Semana clave para el futuro de Borja Sánchez en el Oviedo

Tito Blanco lleva una semana en el cargo y, aunque el Real Oviedo todavía no tiene entrenador —la llegada de Jon Pérez Bolo podría ser inminente—, el trabajo en los despachos ya es considerable. Y el nombre de Borja Sánchez resuena en todos los despachos del Carlos Tartiere. Después de más de un año de idas y venidas, de acuerdos en los que solo faltaba la firma e intereses que alejaban al centrocampista de la capital del Principado, esta semana se antoja fundamental para conocer la decisión del '10', cuya vinculación con el Oviedo finaliza en 17 días. 

Borja Sánchez y sus representantes ya cuentan encima de la mesa con una oferta elaborada por el propio Tito, en la que el ovetense firmaría hasta 2025 pasando al primer escalafón salarial de la plantilla oviedista. En los últimos meses, el desacuerdo económico entre Rubén Reyes y los agentes del centrocampista eran evidentes, tanto que Reyes salió rumbo a Getafe sin haber podido cerrar el acuerdo. Además, el fantasma de una Primera División que siempre se ha fijado en Borja (5 goles y 9 asistencias esta temporada) también complicaba las cosas. 

Al mismo tiempo, desde Valladolid reina la cautela. El club pucelano está interesado en el futbolista, pero según el director deportivo Fran Sánchez no ha existido ninguna negociación hasta el momento. «Es un buen jugador, pero nosotros miramos la plantilla entera y vemos lo que tenemos en cada posición. A Borja no lo tenemos cerrado, ni avanzado, ni le hemos mandado una propuesta. Hemos hablado con sus representantes, como con otros, pero no hay una propuesta económica, ni tenemos nada firmado», afirmó el directivo en una entrevista al Diario AS. 

A menos un mes para que arranquen la mayoría de las pretemporadas de Primera y Segunda División, esta semana se antoja clave para la resolución de este culebrón. En el Oviedo son más —o mucho más— optimistas que hace tan solo unos días, pero la incertidumbre sigue siendo total. Todo está en la cabeza de Borja Sánchez.