La polémica del derbi asturiano: «El contacto en el penalti es mínimo»

Corría el minuto 17 del derbi asturiano cuando la polémica arbitral de -casi- todos los años apareció en El Molinón. Si ya había dado que hablar lo que pasó en el estadio gijonés hace siete meses, con aquellos penaltis no pitados al Real Oviedo sobre Sebas Moyano y Paulino de la Fuente, una nueva acción sacudió el duelo de máxima rivalidad del Principado. Y en favor del Sporting, otra vez. 

Dubasin recibió por dentro e inicio una conducción que la defensa no supo parar. Cuando encaraba la frontal del área, pase al espacio y Gaspar al suelo tras una disputa con Costas. Orellana Cid se lo pensó unos segundos y señaló el punto de penalti. Los jugadores del Oviedo no daban crédito, en especial Costas, autor de la pena máxima. El contacto, que empezaba fuera del área, parecía mínimo entre el central azul y el atacante rojiblanco. El colegiado estuvo más de dos minutos con la mano en la oreja, se supone que hablando con Gorostegui Fernández, pero el colegiado de VAR le dio la razón. Penalti y 1-0 del Sporting, que acabó ganando el derbi asturiano por 3-1.

«Hubo momentos decisivos y puntuales en los que el árbitro no dudo cuando el resto sí dudamos. El contacto en el penalti es mínimo, muy dudoso y desde mi posición lo pude ver relativamente bien. Hablando con Costas estaba convencido de que eso no puede ser penalti». Dijo Javi Calleja, entrenador del Real Oviedo, en la sala de prensa de El Molinón.