«Este primer año de legislatura ha sido tiempo perdido para dar respuesta a los problemas de Gijón»
Gijón
«El problema de Foro es que, al no tener un proyecto de ciudad ni tampoco prioridades, no saben qué hacer con el dinero y por eso queda sin gastar», asegura el portavoz municipal del PSOE
11 Sep 2016. Actualizado a las 05:00 h.
José María Pérez (Luarca, 1970) volvió el año pasado al Ayuntamiento de Gijón, en el que había sido concejal durante las legislaturas 1999-2012, tras su paso como diputado del PSOE en la Junta General del Principado. Asegura que la principal prioridad de su grupo municipal es «cambiar la forma de gobernar esta ciudad, porque si no cambias eso todo lo demás sobra» pero asume que sin el acuerdo de los tres grupos de la izquierda no habrá manera de llegar a buen puerto.
-¿Qué balance hace de este primer año de legislatura municipal?
-Ha sido tiempo perdido. Tiempo perdido para dar respuestas a los problemas de la ciudad, para sacarle provecho a los recursos que tiene este ayuntamiento, para resolver esos problemas y para convertir una mayoría de izquierdas clara en una opción de gobierno que dé un giro a la vida de la ciudad.
-¿Qué le echa en cara al gobierno de Foro?
-Ha sido un año de continuismo en el peor sentido de la expresión porque quien venía ya con cuatro años de experiencia ha demostrado que es capaz de empeorar su propia gestión y de desaprovechar con más intensidad los recursos que tiene Gijón. Del presupuesto de 2015, quedaron 55 millones de euros sin tocar, que ya habían sido unos 42 millones en el de 2014 y en torno a los 30 millones en 2013. Esto es un dato suficientemente elocuente de la incapacidad de Foro para gestionar la ciudad y para buscar soluciones a sus problemas.
-¿Cómo puede ser que sobre dinero en un ayuntamiento en plena crisis?
-Porque tienen una incapacidad de gestión absoluta y resuelven los problemas metiéndolos en el cajón y olvidándose de ellos para ver si se solucionan solos por azar. Un ejemplo es el plan de choque. El 13 de junio de 2015 se constituye el ayuntamiento y en torno al día 18 de junio todos los grupos políticos nos reunimos para hablar de la aplicación de 10 millones de euros a un llamado plan de choque social. Y así lo llamó el gobierno. Se acordaron una serie de medidas y se consensuaron entre todos. A diciembre de 2015 apenas se habían ejecutado 400.000 euros de los 10 millones y, a estas alturas, un año y pico después, probablemente la cantidad ejecutada no supere en mucho el millón de euros. Un ejemplo más de que no son capaces de utilizar los recursos ni de cumplir los acuerdos. Esa incapacidad tiene mucho que ver con su falta de interés en lo que pasa en Gijón y su falta de compromiso respecto al cargo que ocupan.
-Desde la oposición insisten en que, además, no se ejecutan los acuerdos que se alcanzan en los plenos.
-Como si no se aprobaran... El equipo de gobierno dice sí a casi todo pero luego no hacen nada. Dijeron sí a los vecinos de Jove cuando les plantearon que estaban perdiendo ayudas sociales por la gestión del arreglo de las fachadas de su barrio y, cinco meses después, dicen que sería ilegal dar unas ayudas que ellos mismos plantearon. Dicen sí a analizar y modificar las bases que regulan la rehabilitación de barrios en mal estado pero cinco meses después nos vienen a decir que no hay nada que cambiar y que lo van a dejar todo como estaba. Y votan que sí en los plenos. Dijeron que sí a los planes de empleo el verano pasado pero no contrataron un solo programa de los acordados a día de hoy. Un año y pico después. Otro ejemplo más anecdótico: dijeron sí a la remodelación del kilometrín y seguimos con el kilometrín como estaba.
-¿Qué grandes consensos se han alcanzado?
-Básicamente el que se alcanzó en su día para aprobar el plan de choque y poco más que eso, porque luego ha habido acuerdos en algunas modificaciones presupuestarias puntuales y en algunas ordenanzas como la de transparencia que se aprobó haces unos días, pero en realidad en temas relativamente menores. En los importantes, el principal fue el plan de choque, en el que hubo un consenso para atajar un problema social que sabemos que existe.
-Afear esos incumplimientos parece que sigue sin funcionar?
-El gobierno, en el ejercicio de sus competencias, tiene plena autonomía para actuar. Tiene un mandato político del pleno para que haga una serie de cosas. Un mandato en el que ellos mismos votaron favorablemente. Si no hacen lo que acuerda el pleno hay poca más opción que quitarles de gobernar y cambiar al gobierno. La estrategia que desarrollan parece ser bastante consciente de eso y de que quienes en el pasado no tenían mucho interés en que Foro saliese de la alcaldía siguen hoy tenerlo. O al menos una parte? Ante esa falta de cumplimiento y de ejecución de los acuerdos y de voluntad política de cumplir lo que dice la mayoría plenaria, pocas opciones más existen que una moción.
-¿Hay alguna posibilidad de que ese acuerdo de los grupos de izquierdas se materialice en esta legislatura?
-Podría haberla, pero para que haya posibilidades hay unas cuestiones muy básicas que todos tenemos claras desde hace más de un año. Hubo unas elecciones municipales y un resultado que nos asigna un número de concejales a cada grupo político. Si queremos hablar y construir algo ése es el punto de partida, y si eso no nos sirve pues entonces es muy difícil conseguirlo. Y, segundo, no es una cuestión de si es el proyecto de uno u otro partido. Tenemos que ser capaces de construir un proyecto entre varias organizaciones que tenga un horizonte claro de actuación y para eso se agota el tiempo. Porque ya pasó más de un año, vamos camino del año y medio y el gobierno no es plenamente operativo desde el día en que toma posesión. Por lo tanto, si seguimos así no hay tiempo para que un gobierno nuevo pueda actuar y no tendría ninguna lógica. Además, cuando antes de junio se planteaba la constitución municipal estaban sobre la mesa los programas de las distintas fuerzas políticas y los elementos que podíamos compartir quienes sumamos 15 de los 27 diputados eran muchos más de los elementos que nos podían separar.
-¿Por ejemplo?
-Hicimos un documento con lo que teníamos en común con 66 medidas, que formalizamos con IU. Y esas 66 medidas en buena medida estaban también en el programa de Xixón sí Puede y Equo, y así lo reconocieron en la reunión que se produjo aquí. ¿Qué nos separa? Más que lo estaba en los programas era una especie de veto a que el PSOE ocupase el papel que le habían dado los ciudadanos en las urnas. Porque lo que se vetaba era que el PSOE encabezase ese gobierno pese a que es la fuerza con más votos de las tres. El criterio de que la alcaldía la encabezase el partido más votado es un criterio que, por cierto, se estaba siguiendo en todos los municipios en los que hubo acuerdos de cambio con interlocutores similares.
-En mayo el portavoz de Xixón sí Puede, Mario Suárez del Fueyo, planteaba en una rueda de prensa una moción contra Foro pero insistiendo en que la suma de concejales de XsP e IU, entonces ya en coalición, era mayor que el número de ediles socialistas.
-Más que para decírnoslo a nosotros creo que, como previamente Manolo Orviz les había afeado lo que pasaba en Gijón, era una respuesta a IU. En todo caso eso sucedió antes de unas elecciones en las que la coalición tuvo una pérdida muy importante de votos tanto en Gijón como en Asturias. Y nosotros lo dijimos entonces y lo seguimos manteniendo: si el resultado de las elecciones municipales no vale, no hay nada que hablar. Si consideran que no vale el resultado electoral y esto es una cuestión de que alguien se rinda, es evidente de que así no hay forma de que llegue a ningún puerto.
-¿Cree que esta legislatura finalizará sin ese giro a la izquierda en el gobierno del Ayuntamiento de Gijón?
-Como ya dije antes no es una cuestión que se pueda producir un año o seis meses antes de unas elecciones municipales; se va agotando el tiempo aunque eso se puede producir. El 13 de junio dije que la decisión que había adoptado Xixón sí Puede era una decisión de largo plazo y, si lo consideramos en términos de contabilidad, el plazo largo es un año. El problema es que esta situación se está convirtiendo en un problema para la ciudad por la incapacidad del gobierno para gestionar y para liderar ninguna respuesta a ningún problema concreto. Los demás tendrán que reflexionar sobre si esa situación es buena para alguien. Nosotros, desde luego, creemos que es mala para Gijón y que la ciudad no se merece esta situación de desgobierno.
-El PSOE votó en contra de la aprobación del Plan General de Ordenación, cuyos problemas técnicos causan cuando menos incertidumbre.
-Dijimos desde el principio que nunca íbamos a votar favorablemente porque el Plan General plantea el desmantelamiento de áreas industriales como la que representa el astillero de Juliana o el Tallerón. Plantea serias limitaciones al funcionamiento de la industria con restricciones que vimos este verano que limitan por ejemplo la capacidad de funcionamiento de Arcelor. Establece un crecimiento de chalés que va justo en contra de cualquier criterio de desarrollo sostenible que podamos defender. El Plan General aprobado en febrero tiene un número de viviendas ligeramente superior al plan de 2011. ¿Cuál es la diferencia? Que el número de viviendas en chalés crece enormemente y se elimina vivienda colectiva y en edificio para convertirla en chalés. Y además, desde el principio, tiene numerosos errores que afectan a su seguridad jurídica, cosa que también dijimos y que todos decidieron ignorar. A día de hoy estamos viendo que el ayuntamiento ya está reconociendo que hay errores importantes que hay que subsanar. Y la primera manera de reconocer esos errores se plasma en el relevo de todo el equipo redactor del plan general y en la más que posible nueva tramitación de la aprobación inicial. En esas 66 medidas que habíamos hablado antes de la constitución del ayuntamiento se hablaba de la necesidad de revisar el planeamiento urbanístico y con Xixón sí Puede hablamos expresamente de que había que hacerlo de tal manera que no sólo se garantizara esa seguridad jurídica que no existía y, al mismo tiempo, hacerlo con criterios de sostenibilidad. Eso es incompatible con 6.000 chalés nuevos en la zona rural o con esquilmar la actividad industrial existente y viable. No puede ser votado favorablemente porque es contrario a los intereses de Gijón.
-En lo que sí están todos de acuerdo es en que la estación intermodal es irrenunciable.
-Es el primer elemento que hay que resolver porque, a partir de ahí, irán el resto de las piezas del plan de vías. Desde finales de 2014 hasta ahora el gobierno de Foro ha ido jugando con el el Ministerio de Fomento al gato y al ratón con este asunto. La alcaldesa plantea un cambio de la estación, luego el ministerio le dice que no o que lo va a estudiar, después nos vienen con otro proyecto distinto? Hubo un juego durante más de un año entre el gobierno de Moriyón y la ministra Pastor que terminó con un planteamiento sobre la mesa que implica años de retraso en la tramitación del plan y en el inicio de cualquier posible obra. Además, se planta un escenario en el que lejos de disminuir la barrera ferroviaria puede hasta incrementarse respecto al plan que estaba previsto antes de esta ocurrencia de Foro. De hecho, el planteamiento que el gobierno de Foro aprobó con el Ministerio de Fomento en el consejo de administración de Gijón al Norte va en contra del acuerdo plenario, que limitaba las posibles aportaciones del Ayuntamiento de Gijón a esa operación. Sin embargo, el acuerdo que se alcanzó en Gijón al Norte con el ministerio supondría que el ayuntamiento aportara, en el supuesto de que se cumplieran las plusvalías, cantidades por encima de los 50 o los 60 millones de euros.
-¿Y si no se cumplen esas plusvalías, habida cuenta de que las dos primeras ventas de solares quedaron desiertas?
-Pues se incrementaría la aportación del ayuntamiento en un 25% en aquello que no se ha aportado por plusvalías. Pero en definitiva Foro le sirvió en bandeja al ministerio una excusa para no hacer nada, cosa que venimos denunciando desde el mismo momento en el que sucede, y eso no solo paralizó el proyecto de estación sino que además bloqueó la puesta en marcha del metrotrén que necesita de la estación para tener un elemento de enganche para que los trenes de cercanías entren y den servicio a ese túnel que Cascos nos dejó ahí después de haberse gastado 160 millones de euros. ¿Qué es lo primero que debería resolverse? El proyecto de la estación; veamos cómo concretar con el túnel y veamos cómo abordar cualquier actuación más hacia el oeste que permita mejorar la integración ferroviaria en todo el territorio.
-El proyecto original, en todo caso, ha sufrido variaciones en estos últimos años.
-Una parte del juego de mentiras con el que nos vienen torturando desde hace un año y pico tiene que ver con dar datos sobre el proyecto que heredaron que no se corresponden con toda la verdad. Ellos comparan un anteproyecto con un importe determinado con el coste de lo que ellos nos están poniendo sobre la mesa. Cuando llega Ana Pastor al ministerio tienen un proyecto de estación intermodal al que se le habían hecho una serie de ajustes para aplacar su coste e integrar el ferrocarril y conectarlo con las cercanías. Pero lo aparcan porque, claro, con un proyecto hecho ¿cómo justificas que no hay ninguna edificación? Y siempre dijeron que no tenían proyecto, cuando se sabe que sí lo tienen porque lo pagaron. ¿Qué es lo que se plantea? Hasta finales de 2014, se supone que el gobierno municipal está pidiendo ese proyecto pero de repente cambia todo. Y ya piden un cambio completo de todo sin ningún documento y ningún análisis previo. Por ello, lo que nosotros decimos es que dejen de darles excusas al ministerio y que se acuerden de que se supone que defienden los intereses de Gijón. Nunca tuvieron un consenso en la ciudad para lanzar esa propuesta y pese a todo la lanzaron. Hay que volver al proyecto de la época de Zapatero? No necesariamente, pero tampoco hay por qué decir que no puede ser porque se planteó en el pasado. Hay que ver cuáles son las alternativas viables, algo que este gobierno no quiso hacer en ningún momento. El ministerio, por cierto, no ha puesto de momento ni un céntimo para conectar el túnel y ni una fecha para poder habilitar las estaciones de tren que tendría que haber a lo largo del recorrido bajo la ciudad.
-Que las primeras ventas de solares hayan quedado desiertas no deja de ser un problema para abordar la financiación de la estación intermodal.
-Recientemente encargaron una tasación de los solares y se están poniendo a la venta de acuerdo con ese estudio, pero no hay ofertas. En realidad hay dos problemas. El primero es que el suelo que estaba previsto vender no se vende al precio que estaba previsto, y esto ya genera un déficit por sí mismo. El segundo es que las edificabilidades previstas cambian de lugar. La que se planteaba en el entorno del Museo del Ferrocarril la trasladan a la entrada de la ciudad, en el tramo anterior a la estación provisional. ¿Alguien se cree que un metro cuadrado en esa zona vale lo mismo cuando tienes cuatro carriles de la autopista a un lado y la vía del tren en superficie al otro? No hace falta ser tasador para darse cuenta de que no vale lo mismo, luego el déficit es aún mayor con esta solución que plantean. Si es difícil recaudar lo que se pretendía con la venta de los solares, algo que impuso Francisco Álvarez-Cascos, en este momento conseguir esos dineros se complicaría considerablemente. Habría una necesidad de aportar dinero público mucho mayor.
-Que el pleno municipal acordó que no saliera del ayuntamiento?
-La propuesta del PP y Foro, según lo que votaron en el consejo de administración de Gijón al Norte, es que el 25% de ese dinero lo ponga el Ayuntamiento de Gijón, otro 25% el Principado y el 50% el Estado. ¿Qué dice el Principado? Que eso no tiene ni pies ni cabeza puesto que al ser una obra ferroviaria tendrá que pagarla el ministerio. Y efectivamente todos los grupos municipales votaron en pleno que el ayuntamiento no haría esa aportación, pero va Foro en el consejo de administración de Gijón al Norte y vota que el ayuntamiento lo asume. Al final de todo esto, lo importante es tener proyecto, plazos y financiación y ni el ministerio presenta un proyecto ni nos da plazos reales ni garantiza una financiación suficiente. Y Foro ha venido actuando como cómplice del ministerio en todo este tiempo.
-Lo que le preocupa a los gijoneses, en todo caso, va por otros derroteros?
-Mi impresión es que en Gijón, como pasa en otras muchas ciudades, la gente sigue preocupada y hasta angustiada en muchos casos por una situación económica que condena a muchas familias a la precariedad. Y eso tiene que ver con el empleo, con las oportunidades de nueva y mayor actividad económica y con recursos que hace unos años parecían algo minoritario y que cada vez se ve como más necesarios como es el apoyo a las familias en el ámbito educativo, en el ámbito social y en el hecho de facilitar a la gente una igualdad real de oportunidades en el día a día. Creemos que el ayuntamiento a veces parece que hace las cosas marcando ciudadanos de primera y de segunda. Por ejemplo, el programa escolar 11x12 es para todos pero luego hay actividades que son de pago y el que no tiene recursos no puede acceder a ellas. Los campamentos de verano que se organizan ya ni siquiera el año pasado establecieron que fueran gratuitas para aquellas familias que tienen becas de comedor. Pese a los datos macro que dicen que existe una recuperación económica, sigue habiendo muchas familias a las que no les llega y que no son tratadas por el ayuntamiento con un nivel de compromiso que sería el de esperar teniendo los recursos que tiene.
-Hay que insistir, ¿por qué no se gastan esos recursos?
-El problema es que no saben qué hacer con el dinero. ¿Cuál es el problema? No tienen ningún proyecto, no hay prioridades y como no las tienen llega un momento en que el día a día les puede y no saben qué hacer con el presupuesto. Y queda sin gastar. Y gracias a sus socios del PP, con os que se presentaron a las elecciones generales, existe una ley de Estabilidad Presupuestaria y otras medidas que limitan la capacidad de gasto de los ayuntamientos al fijar un techo. ¿Cómo limitan el gasto? En función de los gastos que hayas realizado el año anterior. Y, en Gijón, si en 2015 dejaste de gastar 55 millones de euros, estás limitando en 55 millones tu capacidad de gasto para 2016. De forma artificial, claro, porque puedes tener dinero en la caja pero ya no lo vas a poder gastar. Este es el modelo de funcionamiento que Foro ha venido teniendo todos estos años y que va radicalmente en contra de los intereses de Gijón.
-Servicios sociales, por ejemplo, ha alcanzado su techo de gasto.
-¿Cómo es posible que no se utilicen los recursos que existen cuando los niveles de pobreza están creciendo?¿Cómo es posible que en el mes de septiembre en servicios sociales ya se ha superado el techo de gasto y todavía haya programas con niveles de ejecución al 50%? Es surrealista, pero así es. ¿Qué nos dicen? Que antes se compensaba con el ayuntamiento, pero ahora el del ayuntamiento debe estar superando el techo de gasto también, con lo que ya no les dejan esa compensación. Entonces llegas a la conclusión de que en la práctica es como si servicios sociales estuviera cerrado y, al final, llegamos a esa situación porque lo llevan haciendo mal muchos años y han desaprovechado sus recursos. Y están condenando al que venga detrás porque fueron incapaces de gestionarlos.
-En materia de promoción de empleo, ¿qué acciones echa en falta?
-Desde el punto de vista del empleo del presente y del futuro, el parque tecnológico ha demostrado que era una apuesta de futuro más que buena para Gijón pese a todas las críticas que tuvo cuando se inició. Pero se demostró que era una apuesta de éxito que funciona, con unos 3.000 empleos en esa zona. Cinco años después de que Foro llegara al gobierno municipal, el parque está prácticamente en el mismo estado en que estaba cuando llegaron. Salvo una pequeña ampliación de un edificio, no hicieron nada. La falta de proyecto llega a tal nivel que ni siquiera son capaces de dar continuidad a lo que ya funciona ni a plantearse cómo impulsarlo y prepararlo para que pueda albergar y atraer empresas nuevas para dar respuesta a los próximos cinco, diez o quince años. Ni eso han sido capaces de hacer. Dicen que hay que apoyar a las empresas, pero en la práctica no existen esas acciones concretas. Sólo fueron capaces de cambiarle el nombre al fondo de capital riesgo.
-También están los planes de empleo, con un futuro en apariencia complicado.
-Los planes de empleo tienen un futuro complicado por su gestión, porque se habla de la convocatoria autonómica pero básicamente es la misma que había en la época de los anteriores gobiernos socialistas. Lo que ha cambiado fue lo que hicieron con las personas de los planes de empleo. Nunca se les había puesto a hacer trabajos de estructura municipal. Trabajos reservados a los funcionarios o al personal del ayuntamiento, eso sí pagándoles una cantidad de dinero considerablemente inferior y con unas condiciones laborales que no son las de los trabajadores públicos. Eso provocó un montón de reclamaciones en los tribunales que Foro valora en más de 3,5 millones de euros de indemnizaciones por contratación irregular, porque así lo dicen las sentencias. Y eso nunca se había producido de esa manera y no es por las bases. Los trabajadores de los planes de empleo siempre habían estado ligados a proyectos específicos ajenos a la estructura municipal y eso se puede hacer en el ámbito de las obras públicas, por ejemplo para la rehabilitación de vivienda pública para ponerla en el mercado del alquiler, o en proyectos relacionados con la gestión documental o la digitalización de documentos, que no son tareas que hagan los funcionarios y que podían servir para reciclar profesionalmente a muchas personas. Pero nada de nada.
-El Principado propondrá esta semana al ayuntamiento soluciones inmediatas ante la paralización de la depuradora.
-En esa reunión se van a explicar las alternativas que se ven para paliar el problema de la paralización de la obra de la depuradora, que pasan por devolver el servicio a la Plantona. Nosotros vemos que tenemos que tener claras cuáles son las responsabilidades de cada parte a la hora de ejecutar estas actuaciones. Todo lo vinculado a la depuradora es ministerio, mientras no esté acabada y entregada es responsabilidad de la Administración del Estado. La comunidad autónoma será responsable de lo que tiene que ver con financiar su mantenimiento y su explotación y el ayuntamiento tiene todas las competencias en mantenimiento y supervisión de las instalaciones. Esto vale para la depuradora y para todas las obras del sistema de saneamiento, porque así quedó reflejado en un convenio de 2005. Por ello, la Administración del Estado tiene que resolver todo lo vinculado con esa sentencia y con cómo se ejecuta y, si es posible ya que la obra está prácticamente acabada, que se pueda poner en funcionamiento mientras se resuelve el trámite ambiental. La comunidad autónoma le pidió máxima agilidad y que se buscaran soluciones alternativas en una reunión a la que asistió también el ayuntamiento. Esa opción de las soluciones alternativas no fue considerada por el ministerio en aquel momento y tampoco el ayuntamiento puso demasiado interés. Por ello ahora desde la consejería de Medio Ambiente se plantea que hay que retomarlo porque no podemos seguir en esta situación y que lo ideal es que haya un frente común en el que el Principado y el ayuntamiento vayan juntos para garantizar por lo menos el mismo nivel de tratamiento de las aguas existente antes de la obra de la depuradora.
-¿Por qué insisten en las responsabilidades que corresponden a cada administración?
-Primero, porque podríamos disparar en dirección errónea o pedirle a alguien que haga lo que es de otro, pero sobre todo porque tenemos problemas que están sobre la mesa y sobre los que no está actuando quien tiene que actuar. Por ejemplo, del emisario de Peñarrubia se dijo hace unos meses que tenía roturas y el concejal portavoz del gobierno, que a la vez fue presidente de la Empresa Municipal de Aguas (EMA) durante cuatro años, reconoció que efectivamente había esos problemas. Y que en 2014 ya habían visto que había que actuar pero que se había esperando porque iba a haber depuradora. Eso lo dice en el pleno de julio y a día de hoy, como reconocieron el miércoles en la comisión de Medio Ambiente, el ayuntamiento no tiene proyecto ni valoración del alcance de la reparación del emisario. Estoy hablando del de Peñarrubia, pero el de Aboño también tiene problemas como reconocieron y tampoco hay plan alguno. Si ambos están mal o muy mal, como el concejal Fernando Couto reconoció, tendrán que actuar, entre otras cosas, porque la obra ni siquiera la tiene que pagar la EMA, sino que la va a pagar la junta de saneamiento, que depende de la comunidad autónoma. A la comisión del miércoles, en la que se preguntó expresamente por este asunto, ni siquiera asistió la directora del área de Medio Ambiente. ¿Por qué es importante donde vierte el emisario de Peñarrubia? Porque está delante de una zona de playas, si tiene roturas los vertidos salen al mar muy cerca de esas playas y no solo es un problema medioambiental al afectar a un recurso natural sino que también afecta a un recurso económico como es el turismo. Y no puede estar aplazado sine die.