Barbón cierra la primera jornada del debate sobre el estado de la región con una llamada a lograr consensos

El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha apelado este martes a la «lealtad» de la oposición para tejer grandes consensos parlamentarios y aprobar los presupuestos regionales de 2025 porque, según ha remarcado, la comunidad «se merece entrega y generosidad».

El jefe del Ejecutivo asturiano ha centrado gran parte de su discurso, de cerca de noventa minutos, en la primera sesión del debate de orientación política en reivindicar la necesidad de entendimiento en cuestiones que no entienden de la «trinchera partidista» ni de la «alambrada de siglas».

«Asturias se merece ese esfuerzo», ha asegurado en asuntos como las leyes de Ciencia, de Proyectos Estratégicos y de Les Escuelines y la normativa de turismo; la actualización del mapa sanitario; los pactos por el medio rural, la salud mental, la industria o los cuidados y la oficialidad del asturiano.

También se ha mostrado dispuesto a «dialogar y a negociar con todos los grupos», salvo Vox, el proyecto presupuestario del próximo ejercicio, que mejorará la fiscalidad de la clase media y trabajadora y que reforzará la sanidad, la educación, las políticas de vivienda y los derechos sociales.

Financiación autonómica

En su discurso, en el que ha reivindicado en varias ocasiones la fortaleza del Gobierno de coalición con IU, el presidente ha afirmado que mantendrá su «lealtad con Asturias» en el encuentro del viernes con el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, para hablar de financiación autonómica, entre otros asuntos.

Ha insistido en que su «hoja de ruta» sobre la financiación es el acuerdo alcanzado en 2020 en el parlamento asturiano para defender una reforma basada en el coste real de los servicios y que tenga en cuenta el envejecimiento, la dispersión o la orografía a la hora de asegurar los servicios públicos.

«Nunca aceptaremos nada que perjudique al Principado», ha insistido Barbón a este respecto.

En materia de fiscalidad, ha sostenido que el Principado seguirá robusteciendo su «modelo de justicia» en el presupuesto de 2025 y que contrasta con los «saldos fiscales» y el «espejismo de café para todos» que ofrecen otros gobiernos autonómicos.

Frente a ello, ha reivindicado la vía fiscal asturiana, cuyos beneficiarios han pasado de 25.000 en 2021 a más de 83.000 al año siguiente.

Gratuidad de estudios universitarios

El presidente regional ha anunciado en la sesión que, a partir del próximo curso, la matrícula del primer curso universitario será «completamente gratuita hasta un umbral de renta» y podrá serlo también durante toda la carrera «para quienes superen determinados requisitos académicos».

También ha prometido mantener las políticas de viviendas como «bandera de mandato» con la puesta en marcha de medidas para facilitar el alquiler, como la creación de una figura que permita al Gobierno de Asturias captar pisos vacíos y gestionarlos con garantías para los propietarios.

La administración, según ha explicado, actuaría como avalista para asegurar tanto el cobro como el buen estado del inmueble.

Asimismo, ha confiado en que durante el próximo ejercicio puedan alcanzarse pactos por la salud mental y por el medio rural.

Industria y comunicaciones

En su intervención, el presidente ha garantizado que Asturias «mantendrá la única siderurgia integral del país», tal y como planteó recientemente el ministro de Industria, Jordi Hereu, ya que ni España ni Europa pueden permitirse «la pérdida de empresas o actividades estratégicas» porque necesitan «una política industrial propia y resuelta».

Aunque ha sostenido que, aunque se aprecian «sombras» que amenazan a la industria de la comunidad, el «temido colapso no se detecta por lado alguno».

Por otro lado, ha situado entre los grandes objetivos de su Ejecutivo en materia de comunicaciones «avanzar hacia la supresión» del peaje del Huerna (AP-66), entre Asturias y León, y culminar la autovía del suroccidente.

Calidad turística

Asegurar la calidad y sostenibilidad del sector turístico es otro de los ejes del Gobierno de Barbón, que ha querido remarcar que «la turismofobia no existe en Asturias» y «tampoco hay una masificación que la justifique».

Ese es el objetivo de la regulación de viviendas de uso turístico y de la habilitación, a partir del año próximo, de una tasa de carácter municipal y voluntaria, según ha apuntado antes de apostar por «reaccionar antes de que sea tarde».

Avanzar en igualdad

Barbón ha aprovechado su discurso para sostener que avanzar en igualdad y memoria democrática sería «un recorrido imposible si Asturias estuviese gobernada por PP y Vox».

El presidente autonómico también ha sostenido que «el binomio PP-Vox» no habría permitido que salieran adelante medidas como la creación del Instituto de Memoria Democrática o las diferentes exhumaciones de víctimas de la Guerra Civil que están teniendo lugar en Asturias.

Críticas de la oposición

Al finalizar la sesión, el presidente del PP de Asturias, Álvaro Queipo, ha considerado que Barbón está al frente de un «proyecto agotado» y que su intervención en el debate evidencia que «no vive en la realidad que viven el resto de asturianos».

Por parte de Vox, su portavoz parlamentaria, Carolina López, le ha recriminado que no se haya referido a la inmigración, «la principal preocupación de los españoles».

Para el diputado del grupo mixto Adrián Pumares la intervención de Barbón ha sido «previsible» y con «pocos anuncios», mientras que su compañera de filas Covadonga Tomé ha asegurado que el consenso al que apela el presidente se practica cada día y «no se pide» en un discurso.

A juicio de Xabel Vegas, portavoz de Convocatoria por Asturies, su socio de Gobierno, ha sido un «buen discurso» en el que «no ha caído en la autocomplacencia» y ha planteado consensos sobre grandes temas.; informó EFE.