A este Real Oviedo le empieza a salir todo

Qué juego este del fútbol. Casi se podría asegurar que a lo largo de lo que resta de temporada, el Real Oviedo empatará y perderá partidos mejores jugados que este de Tenerife. Pero el triunfo llegó en el Heliodoro Rodríguez López. Por la mínima y en una acción a balón parado, casi sin generar nada durante los 90 minutos y sufriendo los arreones de un digno Tenerife. No sirvió de nada: el Oviedo gana lejos del Tartiere por primera vez desde la llegada de Cervera y ya sume 23 puntos.

El peor Oviedo de la 'era Cervera'

Con Pomares en el lateral izquierdo, Mario Sesé debutando en banda derecha y Obeng junto a Bastón, así saltó el Real Oviedo al césped del Heliodoro Rodríguez López. Bueno, saltaron los once jugadores, porque el equipo como tal tardó en hacer acto de presencia en el campo del Tenerife. Durante los primeros 20 minutos, el asedio de los blanquiazules fue total, con Iván Romero, Waldo y compañía haciendo daño cada vez que entraban en contacto con el balón, Lucas y Pomares siendo blandos en cada acción en los costados y con el Oviedo siendo incapaz de hilar un par de pases en campo rival.

Hugo Rama fue el único capaz de aportar luz entre tanta oscuridad, filtrando un balón por dentro que recorrió unos 20 metros al ras de suelo que permitió a Bastón recoger el esférico a escasos metros de Juan Soriano, pero el Sergio González evitó el disparo claro del capitán azul. Precisamente, Rama fue uno de los protagonistas del cambio táctico que Cervera ordenó a los suyos en el ecuador del primer tiempo: del 4-4-2 al 4-5-1, con el gallego reforzando el doble pivote y Obeng pasando a la banda izquierda. Aunque en ataque no sirvió de mucho, el Tenerife dejó de crear tanto peligro cada vez que cruzada la medular.

Después de un cabezazo franco de Borja Garcés que se fue alto y un disparo que José Ángel Jurado desde la frontal que a punto estuvo de sorprender a Braat, una conducción eterna de Lucas fue de las pocas jugadas que acabó con el Oviedo cerca del área rival. El debutante Sesé, por su parte, sin casi opciones de demostrar las cualidades que le han llevado a aterrizar en el primer equipo, consiguió sacar un saque de esquina en uno de los pocos balones que tocó en fase ofensiva. Costas remató en dicho córner, pero Soriano atrapó fácil el balón. Que tras ese primer tiempo los azules se fuesen a los vestuarios con 0-1 hubiese sido una fiel -y cruel para el Tenerife- demostración de lo que es este deporte. Pero no, empate sin goles al descanso.

Gol y supervivencia

Cervera apostó por lo seguro, dejó en vestuarios al debutante Sesé y Abel Bretones pasó a ocupar la banda izquierda del 4-5-1 del Oviedo, con Obeng en derecha. A los cinco minutos, y como ya ocurrió en los instantes finales del primer tiempo, Lucas agarró un balón y se fue a la aventura. El ovetense ganaba metros, dejó atrás a Waldo y José Ángel Jurado y desde la línea de fondo puso un centro que acabó en córner. De dicho saque de esquina nació otro, y fue entonces cuando Rama la puso al segundo palo desde la izquierda, Bastón la devolvió al meollo y ahí estaba Costas para golpear el balón con el alma. De la nada, 0-1. Bueno, de la nada no, de Lucas Ahijado.

Fue entonces cuando el Tenerife hizo lo más difícil: no decaer tras el gol del Oviedo. Los de Ramis se sobrepusieron al golpe y siguieron rondando la portería oviedista, con varias llegadas de, para variar, Waldo e Iván Romero. Fue el propio Romero el que se inventó la ocasión más clara, yéndose de Luismi y Jimmy en una gran conducción por el perfil izquierdo y disparando rasa, pegada al palo, desde la frontal. Apareció Braat, realizando una de las paradas de la temporada para evitar el gol. Cervera movió el banquillo y dio entrada a Borja Sánchez y Enrich por Bastón y Obeng, pero nada. Pomares volvió a fallar en salida de balón, Enric Gallego le robó la cartera y el disparo posterior de Shashoua fue desviado por Costas a córner.

No cambió el partido en la recta final y el Tenerife lo seguía intentando. Sin éxito en los metros finales, pero lo intentaba. Y el Oviedo no era capaz de respirar. Una falta totalmente innecesaria de Pomares a un Iván Romero que estaba de espaldas y escorado le regaló a los de Ramis una falta peligrosísima. José Ángel Jurado centró, Braat falló en la salida y solo la falta de entendimiento entre Mo Dauda y Carlos Ruiz evitó un remate a puerta vacía. Respiraba el Oviedo. Ya en el 90’, Mo Dauda volvió a aparecer en el área y Costas apareció para tirarse y salvar el disparo a pocos metros de Braat. Costas y Dani Calvo, brillantes dentro del área, lideraban la resistencia. Una resistencia que acabó con triunfo oviedista. 

Ficha técnica

CD Tenerife: Juan Soriano; Mellot, Sipcic (Carlos Ruiz, min 77), Sergio Glez, Nacho; Teto (Mo Dauda, min 73), Aitor Sanz (Larrea, min 73), José Ángel Jurado, Waldo (Shashoua, min 62); Iván Romero y Borja Garcés (Enric Gallego, min 62).

Real Oviedo: Braat; Lucas, Costas, Dani Calvo, Pomares (Mangel, min 88); Mario Sesé (Abel Bretones, min 46), Jimmy, Luismi, Hugo Rama (Miguelón, min 88); Obeng (Borja Sánchez, min 59) y Borja Bastón (Sergi Enrich, min 59).

Goles: 0-1 Costas (min 52).

Árbitro: Busquets Ferrer, comité balear. Amonestó a los locales José Ángel Jurado (min 63) y a los visitantes Obeng (min 30), Luismi (min 69) y Hugo Rama (min 72).

Estadio: Heliodoro Rodríguez López (Santa Cruz de Tenerife).