Las notas del Oviedo: Primera final superada

El once:

Alfonso Herrero: 6. Espectador de lujo durante la mayor parte del encuentro. Cuando le tocó dominó su área como acostumbra. 

Diegui Johannesson: 6. Al desarrollarse prácticamente la totalidad del ataque azul por la banda contraria el canterano casi no entró en juego. Cuando lo hizo, se le vio un poco precipitado. 

Carlos Hernández: 6. Partido tranquilo para el '6' azul. La ausencia de una referencia atacante en el rival le ahorró problemas a él y a sus compañeros de zaga. 

Forlín: 6. Salvo una o dos contras, no hubo acciones donde el Lorca le exigiera algo. Le faltó algo de paciencia con el balón cuando el partido demandaba más control.

Christian Fernández: 6. Lo mismo que sus dos compañeros de la zaga de tres centrales. Se le vio más cómodo que en el lateral y completó un partido sin sobresaltos. 

Mossa: 9. El valenciano volvió al puesto donde más ha rendido durante el curso y fue un puñal en la banda derecha del Lorca. Combinó con Saúl, llegó a línea de fondo y pisó área. Hizo lo que quiso.

Folch: 6. El poco control ejercido con balón le pasó factura tanto a él como a su compañero en el doble pivote. Partido discreto del de Reus.

Rocha: 7. Si bien con balón no se le vio demasiado, supo estar bien colocado casi siempre para llevarse las segundas jugadas. Su ritmo de presión volvió a ser importante.

Fabbrini: 5. Flojo encuentro del talentoso italiano. No estuvo preciso en ninguna faceta del juego, fallando controles, pases y finalizaciones. Fue el primer cambio de Anquela.

Saúl Berjón: 9. Un fin de semana más, el ovetense demuestra que es el mejor jugador de su equipo y uno de los mejores de la categoría. Hizo lo que quiso con el Lorca.

Linares: 9. El '10' volvió al once y lo hizo por la puerta grande. Muy activo durante gran parte del encuentro, dio otro aire al ataque azul y encima se fue con dos goles en su cuenta.

Desde el banquillo:

Aarón Ñíguez: 5. Nada más salir combinó en un par de ocasiones con Saúl, su mejor socio, pero no pudo aportar mucho más.

Toché: -. Entró por Berjón y casi no entró en juego. 

Mariga: -. Sin tiempo para nada.