboada, que ha lamentado la falta de «medidas concretas» que va a adoptar el Ayuntamiento para ayudar a autónomos, pymes o familias. Taboada ha insistido en que su grupo está a favor de disponer de los remanentes de tesorería, pero le preocupa que «no digan qué van a hacer con ellos», ya que no presentan ningún plan de reinversión ni establece las nuevas prioridades presupuestarias tras la pandemia.

El único grupo de la oposición que ha apoyado la moción ha sido Vox, aunque su portavoz, Cristina Coto, ha reconocido que «falta la pata municipal». A su juicio, las peticiones que realiza en el documento son correctas, pero considera que el Ayuntamiento debería «anticiparse y proponer medidas» en el ámbito municipal, un aspecto en el que «vamos retrasados». Por último, el concejal de Ciudadanos Luis Pacho ha pedido a los grupos de la oposición que «sean justos», ya que el Gobierno municipal «ha sido transparente» y ha informado a diario de las acciones que está llevando a cabo.