La Voz de Asturias

El lado oscuro del Niemeyer

Avilés

Noelia Rodríguez Avilés

El centro se ha convertido en un plató para anuncios y vídeos de «Star Wars» pero también para  reportajes de boda o egobloggers

01 Aug 2016. Actualizado a las 05:00 h.

Varios caballeros imperiales de «Star Wars» se ven sorprendido por la rápido que circula un coche entre varios edificios de color blanco. Quienes hayan visto este anuncio que Nissan rodó hace tres años en Avilés -también había escenas del Calatrava de Oviedo- es probable que no identifiquen al Centro Niemeyer, puesto que estaba destinado al público japonés, pero la marca de coches fue la primera en ver el potencial del Centro Niemeyer como espacio en que rodar anuncios. A partir de ahí fueron otros muchos los que vieron lo que las curvas diseñadas por el arquitecto brasileño podían ofrecer como un plató en que inmortalizar imágenes de lo más variadas, desde más personajes de la saga de Lucas Films a fotografías de boda pasando por el rodaje de cortometrajes.  Desde que el complejo avilesino abriera sus puertas en 2011 ha sido el escenario de diversas campañas y no es raro encontrarse a profesionales grabando o haciendo fotografías en su entorno en cualquier momento y generando las miradas de los curiosos. Y es que hace poco allí se dieron cita 25 personas de la Orden 66 Asturias, una asociación de seguidores de «Star Wars» ataviados como sus personajes favoritos.

«El universo «Star Wars» es infinito y en el se pueden encontrar todo tipo de localizaciones y por qué no, alguna similar al Niemeyer», asegura uno de los miembros de su directiva, Juan Enrique Orellana. Explica que el complejo «lo que nos ofreció fue un sitio amplio y poco concurrido donde poder grabar y pasar una buen día junto a los compañeros, fue una grabación muy distendida ya que se buscaba enseñar el lado humano de la asociación» pero que para elegir la ubicación se fiaron de Creative Lab People, un proyecto audiovisual «amateur» y sin ánimo de lucro que ayuda a entidades y particulares a crear contenido. Pablo J. Rumoroso y Víctor M. de Miguel tienen claro por qué escogen el complejo avilesino: «nos gusta mucho ese espacio por lo diferente que es y lo representativo de Asturias, ya que es un icono ahora mismo reconocido en todo el mundo. Nos gusta la idea de poder jugar con ese paisaje como la visión moderna de Asturias, pero combinarlo con otros escenarios para que se reconozca la región». «Nos gusta apoyar la promoción de la región y de la ciudad, y que cuando se vean nuestros proyectos en algún lugar lejano, la gente que aún no lo haya visitado se interese por conocer el Centro Niemeyer», apunta Rumoroso. En el caso del vídeo de Orden 66 Asturias el Niemeyer les ofrecía, además, un marco futurista que buscaban.

Los caballeros imperiales de «Star Wars» se han dejado caer varias veces por el Niemeyer dando lugar a una estampa cuanto menos curiosa, pero no son los únicos vestidos de blanco que se han acercado hasta allí. En los últimos años han sido numerosos las parejas de novios, especialmente de la comarca de Avilés, que han elegido el complejo como espacio para los reportajes de boda. «Al principio no tanto pero en los últimos tiempos sí se nota que nos lo piden más», asegura la fotógrafa Tania Juan. Explica que resulta interesante el espacio por varias razones. De un lado la estética. «Los colores van bien tanto para reportajes de boda como temas de publicidad, al blanco y el hormigón cualquier color le viene bien y el amarillo del auditorio viene bien para resaltarlo», asegura al tiempo que añade que «el contraste de los edificios con curvas y el administrativo, que es totalmente recto, nos da también contraste y la pasarela de la plaza profundidad de campo». Por otro lado está el hecho de que se trata de un espacio en que a determinadas horas no hay mucha gente, lo que garantiza a los fotógrafos realizar su trabajo sin intromisiones de terceros en las imágenes, «algo que resulta muy difícil en el centro de Avilés, por ejemplo».

Quizás por esa misma razón el Centro Niemeyer se ha convertido también en un lugar de referencia para las egobloggers de la zona. Los edificios blancos se convierten en el fondo perfecto para lucir sus looks y resaltar los detalles lejos de las miradas de curiosos, aunque casi siempre con alguno se acaban encontrando. En los últimos tiempos, quizá por la presencia de cada vez más personas en las instalaciones del centro grabando o fotografiando, pero sobre todo por cuestiones de seguridad, se ha determinado que para hacer reportajes o vídeos se precise de una autorización. En el caso de que sean trabajos comerciales, como la grabación de un anuncio que suele, además, conllevar acotar el espacio para eso, la Fundación alquila las instalaciones del Niemeyer; el lado lucrativo de que el complejo de la ría se haya convertido en un plató en que rodar.


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