La sonrisa de Nicolás, el perro abandonado en la basura tras una paliza

Nicolás, el perro que apareció el pasado viernes en la basura tras haber recibido una brutal paliza, se recupera poco a poco y ya esboza, como se puede ver en el vídeo, una medio sonrisa perruna. «Está despierto y animado, dentro de su estado», explica Eva Rodríguez, del albergue de animales de Oviedo, en donde Nicolás se recupera de las heridas sufridas y espera por un nuevo hogar. «Muchísimas personas han llamado interesándose por él para saber su estado y también algunos para adoptarlo», indica Rodríguez, que añade que Nicolás aún debe evolucionar de sus lesiones y, en cualquier caso, las personas interesadas deben seguir el proceso de adopción, acercándose hasta el albergue en La Bolgachina para llevarla a cabo.

Nadie se ha acercado al albergue para adoptarle

«Hasta el momento solo una persona lo ha hecho», explica, aunque sería para tenerlo en una nave. «Nadie más ha venido para cubrir el cuestionario y así poder comenzar el proceso de adopción», lamenta. A Nicolás, que recibió este nombre por salir vivo de una paliza salvaje en plenas fiestas navideñas, ya se le ha retirado la sedación de forma definitiva y le ha ido bajando la inflamación del cráneo, que tenía completamente deformado en el momento de ser encontrado dentro de un saco que había sido tirado a un contenedor en el barrio ovetense de La Manjoya. También ha recuperado la movilidad de los párpados, pero continúa presentado midriasis en los ojos, con lo que sigue sin poder ver. 

«Ha conseguido ponerse en pie y dar dos pasos.  Aunque está muy débil para sostener su escaso peso sobre sus patas y permanece durante todo el tiempo acostado», añade Rodríguez. Nicolás es un pastor alemán de entre tres y cuatro años, que volvió a nacer como quien dice cuando fue descubierto por un vecino que estaba tirando la basura cuando se percató que había movimiento en un saco blanco que estaba en el interior del contenedor, además del sonido de una respiración fuerte. 

Imagen de la campaña nacional contra el maltrato animal

El animal tenía un grave traumatismo en la sien derecha, ambos ojos también presentaban traumatismos, hemorragias y tercer párpado. Fue apaleado con tanta fuerza que también sangraba por la boca, por los orificios nasales y tenía diversas heridas en la piel. Además, se encontraba en estado de hipotermia, con una delgadez extrema y deshidratación severa, y, de hecho, necesitó 2,5 litros de suero. Los arcos cigomáticos estaban, además, fracturados. No tenía microchip y sigue sin saberse quién pudo cometer esta acción de extremo maltrato animal.

No en vano, la fotografía de Nicolás herido, cuando fue descubierto, es ya la imagen de la campaña nacional de recogida de firmas en change.org para exigir que el maltrato animal reciba penas de prisión más graves y que los animales no puedan seguir en manos de maltratadores. La campaña, que va encaminada a que se tramite un proyecto de ley que modifique el artículo 337 del Código Penal para incorporar un subtipo agravado de delito de maltrato animal que se ajuste a la gravedad de casos como el de Nicolás, suma mas de 310.000 firmas. También se exige que los animales salvajes se incluyan en el tipo delictivo y que se aumenten los tiempos de inhabilitación especial para tenencia de animales y desempleo de profesión, ejercicio y comercio con animales.