¿Es posible la construcción de viviendas desconectadas de la red eléctrica?

El hogar del futuro está en Oviedo. La empresa asturiana Sunthalpy ha construido una vivienda de 200 metros cuadrados, de clima atlántico, totalmente desconectada de la red eléctrica que utiliza sólo energía solar y con el mayor confort imaginable.

Cuando era apenas un niño, Omar Suárez, actual CEO de la compañía, soñaba con casas que funcionasen solamente con energía solar. Esa meta lo guió durante toda su vida profesional, tanto en su formación como en el ámbito laboral en el sector de la automatización y las industrias energéticas. Con este propósito, en 2017, fundó Sunthalpy, una empresa que ha desarrollado una tecnología —patentada a nivel europeo— llamada edificio solar de baja entalpía, que básicamente es un inmueble que funciona en su totalidad gracias a la luz del sol, lo que satisface todas las necesidades energéticas, incluso en días nublados, a la vez que almacena la electricidad de modo eficiente.

«Esto supone una auténtica revolución en el modo de vida, con los máximos estándares de seguridad, salud y sostenibilidad. Sunthalpy ha evolucionado la tecnología junto al grupo Alibérico para que sea totalmente industrializable para su utilización a gran escala. Una vez alcanzado ese hito, buscaremos la financiación necesaria, teniendo negociaciones avanzadas con varios grupos inversores e industriales», explica Omar. 

La base de toda esta propuesta innovadora se sitúa sobre la propia estructura de hormigón del edificio, que pasa a ser en realidad una batería térmica de alta eficiencia gracias a la inclusión de un suelo radiante desarrollado por la entidad. Este elemento hace posible que el edificio se pueda refrigerar o recibir calor a través de la utilización de agua a tan sólo 20,5 ºC. Básicamente, es un intercambiador de calor instantáneo, el cual posibilita que las losas estructurales del inmueble se conviertan en emisores de calefacción y refrigeración, hasta el punto de poder eliminar la necesidad de aire acondicionado. 

Otro elemento fundamental ha sido la conversión de las fachadas y cubiertas en captadores híbridos de calor y electricidad integrados en la propia arquitectura del edificio. La parte térmica refrigera los paneles fotovoltaicos para mejorar su rendimiento. Con esa energía eléctrica se puede mover una bomba de calor que permite hacer funcionar los paneles térmicos en frío en días nublados de invierno. Del mismo modo, estos paneles son más resistentes e integrados arquitectónicamente que los existentes hasta el momento y, además, optimizan la gestión eléctrica: «No existe nadie que ofrezca algo equivalente en el mundo», afirma Omar Suárez. 

Por si fuera poco, esta tecnología permite tanto construir como reformar viviendas unifamiliares o edificios de altura. «En la actualidad trabajamos en una veintena de proyectos principalmente de familias que quieren independizarse de los combustibles fósiles, para sentirse más sostenibles tanto económica como medioambientalmente. También colaboramos en proyectos de empresas para sus procesos productivos de baja temperatura», expone Suárez.  Igualmente la entidad centra sus esfuerzos en el aumento de su capacidad productiva, así como en la reducción de los costes. «Con ello esperamos tener la capacidad real para descarbonizar todos los edificios de Europa», enfatiza. 

Apoyos del Idepa

Los apoyos del Instituto de Desarrollo Económico (Idepa) y el Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI), ambos del Principado de Asturias, han supuesto una gran ayuda para la empresa. Así lo corrobora Omar Suárez, quien también detalla que, además de darles apoyo financiero a través de concursos de innovación y emprendimiento, les han facilitado un importante espaldarazo institucional. 

De hecho, en 2020 Idepa les concedió una subvención de 30.000 euros. Igualmente con el CEEI fueron asesorados en la elaboración de su plan de negocios, aspectos jurídicos, así como el acompañamiento en la búsqueda de financiación. Por si fuera poco han participado en diversos programas como “Crea&Tech”, orientado a fomentar la competitividad de las empresas y proyectos empresariales de la industria creativa asturiana; “Se busca SEO”, para el fortalecimiento de su equipo de trabajo;  la aceleradora para la internacionalización “Quick Global”, para acceder a mercados internacionales. Desde agosto de 2021 hasta enero del actual año la empresa dispuso de una oficina en la incubadora gestionada por el CEEI en el Parque Tecnológico de la comunidad asturiana. 

Por otro lado, Sunthalpy tiene los sellos de “Pequeña y Mediana Empresa Innovadora”, del Ministerio de Ciencia e Innovación y de “Empresa de Base Tecnológica”, de la Red de Centros Europeos de Empresas e Innovación . En el año 2019 la patente de la compañía resultó vencedora en los Premios CEEI Asturias. El pasado 2021 también ganaron un premio Radar a la Innovación Emprendedora en la región, en la modalidad “EBTs Innovación abierta”, por su colaboración con el grupo Alibérico.