El Principado celebra la flexibilización del margen fiscal

El Gobierno del Principado ha celebrado que el Ministerio de Hacienda haya decidido flexibilizar el margen fiscal para las comunidades autónomas, algo que va a permitir mantener las prestaciones de los servicios.

Así lo ha apuntado el consejero de Ciencia, Empresas, Formación y Empleo, Borja Sánchez, tras participar en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) en sustitución del titular de Hacienda, Guillermo Peláez, quien se encuentra disfrutando una baja por paternidad.

En dicho encuentro, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha comunicado a las autonomías que podrán incurrir en un déficit máximo del 0,1% del PIB en 2025, lo que supone dos décimas de margen fiscal respecto a la anterior senda, que implicaba alcanzar un superávit del 0,1% de PIB.

La senda fiscal vigente para las comunidades autónomas para el periodo 2024-2026, establecía que el subsector autonómico tiene que llegar al equilibrio presupuestario en 2024 y que en 2025 y 2026 tenía que contar con un superávit del 0,1% del PIB. La nueva senda fiscal para el periodo 2025-2027, que mañana, 16 de julio, se aprobará en Consejo de Ministros y que tendrá que ser validada por las Cortes, da mayor margen fiscal a las regiones no solo en 2025, sino también en 2026 y 2027, años para los que también se fija un déficit del 0,1% del PIB.

Sánchez ha dicho que esta medida es «bienvenida» por parte del Gobierno del Principado porque va a aportar flexibilidad para sostener los servicios públicos en un escenario «incierto» en el que los ingresos van a descender mientras los costes probablemente se incrementarán. El consejero ha apuntado que la medida se ha aprobado a pesar de que las comunidades gobernadas por el PP se han abstenido al mantener una línea de confrontación.

Durante la reunión, también se ha abordado la necesidad de la reforma del modelo de financiación autonómica, un debate en el que el Gobierno central se ha comprometido a seguir trabajando en la búsqueda de consensos ante la urgencia de un asunto que preocupa a todas las comunidades. Sánchez ha reiterado que la postura del Principado pasa por tener en cuenta el coste real de la prestación de los servicios con singularidades que en el caso de Asturias son el envejecimiento, la orografía o la dispersión de la población.

A este respecto, el presidente del Principado, Adrián Barbón, subrayó que el debate sobre la reforma de la financiación autonómica no supone un problema para los socialistas, pero sí para un PP dividido en dos frentes. Según el jefe del Ejecutivo asturiano, las comunidades gobernadas por el PP, que son la mayoría, tienen intereses contrapuestos: el de las regiones del nororeste, que al igual que Asturias reclaman que la financiación tengan en cuenta el coste real de los servicios, y el que plantea que el reparto se haga atendiendo a la población pura y dura como, asegura Barbón, defienden Madrid, la Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia o Baleares.

En el caso de las comunidades socialistas, Asturias y Castilla La Mancha, las dos de régimen común en las que gobiernan, no hay posturas enfrentadas porque ambas comparten el criterio de que se tengan en cuenta cuestiones como el envejecimiento, la dispersión, la despoblación o la orografía a la hora de definir un nuevo modelo, ha expuesto Barbón en declaraciones a los periodistas, informa Efe.