Así se quiere modernizar el parque científico y tecnológico de Gijón
Gijón
Un estudio plantea que se genere nueva superficie construida, llave en mano, con una nueva fachada hacia la avenida de la Pecuaria
08 Oct 2019. Actualizado a las 05:00 h.
El Parque Científico y Tecnológico de Gijón (PCTG) necesita crecer, pero debería hacerlo de manera innovadora para no quedarse atrás en las tendencias que marcan el desarrollo económico de las ciudades. Así lo remarca el estudio encargado por el Ayuntamiento de Gijón a la consultora Taso Desarrollos para definir la estrategia de ampliación del PCTG con los terrenos de la Pecuaria de Somió.
De hecho, el estudio plantea que, además de esa ampliación, el parque científico debería ajustar su modelo, «gestado hace ahora 20 años», a las nuevas tendencias en espacio de innovación y a las nuevas demandas, de manera que se reordene e impulse lo que ya existe renovando el enfoque estratégico.
También pone de manifiesto las carencias del actual parque empresarial, como la rigidez para responder a las nuevas formas de implantación de empresas y entidades o la «débil cohesión y articulación interna» de la denominada Milla del Conocimiento, «donde el papel de lugar central de la Laboral está aún por explotar». O la escasez de oferta para satisfacer la demanda de espacios llave en mano, sobre todo por parte de startups en fase de crecimiento y de potenciales proyectos de fuera de Asturias.
Ante ello, el modelo de crecimiento planteado insta a potenciar como marca y escala de trabajo la Milla del Conocimiento y aprovechar las oportunidades de la Pecuaria ampliando el parque (que hoy tiene 169.000 metros cuadrados) con una superficie de 220.000 metros cuadrados, de los que 132.000 metros ya son terrenos municipales y el resto perecen a La Formigosa.
Esta ampliación complementaría el recinto de Cabueñes y la zona INTRA, pero además se aboga por que se perfeccione la oferta actual de espacios construidos y se tenga en cuenta la conveniencia de disponer de un edificio emblemático, «que ofrezca el contrapunto en la Pecuaria al edificio de Impulsa».
La consultora también propone que la misión del ayuntamiento, a través de su centro municipal de empresas Gijón Impulsa, no se centre tanto en generar una oferta de parcelas, sino superficie construida que se ajuste a las nuevas demandas de implantación y de espacios de trabajo. Una demanda, que hoy no está debidamente atendida, y que consistirá en oficinas llave en mano, diáfanas y con una superficie de entre 200 y 500 metros cuadrados.
En este sentido, el estudio indica que las startups locales en crecimiento y las empresas de fuera de Asturias interesadas en una implantación singular en la ciudad serían los dos principales grupos que potenciarían un futuro crecimiento de la Milla del Conocimiento.
Se hace hincapié, de hecho, en que Gijón debe «tomarse en serio promover soluciones inmobiliarias innovadoras en términos de concepto y diseño, que den respuesta a las nuevas demandas en materia de espacios de trabajo». Unas demandas que pasan por que sean lugares también para el descanso, para la interacción, con estándares de confort similares a los de un entorno doméstico y en los que no se descuide la introducción de elementos vegetales tanto en el interior como en el exterior.
También se propone generar una fachada principal hacia la avenida de la Pecuaria y darle importancia a la existencia de una plaza pública que de lugar a situaciones informales de contacto, algo de lo que carece el recinto de Cabueñes. Del parque tecnólogico de Cabueñes se destaca, además, lo significativo que resulta el dominio de la superficie consumida por el vehículo privado, en donde consideran que la Pecuaria podría suponer un punto de inflexión.