Noche aciaga del Real Oviedo en Valladolid

Menos de una semana después del triunfo por 5-0 ante el Burgos, el Real Oviedo cayó 3-0 en Valladolid. Los azules jugaron un partido desastroso, el peor desde que Luis Carrión es entrenador carbayón. Aunque Alemao y Sebas Moyano fallaron dos goles cantados en dos momentos fundamentales del partido, el Oviedo no estuvo cómodo desde el comienzo hasta el final. No era el día, aunque no tener el día no es excusa para fallar tanto en defensa. Golaveraje particular perdido con un rival directo como el Real Valladolid... y a levantarse ante el Levante. La competición te lo exige si quieres pelear por algo grande. 

El Oviedo más incómodo de la 'era Carrion'

Con lo esperado, así salió el Real Oviedo al césped del José Zorrilla: Colombatto por Cazorla y, el resto, lo que se vio ante el Burgos. Y aunque los azules empezaron el partido intentando mandar, pronto se vio que a los de Luis Carrión les iba a costar esta noche. En los primeros instantes del encuentro, ni Valladolid ni Oviedo controlaban a través del esférico y los ataques eran erráticos. Incluso, a los azules no les dolían prendas para buscar en largo de vez en cuando tanto a Alemao como a Dubasin. Pasaban los primeros diez minutos y, salvo una entrada de Lucas Rosa a Dubasin que fue amarilla pero pudo ser algo más, el partido era aburrido.

La buena presión del Valladolid, unida a la poca precisión de los jugadores azules, hacía que se estuviese viendo sobre el césped pucelano la versión más incómoda del Real Oviedo de Carrión. Y encima, cuando los carbayones pisaban campo rival, Alemao no estaba sabiendo interpretar cuando ir al desmarque corto, al largo o cuando recibir entre centrales. Lucas Rosa amenazó con un centro desde la izquierda y, en la siguiente, el Valladolid golpeó primero. Una jugada defendida con muy poca agresividad en banda derecha acabó con centro de Luis Pérez, Dubasin y Viti se molestaron entre ellos y Monchu, solo en el segundo palo, controlaba y definía ante Leo Román. Los de Pezzolano no habían ni apretado, pero aprovecharon el error azul.

Mientras jugadores como Sebas Moyano y Alemao -en ocasiones también Carrión- se desesperaban con el criterio de Ávalos Barrera, el Oviedo seguía sufriendo para sacar su mejor juego. No fue hasta la media hora cuando los azules sí se reconocieron en una salida de balón que el Pucela no presionó mal pero que fue incapaz de parar. El último cuarto de hora acercó el juego al área de Masip, buscando Alemao sorprender desde la frontal y un centro de Bretones que nadie remató. En la ultimísima, desde el córner, Colombatto la puso, Masip falló en la salida y Alemao, solo, se encontró con el poste. El empate, y el elevar la temperatura de los más de 1.500 oviedistas presentes en las frías gradas de Zorilla, estuvo ahí.

De un mal día... al peor día

Lo de antes habían sido 45 minutos malos, pero lo siguiente fue un cataclismo. El partido pudo cambiar a los tres minutos de la reanudación: Dubasin pasó al espacio y Sebas Moyano falló ante Masip un mano a mano clarísimo. Mientras Cazorla, Borja Bastón y Masca calentaban en la banda, llegó el 2-0. Pillada al Oviedo tras un mal pase de Seoane, Luengo cayó a banda derecha ante Biuk y a partir de ahí todo estaba desordenado. Viti anulado, Calvo ante Sylla y Amath y Bretones sin llegar. El centro lo cabeceó a gol Amath. Dos minutos después, mala salida de balón, flojo golpeo de Leo Román y la jugada acabó con un derechazo de Amath justo al borde del área que entró por la escuadra. 3-0 y partido al pozo para el Real Oviedo. 

Jaime Seoane, tras una jugada por la derecha, pudo acortar distancias y su disparo lo paró Masip de una forma poco ortodoxa. En el 56', doble cambio de Carrión: Cazorla y Bastón dentro, Seoane y Bastón fuera. Quedaba menos de media hora y el Oviedo seguía sin encontrarse, con los azules echando mucho de menos a un Colombatto que no estaba teniendo su día y con ataques fugaces tras conducciones varias que acababan en nada. Luismi por Jimmy y Masca por un desafortunado Sebas Moyano fueron los siguientes cambios de Carrión. Mientras que de centro del campo en adelante seguía sin salir nada, desde dejadas de cara a controles o regates, el Oviedo seguía perdiendo duelos en defensa. Viti y Bretones, en especial, lo estaban pasando mal en los costados. Hasta Leo Román, baluarte durante todo el curso, se mostraba inseguro en varias acciones. 

Borja Sánchez, a los pocos minutos de entrar, probó a Masip con un disparo mordido desde la frontal que el portero local atrapó sin problemas. Mientras el lateral pucelano Luis Pérez se lesionaba y no pocos aficionados locales se iban de Zorrilla quedando todavía diez minutos, el partido se moría poco a poco. Kenedy pudo ampliar la renta primero y Dubasin pudo marcar el 3-1 después, pero ambos disparos se fueron desviados. Luis Carrión, desde la banda, presenciaba unos minutos que claramente le sobraban al Real Oviedo. Desde el minuto 70, incluso, se podía decir que todo lo que sucedía sobre el césped sobraba para el Real Oviedo. Y las acciones de un Luismi con mucha falta de ritmo eran el mejor ejemplo. El peor día y ante un rival directo, toca levantarse. 

Ficha técnica

Real Valladolid: Masip; Luis Pérez (Escudero, min 81), Tárrega, Boyomo, Lucas Rosa; Juric, Monchu, Meseguer (De la Hoz, min 74); Amath (Anuar, min 54), Biuk (Kenedy, min 74) y Sylla (Marcos André, min 81).

Real Oviedo: Leo Román, Viti, Luengo, Dani Calvo, Abel Bretones; Jimmy (Luismi, min 65), Colombatto (Borja Sánchez, min 78); Dubasin, Seoane (Cazorla, min 56), Sebas Moyano (Masca, min 65); Alemao (Borja Bastón, min 56).

Goles: 1-0 Monchu (min 18); 2-0 Amath (min 48); 3-0 Amath (min 50).

Árbitro: Ávalos Barrera, comité catalán. Amonestó a los locales Lucas Rosa (min 10) y a los visitantes Luismi (min 76)

Incidencias: Estadio José Zorrilla (Valladolid). 19.163 espectadores, más de 1.500 del Real Oviedo.