La tierra donde el buen comer es religión

Que a un asturiano se le conquista por el estómago no es ningún secreto. La gastronomía de la región es una de las señas de identidad de una tierra en la que el buen comer es casi religión. Los platos tradicionales se mezclan con otros más populares que poco a poco han sabido conquistar a los comensales de fuera de las fronteras de la comunidad y también con las elaboraciones más sofisticadas. La cocina asturiana es la de las farturas, la contundente, pero es mucho más. La oferta es amplia y cada vez son más los restaurantes que ofrecen vanguardia de la mano de alguno de los chefs más respetados de España. Pero sea cual sea el tipo de cocina que se elija, todos los platos tienen un punto en común: la calidad del producto. Con esta materia prima, y también con el trabajo de las administraciones para proteger y promocionar los alimentos con marcas de calidad, Asturias ha sabido situarse en un lugar de privilegio dentro del panorama nacional. Y a impulsar su fama ha contribuido que Oviedo sea este 2024 Capital Gastronómica de España, un galardón del que se está beneficiando toda la comunidad.

La gastronomía asturiana es un festín para los sentidos, combinando productos del mar y de la tierra, y está profundamente arraigada a la tradición y al amor por la buena comida. El consejero de Medio Rural y Política Agraria el Principado, Marcelino Marcos, destaca en este suplemento la importancia de contar con una marca como Alimentos del Paraíso, que supone una seña de identidad que permite asegurar la calidad del producto y situar al sector agroalimentario de la región como un referente. Además, el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, subraya el buen momento que vive la capital y pone en valor el reconocimiento como capital gastronómica para el turismo de la ciudad y de la región. El concejal de Hostelería de Oviedo, Alfredo Quintana, detalla todo lo que ha supuesto el distintivo.

La Sidra: el alma de Asturias

Ningún artículo sobre la gastronomía asturiana estaría completo sin mencionar la sidra, la bebida emblemática de la región. Escribir sobre ella merecería un suplemento propio, pero lo que realmente distingue a la sidra asturiana, o al menos lo que llama la atención a los visitantes, es la forma en que se sirve: escanciada. Para los asturianos, la sidra es más que una bebida; es una experiencia social, un ritual que une a la gente y celebra la cultura asturiana. Y a engrandecerla todavía más puede contribuir su esperado reconocimiento como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Y esa cultura no podría entenderse sin las sidrerías, el referente hostelero de la región. Para poner en valor la idiosincrasia de esta forma tan particular de entender la la hostelería, el Principado ha impulsado la marca Sidrerías de Asturias-Calidad natural, un sello que nació en 2017 para identificar los locales en los que se puede experimentar la cultura sidrera en toda su dimensión.

Platos tradicionales: un viaje de sabores 

La fabada asturiana es el plato más icónico de la región, pero no es el único. Aunque le dedicamos un capítulo especial por ser el claro referente, hay otros como el pote, los tortos, el arroz con leche o los frixuelos que también se sitúan entre las elaboraciones más deseadas y representativas del Principado. El cachopo, que no tiene la tradición de los citados anteriormente, ha sabido hacerse un hueco y es sin duda uno de los platos más populares. Pocos son los visitantes que vienen a Asturias y se van sin comer uno.

Las IGP

Dentro de esa apuesta por poner en valor la calidad del productos, destacan los cinco alimentos incluidos dentro de la Indicación Geográfica Protegida (IGP), una etiqueta de calidad alimentaria de la Unión Europea. Se trata de la Faba asturiana, Ternera Asturiana, Chosco de Tineo, Queso Los Beyos y Miel de Asturias.

Tierra de quesos

Asturias es conocida como la tierra de los quesos. La región produce más de 40 variedades de queso, cada uno con su propio sabor y textura. El más famoso de todos es el queso Cabrales, que tiene otros referentes como el Afuega'l Pitu, el Gamonéu y el Queso de La Peral. Estos quesos no solo se disfrutan como entrantes o postres, sino que también se utilizan en la cocina asturiana, agregando profundidad y carácter a muchos platos.

Explorar la gastronomía asturiana es embarcarse en un viaje de sabores y tradiciones. Desde la sidra y la fabada hasta los mariscos frescos y los quesos únicos, cada plato cuenta una historia de la región y su gente. Ya sea disfrutando de una comida en un chigre o participando en un festival gastronómico, la experiencia culinaria en Asturias es una que se queda en el corazón y el paladar.