Los sindicatos mineros instan a SEPI y a Hunosa a poner en marcha ya proyectos que aprovechen los pozos cerrados
Asturias
El SOMA considera que el entrenamiento realizado por el Ejército de Tierra en el Pozo Santiago hace unos días es «un aval» para la creación del Centro Nacional de Entrenamiento en Rescates que llevan años demandando
10 Jun 2024. Actualizado a las 05:00 h.
Los pozos mineros cerrados por el cese de la actividad extractiva de carbón pueden ser más que patrimonio industrial y minero y pueden volver a ser generadores de actividades que contribuyan a sufragar los costes eternos que supone su obligado mantenimiento. Desde los sindicatos mineros SOMA-FITAG-UGT y CC OO de Hunosa llevan años defendiendo que las minas pueden tener una segunda vida y realizando propuestas de proyectos que podrían ser alternativas para aprovechar las instalaciones cerradas. Una prueba de ello ha sido para el SOMA el entrenamiento que hace unos días realizaba el Ejército de Tierra en el pozo Santiago, algo que era valorado por la organización sindical como «un aval» para la creación en dichas instalaciones de un Centro nacional de Entrenamiento en Rescates, una iniciativa que puso sobre la mesa hace cinco años.
Teniendo en cuenta esto, que en cuanto comience la transformación de la central térmica de La Pereda en central de biomasa se dejará de sacar carbón en el pozo Nicolasa y el protocolo acordado entre Hunosa, el Principado y Universidad para impulsar laboratorios de vanguardia en antiguas instalaciones mineras, los sindatos instan a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y a Hunosa a poner en marcha ya proyectos que generen empleo estable y de calidad en los pozos cerrados.
«Nosotros tenemos claro que en este momento, en el que todavía se está trabajando en Carrio, Santiago y Nicolasa, con labores de manteniento o con actividad, todavía hay posibilidad de dedicarlos a otras ocupaciones cuando, además, ya se han planteado proyectos concretos», manifiesta José Luis Alperi, secretario general del SOMA. Como se decía anteriormente, para este sindicato una prueba de ello ha sido el entrenamiento que hace unos días realizaba el Ejército de Tierra en el pozo Santiago, «un centro de excelencia en la formación para actividades subterráneas», destacaban desde el SOMA. Además, se recuerda desde el sindicato que en 2018 ya se celebró en el Pozo Santiago el Congreso Internacional de Seguridad en Espacios Confinados y obras Subterráneas (ECO) con un ejercicio práctico en el que intervinieron la Unidad Militar de Emergencia, Bomberos 112 Asturias, Servicio de Montaña de la Guardia Civil y la unidad de Subsuelo del Cuerpo Nacional de la Policía.
Pero la reivindicación de ubicar el Centro Nacional de Entrenamiento en Rescates en pozo Santiago y vincularlo a la Brigada de Salvamento Mineros, ubicada en el pozo Fondón, no es la única del SOMA. Alperi retoma las propuestas de que el pozo San Jorge se aproveche para instalar un centro de almacenamiento y procesamiento de datos o que las galerías del pozo Carrio se utilicen para investigación y ensayos de cultivos dando sentido al proyecto AgroCarrio. A esto suma la siempre posibilidad que hay de aprovechar el agua de mina para proyecto como la geotermia, para los proyectos de fabricación de hidrógeno verde dada su buena calidad o para la generación hidroeléctrica a través de bombeos reversibles, opción que ve factible para el pozo Nicolasa una vez concluya su actividad extractiva. Otra propuesta es que los terrenos de las instalaciones mineras alberguen parques de baterías.
«Estas actividades ayudarían a mitigar los costes eternos que tienen los pozos cerrados», señala José Luis Alperi, que aboga porque Hunosa sea una empresa pública energética porque «hay maneras de aprovechar los pozos mineros, elementos singulares y diferenciadores de Asturias».
«Se puede hacer si hay voluntad de ponerlo en marcha, porque está claro que el futuro de Hunosa no está en sacar carbón, así que habrá que poner sobre la mesa propuestas que generen empleo estable y de calidad, que generen actividades alternativas para las que seguramente haya que contratar gente», manifiesta el secretario general del SOMA, que dice claramente que «lo que no entendemos es por qué cuesta tanto trabajo desarrollarlos» cuando «llevamos seis o siete años empujándolos». «Hunosa y SEPI que se pongan en marcha», reivindica el mismo.
Cambiar cierres por oportunidades de futuro
Adrián Pérez, secretario general de la sección sindical de CCOO en Hunosa, también deja claro que desde el sindicato que representa apoyan cualquier iniciativa encaminada a dar una segunda vida a los pozos que cesan la actividad extractiva. «Es de justicia que los pozos en los que trabajaron miles de personas a lo largo de los años no pasen a ser simplemente un pasivo minero o un vestigio de lo que un día fueron, sino que puedan ponerse en marcha actividades alternativas que den una segunda vida a estos centros», asevera el mismo, quien pone de relieve también que «los pozos mineros poseen espacios con unas características singulares que aportan cierto valor añadido para determinadas actividades como pueden ser las relacionadas con las nuevas tecnologías o el I+D».
En este sentido, el matiz que hacen desde CCOO de Hunosa es que consideran que esas actividades pueden ser «poco intensivas en generación de empleo y más orientadas a perfiles de alta cualificación». Por eso, Adrián Pérez añade que las iniciativas relacionadas con las energías renovables «sí son más interesantes en cuanto al número de puestos de trabajo». Así, recuerda una de las propuestas que CCOO hizo a Hunosa sobre el aprovechamiento de los pozos para la instalación de centrales de bombeo reversible que sirvan para aprovechar y rentabilizar los miles de metros cúbicos que deben bombearse eternamente tras el cierre definitivo.
En definitiva, lo que plantea el secretario general de CC OO de Hunosa es que «debemos aprovechar esta coyuntura que se nos presenta para cambiar los cierres por oportunidades de futuro que contribuyan a saldar la deuda histórica que existe con estas comarcas tan castigadas por esta acelerada e injusta transición energética». Por ello, Adrián Pérez concluye que «desde CCOO apoyaremos cualquier iniciativa industrial que genere empleo y riqueza».