El lado oscuro del corazón les desea feliz año nuevo
Opinión
01 Jan 2017. Actualizado a las 05:00 h.
Eduardo Subiela murió el 25 de diciembre pasado. Era el guionista y director de El lado oscuro del corazón. Desde Subiela (con Subiela, contra Subiela) sabemos que el corazón tiene un lado oscuro. Lo sabíamos desde antes, pero no habíamos llegado a comprender que este lado oscuro es el de la poesía. La claridad viene del cielo, siempre, pero no de la poesía, oscuro país. Con poemas de Oliverio Girondo, de Juan Gelman, de Mario Benedetti, armó Subiela su nocturna odisea de palabras. El protagonista, Oliverio, quiere salvarse y quiere hundirse. Oliverio es Johnny Depp y es Robert Downey Jr. y era Amy Winehouse, poetas de la destrucción. La claridad viene del cielo para iluminar la interminable contienda de Carrie Fischer, hermosa princesa Leia, reina del desparpajo adicta al mando. Cuarenta años ya desde que nos llegó un mensaje de una galaxia muy, muy lejana. El tiempo se mide ahora en la carga de nuestro móvil; el espacio, en la existencia de un lugar en el que pueda cargarse. Los bares, las cafeterías, las delegaciones de Hacienda, las universidades públicas y privadas, ¿las iglesias?, han habilitado surtidores de gasolina telefónica. La era wireless es más wire que less (y no solo por la serie de televisión). Se ha muerto gente este 2016. Gente como Carrie, gente de esa importante y que sale en las revistas especializadas y en los diarios y los blogs y en el twitter de los influencers. Se han ido ídolos, mitos, celebrities. Se han ido también personas cercanas. Todos dejan huella. Se cierra el año en el que niños sobreactuados y algo repelentes hacen recetas de cocina y de política (pongan cara y nombre, si quieren). Qué pereza hacer recuentos: de libros, de elecciones, de tragedias, de imágenes, de músicas, de amores. Apenas queda tiempo para el pasado cuando se mira al futuro. Yo he vivido este año pensando en la frase que le dice al doctor House su jefa después de que éste estableciera una analogía algo traída por los pelos como hipótesis para hacer un diagnóstico: «has encontrado una relación porque te divierte encontrar una relación». Y es verdad. Feliz año nuevo.