Suspendido un mes el juicio a Natalio Grueso
Avilés
Fernando Burgos, el nuevo abogado del exdirector de la Fundación Oscar Niemeyer, había solicitado la medida para tener tiempo para preparar la defensa
24 Sep 2018. Actualizado a las 14:10 h.
El presidente de la sección tercera de la Audiencia Provincial, Javier Dominguez Begega, ha aceptado la peticición de suspensión del juicio contra el exdirector de la Fundación Oscar Niemeyer, Natalio Grueso, tras la renuncia sucesiva de sus abogados. Ha sido su nuevo Letrado, Francisco Burgos el que lo ha pedido en el turno de cuestiones previas.
Burgos, que asumió el asunto después de que el letrado que estuvo representándole en la instrucción, Pelayo Mijares, renunciase a hacerlo y que el abogado de oficio René Alperi hiciese luego lo propio, recordó que se había hecho cargo del asunto la semana pasada. «Interesamos que se suspenda el juicio en un tiempo prudencial para que la defensa pueda realizar con dedicación un estudio de la causa», argumentó Burgos. En ese momento, Begega le preguntó que cuánto tiempo era el que consideraba adecuado. El letrado respondíó que «20 o 25 días, día arriba o día abajo».
Ninguna de las acusaciones, se opusieron a la petición. Es más, el representante de Fiscalía del Principado de Asturias, Ángel Cabaleiro, comprendió los argumentos y se sumó a esa petición. También lo hizo el resto de letrados, incluida la representación de la Fundación Oscar Niemeyer. El inconveniente planteado a raíz de los cambios de abogado de Grueso se hizo protagonista en la lista de cuestiones previas que presentaron los diferentes letrados. En vista de la situación, el presidente de la sala realizó un receso de veinte minutos para anunciar la decisión.
Pasado ese tiempo, se reanudó la vista y anunció su decisión. Accedió a la petición de Burgos para «garantizar el derecho de defensa» de Grueso, poniendo en valor además que la solicitud temporal planteada fuese «bastante inferior» a la que había pedido su anterior letrado. De esta forma, decidió dar un plazo de 30 días a partir de este 24 de septiembre para poder reanudar el juicio. No obstante, Begega ha dicho que la fecha concreta va a depender de la agenda de la sección Tercera de la Audiencia Provincial y que se señalará en los próximos días.
Natalio Grueso, actualmente en prisión por riesgo de fuga, se enfrenta a once años de cárcel, diez años de inhabilitación y multa por irregularidades detectadas en la gestión al frente de la Fundación Oscar Niemeyer, creada en 2007 con capital público. En concreto, la Fiscalía le pide seis años de prisión por los delitos continuados de malversación en concurso medial con el continuado de falsedad, más otros tres años de prisión por el delito continuado societario y dos años más de prisión por el delito de insolvencia punible.
Pero el exgerente del Niemeyer entre los años 2007 y 2012 no es el único acusado. También lo está su exmujer, J.P, para quien Fiscalía pide dos años y seis meses de prisión por un delito continuado de malversación; J.M.V.R., trabajador de Viajes el Corte Inglés que se enfrenta a la pena de ocho años de prisión y el pago de 15.000 euros de multa por los delitos continuados e malversación en concurso con el continuado de falsedad y el delito de estafa; el exsecretario de la Fundación, José Luis Rebollo, que se representa en el juicio a sí mismo y para el que piden dos años y tres meses de prisión por el delito continuado societario y el pago de una multa de 7.200 euros; y el exdirector de producción, Marc Martí, que se enfrenta a la pena de 1 año y 6 meses de prisión por un delito de malversación.
Esposado y sin fotos
Licenciado en Derecho, Grueso se formó en gestión cultural y relaciones internacionales. Al Centro Niemeyer accedió después de haber trabajado en la por entonces denominada Fundación Príncipe de Asturias (actualmente Princesa de Asturias). Allí fue el comisario de los actos en su XXV aniversario. De allí pasó al Niemeyer con un contrato de alta dirección.
Tras la polémica suscitada en Asturias con la llegada de Foro Asturias al Gobierno en relación a la gestión del Centro Óscar Niemeyer, renunció al cargo para hacerse cargo de un nuevo trabajo, el de director de Programación de Artes Escénicas del Ayuntamiento de Madrid. Además de gestor, es escritor. En 2014 publicó su primera novela, 'La Soledad', y un año después escribió una biografía de Woody Allen, a quien le unen lazos de amistad.
Único de los acusados que lleva en prisión desde la pasada semana, Natalio Grueso llegó a la sala a las 9.56 horas escoltado por funcionarios de la Policía Nacional y con las esposas puestas. Con un aspecto muy distinto al que presentaba cuando era gerente del centro cultural asturiano, ubicado en Avilés, mucho más delgado. Atravesó en esa situación el pasillo que daba acceso a la sala del juicio. A pesar de todo, y tras cruzarse con otros acusados que esperaban, no perdió la sonrisa e incluso aprovechó la circunstancia para saludar a algún conocido.
Minutos más tarde, a las 10.16 horas, el servicio de comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Asturias informaba de que no se podría realizar ninguna fotografía ni se permitía tomar imagen alguna de los acusados. En esas circunstancias, el juicio comenzó a las 10.20 horas. En el tiempo en el que duró la vista, Natalio Grueso estuvo sentado en el banquillo, justo a la izquierda de su exmujer. Desde allí, portando unas gafas, escuchó todos los argumentos de los letrados en relación a las cuestiones legales previas que planteaban.
Cuando a las 11.44 el presidente de la sala declaró un receso, Grueso estuvo conversando con su exmujer y con su abogado, en una charla a la que se añadió posteriormente José Luis Rebollo. Una vez reanudada la sala, todos escucharon la decisión de suspender el juicio hasta dentro de un mes. Antes de que los policías volvieran a esposarle pudo repartir algún abrazo. Finalmente, a las 12.20 horas salía del edificio, aunque los agentes le llevaron por una puerta que da directamente al aparcamiento, de tal forma que se evitaron las fotografías que esperaban hacerle fuera los distintos medios de comunicación. De esta forma, Grueso volvía a prisión tras una vista de algo más de dos horas.
Cartas de Serrat y Allen
Por otro lado, en la sesión también han sido aceptadas una serie de cuestiones que se añaden a partir de ahora al sumario. El abogado de su exmujer, Luis Tuero, ha aportado una serie de cartas de personajes muy conocidos. Su objetivo es explicar la naturaleza de los viajes que se ponen en cuestión en el procedimiento y que se entienda que esas estancias, por ejemplo en Nueva York, respondían a gestiones que estaba realizando Grueso a título profesional y que, de hecho, dieron lugar a colaboraciones de esos personajes con el Centro Niemeyer. El hecho de que su mujer participase en esos viajes «se adecúa a las reglas sociales», apuntó Tuero.
Era importante la presencia en esos destinos precisamente para que esas personas fuesen a Asturias a colaborar. De esta forma, Tuero ha aportado cartas firmadas por el cineasta Woody Allen y por el cantautor Joan Manuel Serrat. También ha sido incorporada a la causa una prueba documental aportada por Alejandro Riera, que acusa en representación de la Fundación Niemeyer, relativa a estados económicos. José Luis Rebollo, por su parte, solicitó que el actual senador y expresidente de Asturias, Vicente Álvarez Areces, declare en el juicio.