El Oviedo pierde una batalla clave en Girona

Montilivi fue testigo de uno de esos duelos marcados en rojo por los aspirantes a entrar en el muy deseado playoff de ascenso. Y en dicho escenario, el Oviedo se hizo pequeño durante gran parte del primer tiempo. Un mal comienzo azul, con un Girona lanzado, condicionó el resto del partido y complicó demasiado la reacción de los azules. Los de Ziganda compitieron después, pero no fue suficiente. Décimos y a cinco puntos de la promoción, toca remar.

Impotentes primero, competitivos después

El trivote que puso en liza José Ángel Ziganda para contrarrestar ese juego interior tan potente del Girona no sirvió de nada. El partido arrancó en Montilivi y la máquina blanc-i-vermell comenzó a someter a un Real Oviedo que no sabía cómo frenar el vendaval local. Los de Míchel ponían el anzuelo por dentro, los azules picaban y el Girona acaba encontrando el hombre libre en la banda. En los primeros seis minutos, tres llegadas claras del Girona: dos por izquierda y una por derecha. A la cuarta, en el minuto 9, llegó el gol de un Baena que arrancó el partido de forma imparable.

Falta desde 30 metros que colgó Aléix García, despeje poco contundente de la defensa carbayona con Femenías en la línea de gol y Baena, desde la frontal, enganchó un duro derechazo que se convirtió en el 1-0. Pero el Girona no frenó. La presión adelantada del Oviedo, mucho más voluntariosa que efectiva, hacía aguas ante el buen hacer de los catalanes y continuamente se podía ver a Costas y Dani Calvo perdidos, persiguiendo marcas hasta casi el área del Girona y generándose espacios enormes que facilitaban las transiciones de los locales. Tras un par de llegadas más del equipo gerundense, el Oviedo respiró por primera vez con balón. Era el minuto 18.

El guion seguía siendo el mismo y Ziganda movió ficha: cambio de esquema, Luismi se incrustó entre centrales y Viti cambió de lado y pasó a la izquierda, con Obeng por derecha. Poco a poco, el Oviedo fue entrando al partido y merced a un Brugman brillante en el pase, el portero rival Juan Carlos comenzó a formar parte del encuentro. Primero lo intentó Viti, pero el de Laviana estuvo lento en la definición. Después, tras otro pase fantástico de Brugman, Jimmy no pudo batir al arquero rival cuando tenía todo para hacerlo. El Oviedo, ahora sí, llegaba con peligro y la esquina de Montilivi ocupada por la afición carbayona acompañó a golpe de garganta.

Mientras Javi Mier, Borja Sánchez y Joni Montiel comenzaban a calentar en la banda, el partido seguía tomando un rumbo mucho más igualado que el mostrado en los primeros 25 minutos. El nuevo esquema asentó la presión azul y, a excepción de un par de sustos cerca de Femenías, al Girona le costaba mucho más iniciar el juego que al principio. Otra jugada de Viti por izquierda puso el broche al primer tiempo: centro del de Laviana, remate de Bastón y Juanpe bloqueó el disparo. Se pidió penalti entre la parroquia carbayona, pero el VAR dijo que no.

Arreón insuficiente

Los primeros 15 minutos del segundo tiempo fueron una continuación del final del primero, con el Oviedo más cómodo sobre el césped y empujando, poco a poco, al Girona hacia su portería. La salida de balón de los de Míchel ya no era eficaz, Baena, Borja García y compañía recibían siempre de espaldas y los azules robaban rápido. Brugman seguía con su cruzada hacia la portería de Juan Carlos y, tras otro pase fantástico del uruguayo, Mossa colgó un centro dentro del área que Juan Carlos atrapó en dos tiempos. Momento de cambios: Joni Montiel y Borja Sánchez saltaban al rectángulo de Montilivi por Obeng y Viti.

Después de unos minutos de tanteo, con el Oviedo perdiendo mordiente al espacio pero ganando seguridad con balón, Joni Montiel se aprovechó de un error del Girona para encontrar a Brugman en el área, pero el ‘centrochut’ del uruguayo se paseó por la zona de remate. Fue entonces, en el minuto 71, cuando el Girona puso tierra de por medio. Baena recibió entre líneas y filtró un pase preciso y delicioso entre Calvo y Luismi que dejó solo a Stuani ante Femenías. El delantero uruguayo, pichichi de la categoría, no falló y puso el 2-0 en el marcador.

Apenas dos minutos después, los cambios del Real Oviedo dieron esperanza al oviedismo. Pase a la espalda magnífico de Joni Montiel y Borja Sánchez, con un toque sutil de derecha, acortó distancias. Los azules volvían a estar en el partido. El equipo de Ziganda se soltó la melena, se volcó al área rival y Borja Sánchez entró en calor. El ’10’ del Oviedo comenzó a hacer daño a Arnau Martínez y en una de esas internadas por izquierda encontró a Costas en la frontal. El central disparó duro, pero Juan Carlos le negó el gol con una estirada.

Montiel volvió a aparecer, pero su centro desde la parte izquierda del área del Girona no pudo ser rematado por Jimmy primero y Lucas después. Ziganda gastó la última bala volviendo a defensa de cuatro, sacando a Calvo y Jimmy y metiendo a Javi Mier y Matheus. El Oviedo no llegaba y el tiempo se agotaba. Montiel y Borja, cuando tocaban el balón, seguían a lo suyo y un centro de zurda del primero ponía en aprietos el corazón del área gerundense. Durante el descuento de cinco minutos, cuatro se fueron al garete entre las faltas provocadas por el Girona y un penalti que se pidió de Montiel a Arnau. Matheus tuvo la última, pero el tiro forzado del brasileño lo atrapó Juan Carlos sin problemas. Así, con 2-1, acabó la batalla de Montilivi. 

Ficha técnica

Girona FC: Juan Carlos; Arnau, Bueno, Terrats, Juanpe, Jairo (Juncá, min 83); Aleix García (Kebe, min 83), Pol Lozano, Baena (Valery, min 79); Borja García (Samu Sáiz, min 68) y Stuani (Nahuel Bustos, min 79).

Real Oviedo: Femenías; Lucas, Costas, Dani Calvo (Javi Mier, min 86), Mossa; Luismi, Jimmy (Matheus, min 86), Brugman; Viti (Borja Sánchez, min 57), Borja Bastón y Obeng (Joni Montiel, min 57).

Goles: 1-0 Baena (min 9); 2-0 Stuani (min 71); 2-1 Borja Sánchez (min 73).

Colegiado: González Esteban, comité vasco. Amonestó a los locales Borja García (min 33), Stuani (min 41) y a los visitantes Dani Calvo (min 13) y Mossa (min 92). 

Incidencias: Estadio de Montilivi (Girona). 4313 espectadores.