Resulta que ser una zorra es lo mejor
Opinión
29 Feb 2024. Actualizado a las 05:00 h.
Ahora que los posos del Benidorm Fest se han precipitado, que los medios han dado tregua y que la distancia nos permite pensar de forma más fría, he decidido opinar sobre el tema de la canción ganadora. Confieso que cuando escuché la canción Zorra no le auguré un largo futuro, pero me equivoqué, Zorra se situó entre las tres canciones más escuchadas de las listas de Spotify. Como diría Rafael El Gallo: «hay gente pa tó».
Es indiscutible que la coyuntura social y política ha hecho mucho por intensificar su éxito. Su proverbial aparición ha sido muy calculada y la canción, por lo general, gusta. Zorra se ha convertido en todo un himno al feminismo, pero ¿de verdad la gente se ha parado a escuchar la letra? Si hiciéramos un análisis riguroso del mensaje de esta composición nos encontraríamos ante un mensaje ofensivo, incoherente y absurdo. Muchas mujeres, incluidas las feministas, no se sienten en absoluto identificadas con el mensaje. La canción en cuestión pretende jugar con la connotación despectiva de la palabra zorra, pero dando una vuelta al concepto, de manera que ahora, la mujer enarbolaría con orgullo su nueva condición de mujer libre.
A mi juicio, esta paradójica canción no hace más que confirmar un estereotipo machista de mujer licenciosa de vida alegre que, reafirma la opinión de los más recalcitrantes y retrógrados varones. Por poner un ejemplo, es como si quisiera fomentar la tolerancia hacia la cultura islámica diciendo que soy un «moro de mierda». La mayoría de nosotros comprendemos que en el fondo se persigue la reivindicación de la libertad de la mujer, pero desde luego la letra no es nada acertada. Conozco a mucha gente que opina que esta canción es una protesta, algunos de ellos me insistieron en que no analizara tanto la letra, para ellos simplemente es una demanda social en tono jocoso. Pero ¿de verdad le gustaría que su hija se empoderara convirtiéndose en una zorra? Dicho esto, casi no habría más que comentar. Quedan poco más de dos meses para que la extravagante canción Zorra participe en el Festival de Eurovisión. Con esta perla y sin un ápice de complejo, las mujeres españolas serán representadas en todo el mundo.
Créame si le digo que me gusta casi todo lo transgresor e irreverente. Aunque han pasado ya algunos años, me reí mucho con el Chiquilicuatre -pese a que pasé un poco de vergüenza ajena-. Pienso que todos deberíamos tomarnos la vida con sentido del humor, pero en este caso, ha triunfado tanto el mal gusto como la confusión de términos, porque si es necesario autoinsultarse para reivindicar los derechos de la mujer, mal vamos.
Me atrevo a decir que no ganaremos en Eurovisión, apuesto algo. Pero de lo que estoy seguro, es que la canción Zorra del grupo Nebulossa se va a oír mucho, mucho, mucho -vaya preparándose- Estamos ante un emblema al desvarío que seguramente va a arraigar durante un tiempo. Y no me refiero sólo al territorio español, sino al resto de Europa. Tal vez nuestros vecinos tienen más perdón, ellos no entienden muy bien la letra, al fin y al cabo, ¿qué extranjero entendió el mensaje de La Macarena o del Aserejé? Así es la música.