Las maravillas históricas de parada obligatoria en Asturias
Asturias
Algunas se encuentran en el listado del Patrimonio de la Humanidad, otras son Bien de Interés Cultural y entre todas muestran la riqueza y relevancia del Principado a lo largo de los siglos
15 Sep 2024. Actualizado a las 05:00 h.
Asturias guarda entre sus concejos, algunos en las principales ciudades y otros en concejos de su interior, joyas y maravillas con significativa relevancia en la historia de España y en la religiosa a nivel mundial. Como por ejemplo, el inicio del camino primitivo de Santiago, que comienza en Oviedo, numerosas arquitecturas fundadas por los últimos reyes de Asturias o leyendas que forman parte de las leyendas populares con un milenio de antigüedad.
Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo
A una distancia de 200 metros de distancia se encuentran Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, ambos a cuatro kilómetros del centro de Oviedo.
Las dos arquitecturas se encuentran a los pies del monte Naranco y comparten su origen. Por una parte, Santa María, construida en el año 842, se pensó como un edificio para el uso religioso y civil y para recibir la sepultura del rey Ramiro I, que forma parte de un complejo de construcciones eclesiásticas.
San Miguel de Lillo sí fue pensada como iglesia, sin embargo destruyeron una cabecera y parte de sus naves, lo que llevó el culto a Santa María sobre el siglo XII. Actualmente Santa María del Naranco es Patrimonio Mundial de la Humanidad desde 1985 y sigue manteniendo su papel de templo oficial de la parroquia.
Monasterio San Salvador de Cornellana
El Monasterio San Salvador de Cornellana celebra su milenio este 2024. Fue fundado por la infanta Cristina, hija de la reina Velasquita y Bermudo II, en 1024. A la muerte de su creadora, se cedió a los monjes de Cluny en el año 1122 para un cenobio benedictino.
Está compuesto por la iglesia y el monasterio adjunto. La primera es románica reformada en el siglo XVII y su interior está decorado por retablos del mismo siglo. Cuenta también con una torre campanario cuadrada, que contrasta con los muros curvos. La segunda se reformó a principios del siglo XVIII, se añadió una fachada de dos pisos con balcones de hierro.
Su historia guarda un mito. En la puerta del huerto se puede ver a una osa amamantando a una niña, que se encuentra rodeada por dos cabezas de león a ambos lados. Cuenta la leyenda que se trata de la infanta Cristina, quien fundó esta arquitectura, que fue amamantada por una hembra de oso tras perderse en los bosques de Asturias.
Catedral de Oviedo y la Cámara Santa
Está situada en el corazón de la Catedral de Oviedo y fue el rey Alfonso II quien la mandó construir en el siglo IX. Su cometido era guardar importantes reliquias cristianas, como el Arca de las Reliquias, la Cruz de los Ángeles o la Caja de las Ágatas, y su diseño de estilo prerrománico muestra su relevancia histórica. Tal es su relevancia cultural a nivel mundial que está designada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El lugar donde se guarda también forma parte del patrimonio histórico para Asturias. La construcción de la catedral gótica de San Salvador de Oviedo culmina a mediados del siglo XVI con la torre. Fue edificada sobre las ruinas de una iglesia, erigida por el rey de Asturias Fruela I.
Este enclave de la cultura y patrimonio, junto a la Cámara Santa que guarda, tiene su propia frase popular que resume su relevancia: Quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado y no al Señor. Debido a la peregrinación que comienza en Oviedo, el camino primitivo que es el peregrinaje a Santiago más antiguo.
Cueva de Covaciella
Esta cueva alberga pinturas de bisontes, caballos o ciervos que fueron descubiertas en 1994. Los dibujos que decoran sus paredes son de hace más de 14.000 años y se conservan en un buen estado, probablemente gracias a que estuvo sellada hasta su descubrimiento fortuito.
Se encuentra en el desfiladero de Las Estazanas, aunque no se puede visitar, pero en Cabrales es donde se encuentra el aula de interpretación de Covaciella en La Casa Bárcena. La localización original tiene una galería de 40 metros con la representación de bisontes mejor conservada de Asturias, pinturas rupestres paleolíticas del periodo Magdaleniense. Este descubrimiento involuntario ocurrió en 1994 tras una explosión efectuada en las obras de ampliación de la AS-114 que provocó la rotura de la bóveda de la cueva.
Conjunto Monumental de Valdediós
Junto con otras dependencias palaciales, Alfonso III mandó construir la iglesia de San Salvador de Valdediós, popularmente llamada El Conventín, entre los siglos XIII y XVIII. Está dedicado a la Anunciación de Nuestra Señora y lo forman la iglesia y el claustro. A pesar de su origen, también sirvió para otros usos como seminario o colegio de segunda enseñanza.
Es uno de los monasterios más poderosos y relevantes de Asturias y su claustro es clasicista, considerado el mayor de los que existen en Asturias. Su iglesia es considerada la última gran obra del arte asturiano y destaca en el legado de la arquitectura románica cisterciense en el Principado. A pocos metros se encuentra el Monasterio de Santa María de Valdediós, fundado en el año 1200 por Alfonso IX y Berenguela de Castilla.
Iglesia Santo Adriano de Tuñón
Otra obra de Alfonso III fundada en 891, en lo que hoy se conoce como los Valles del Oso. La declararon Bien de Interés Cultural en 2024 y Monumento Nacional en 1931. La Iglesia Santo Adriano de Tuñón es una de las obras que menos se conocen del conjunto prerrománico asturiano. Desde su nacimiento vivió numerosas reformas, la primera en 1108 y las últimas en la década de los 80.
Se encuentra en Tuñón, en el concejo de Santo Adriano. La abadía está dedicada a los mártires Adriano y Natalia, su esposa, y formó parte de un monasterio benedictino. Los más interesante de su existencia son los restos de pinturas murales con la alegoría del Sol y la Luna, y que se conservan en la capilla principal, y el friso de almenas con influencias mozárabes.
San Andrés de Bedriñana
La iglesia de San Andrés de Bedriñana, parroquia del concejo de Villaviciosa, data de los siglos IX y XIII. Es una de las que conserva aún testimonios pictóricos que se pueden ver en los muros norte y sur, en tonos azules y rojizos.
Del templo románico aún conserva el arco triunfal en su interior. Por otro lado, también conversa la numeración que identifica las diferentes sepulturas que guarda a sus pies. Numerosas excavaciones arqueológicas lograron demostrar que desde sus cimientos, su estilo original es prerrománico y que fue modificada en el siglo XII, con la puerta meridional.
Al igual que el de Valdediós, anteriormente mencionado, su diseño es copia de un prototipo paleoislámico de origen andalusí. También coincide el contenido temático vegetal de su elemento más destacado, la celosía, con influencias artísticas sirio-bizantinas.