Los ricos crecen en Asturias: así ha aumentado el pago del impuesto de Patrimonio

Desde el año 2021 ha crecido el número de ricos residentes en Asturias, o al menos los que son registrados a la hora de hacer la declaración del Impuesto de Patrimonio que en el Principado pagan por poseer un patrimonio personal superior a los 700.000 euros (excluida la vivienda habitual hasta 300.000 euros). Fue un dato del que sacó pecho el consejero de Hacienda, Guillermo Peláez, en el pleno de este martes en su defensa ante la oposición de la «vía fiscal asturiana», señalando también que la comunidad había registrado el último año un elevado aumento de la creación de empresas y de la inversión para crearlas.

Los últimos datos de la Agencia Tributaria, correspondientes al año 2022, revelan que un total de 4.199 asturianos presentaron la declaración del impuesto sobre el Patrimonio, que únicamente es obligatorio para quienes superan el millón). Se trata de 189 contribuyentes más que los que se contabilizaba en el año 2021.

Casi 200 millonarios más en el Principado que ya unidos a los que había acumulan en conjunto un interesante monto de dinero. Entre todos, sumaban unas posesiones valoradas en 9.793 millones. Esto supone 70 millones más que en la campaña anterior.

No es extraño que el impuesto de Patrimonio protagonice debates como el de este pleno de la Junta General en el que la bancada conservadora, de la mano del diputado de Vox Gonzalo Centeno, hacía alusión a su efecto en la «competitividad fiscal» esgrimiendo un informe de Tax Foundation, una fundación creada por directivos de grandes corporaciones de EEUU (entre ellos los de General Motors y Exxon) para promover rebajas fiscales. El premio Nobel de Economía, Paul Krugman, ha considerado a esta fundación «una fuente no fiable». En todo caso el grupo elabora un denominado Índice autonómico de competitividad fiscal, que en su última edición pone a Asturias a la cola, sólo por delante de Cataluña, esencialmente por el impuesto de sucesiones, mientras que a la cabeza pone a Madrid.

Al respecto, y en el pleno, el consejero de Hacienda consideró que este informe incurre en una contradicción manifiesta porque dice que la primera y la última del listado, es decir Madrid y Cataluña, son a su vez las comunidades que más inversión captan de todo el país. Así, según recogió Efe, Pelaz adujo que ese concepto de competitividad fiscal «está sesgado» porque debería introducir también el concepto de suficiencia para el sostenimiento de los servicios públicos y no sólo de tratar de hacer atractivas las inversiones a costa de reducir la tributación del capital porque eso es una «amenaza para la convivencia y paz social» y va contra los intereses de la mayoría.

En este sentido, Peláez, consideró que la competitividad fiscal asturiana es un éxito que se traduce en un aumento de la población durante tres años seguidos, en 18.000 trabajadores más afiliados a la Seguridad Social y en 14.000 parados menos, pero también en un récord de inversión extranjera en el primer semestre de este año, 527 millones, una cifra solo superada por Madrid y Cataluña.

Además de citra el aumento en el impuesto sobre el Patrimonio, el consejero aseguró también que había un récord en la creación de empresas durante este ejercicio, un 14,6 por ciento más, mientras que el capital invertido se ha incrementado en un 34 por ciento respecto a 2023, cuando el saldo nacional es negativo.

«¿Si la fiscalidad empresarial fuese se un problema se instalaría aquí Amazon?», señaló el consejero en referencia a la apertura definitiva, el pasado mes de septiembre, del centro logístico de la multinacional instalado en Bobes, en Siero, que da cobertura al todo el noroeste de la península, tanto envíos de España como de Portugal.