Así es Enol Rodríguez, el delantero que Cervera se lleva a Cartagena

El pasado 29 de enero, Enol Rodríguez (Candás, 2001) volvía a contar con minutos de calidad en el Vetusta tras más de un mes viendo a sus compañeros desde el banquillo. En dicho periodo, además, el filial del Real Oviedo vivió su mejor momento de la temporada y se alzó como el equipo más en forma de su grupo. Para que Enol también formase parte de ello desde el césped, Jaime Álvarez optó por apostar por él ante la Gimnástica de Torrelavega. El candasín, eso sí, partió desde la banda derecha y fue Masca el que ocupó la posición de punta, pero dicha modificación táctica resultó: al descanso, el Vetusta ganaba 2-0.

A los seis minutos del segundo tiempo, una segunda tarjeta amarilla al intentar parar un contraataque echó del partido a Enol. El delantero, que estaba haciendo uno de sus mejores partidos del curso, se iba a los vestuarios cabizbajo. Volver a empezar otra vez, claro, ya que la roja le impidió ser de la partida en el triunfo en Burgos del siguiente fin de semana. En ese momento, cualquier escenario que relacionase al primer equipo del Real Oviedo con la figura de Enol era imposible de imaginar. Pero, cosas del fútbol -y de las tarjetas amarillas-, se dio. 

Ante el Arenteiro, en una jugada que parecía de todo menos falta de un jugador del Vetusta, Masca vio su quinta tarjeta amarilla de la temporada. 24 horas después, Guzmán Mansilla le sacó dos tarjetas a Sergi Enrich en menos de un minuto. De golpe y porrazo, Álvaro Cervera se había quedado sin delanteros centros del primer equipo -Bastón está lesionado- y sin el ariete del filial que más opciones tenía de dar el salto. El fútbol le volvía a dar una oportunidad a Enol Rodríguez, seguramente, la oportunidad más preciada y difícil de tener en este mundillo: entrar en la convocatoria del Oviedo para el partido de este viernes en Cartagena (Cartagonova, 21:00 horas). 

Enol, que aterrizó en El Requexón este verano procedente del UD Logroñés, es un delantero corpulento (1,86 metros), característica que le ha permitido adelantar en la carrera por el primer equipo a un Mario Fuente -juvenil de último año- al que todavía le falta dar un pasito más en su condición física. Enol es capaz de jugar de espaldas y asociarse con sus compañeros, aunque es cerca del área cuando más le cuesta ser agresivo y peligroso para las defensas rivales. Eso sí, no es nada tosco y lento a pesar de su altura, e incluso Jaime le ha situado en banda para atacar zona de remate y fajarse con los centrales. Esta noche, desde el banquillo de Cartagonova, esperará su oportunidad. 

En el fútbol todo vuelve, o casi todo

Perfil: movilidad a pesar de la planta, capaz de partir de la banda