Reclaman al Sespa un compromiso de atención sanitaria para un bebé saharaui de 3 meses

La Asociación Asturiana de Solidaridad con el Pueblo Saharaui denuncia que el Servicio de Salud del Principado de Asturias deniega el compromiso de atención sanitaria en un centro hospitalario de Asturias a un bebé de tres meses que precisa de intervención quirúrgica urgente debido a una parálisis braquial del brazo izquierdo como consecuencia de un parto complicado. Dicho compromiso es un requisito imprescindible para que el bebé y su madre, que residen en los campamentos de refugiados saharauis, puedan obtener el visado de entrada en España. 

Según explican en la Consejería de Salud, el Sespa no ha denegado asistencia sanitaria al menor, matizando en este sentido que no tiene competencias en su traslado y recordando que la sanidad universal que presta el servicio de salud beneficia a «todas las personas, sean de donde sean, tengan la edad que tengan, que estén en suelo asturiano y necesiten asistencia sanitaria». 

La petición al Sespa del compromiso de atención en un centro hospitalario de Asturias fue realizada por la Asociación Asturiana de Solidaridad con el Pueblo Saharaui a expensas de la Oficina de Evacuación del Ministerio de Salud Saharaui, una vez agotadas todas las vías de solución del problema de salud del citado menor, tanto a través del sistema de salud de los campamentos de refugiados saharauis, como del argelino, al que fue derivado el caso en última instancia.

La no intervención le provocaría al pequeño, que se llama Brahim Abdelahe Galah, una grave discapacidad de por vida, según señalan en la asociación, donde consideran «incomprensibles» la respuesta y el argumento del Sespa, «mostrando su negativa e insensibilidad humana al compromiso de atención solicitado», que se basa en que «tiene un convenio establecido con Cruz Roja para la atención de personas enfermas saharauis que no contempla el albergue y la atención de menores en el recurso habitacional del que esta dispone».

En la asociación explican que ya conocían esta circunstancia «de ahí que la solicitud de atención partiera de esta entidad concreta de manera excepcional, e independientemente del citado convenio,  aportando carta del compromiso de asumir por parte de la misma todos los gastos relativos al viaje del menor y la madre así como los de alojamiento y manutención hasta su retorno a los campamentos de refugiados saharauis una vez solucionado el problema».

En este sentido, remarcan que lo único que se pide es la garantía y compromiso de atención al menor por parte del Sespa. «No son comprensibles ni lógicas las trabas burocráticas ante un problema de salud de tamaña gravedad y urgencia; Se trata de un caso de derechos humanos proveniente de una zona en conflicto con la que España tiene contraída una responsabilidad histórica», recuerdan.