El acusado de matar a su novio en Soto del Barco no recuerda asestarle una puñalada porque «estaba muy borracho»

El joven acusado de asesinar hace dos años en Soto del Barco a un sexagenario con el que había iniciado una relación sentimental cuatro meses antes ha declarado en el juicio que no recuerda si le asestó una puñalada en el pecho porque ese día «estaba muy borracho».

El joven de 24 años ha reconocido haber discutido con la víctima y otra pareja con quien compartía una vivienda en el barrio de La Arena, pero aseguró que no recuerda si agredió con un cuchillo de cocina a su compañero sentimental, como afirma la Fiscalía y la acusación particular.

El hombre de 60 años murió el 4 de noviembre de 2020 «solo» y «desangrado» en el interior de su coche en una cuneta de la carretera que conecta La Arena con Soto del Barco, cuando se dirigía herido al Hospital de San Agustín para curarse de una herida punzante que le perforó el pulmón unos centímetros debajo de la clavícula.

El Ministerio Público ha reiterado en la primera jornada del juicio con jurado que se celebra en la Sala Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias su petición inicial de una condena de 20 años de prisión, otros cinco de libertad vigilada, la misma pena que solicita la acusación particular ejercida por nueve hermanos y un sobrino de la víctima.

Según han declarado los dos hombres que formaban la otra pareja que vivía en la misma casa que el acusado, en la calle del Río Nalón, en la localidad de La Arena, los hechos se produjeron sobre las 21.30 horas del 4 de noviembre de 2020, cuando se produjo una discusión porque el joven quería que su novio le llevara con el coche a La Carriona, en Avilés, para comprar hachís, una droga que consumía a diario y mezclaba con grandes cantidades de vino y cerveza.

En respuesta a preguntas de su abogado, el acusado ha admitido que a diario bebía dos o tres litros de vino y unas 30 latas de cerveza y que ese día «iba muy colocado» y no recuerda haber tenido en sus manos un cuchillo en ningún momento.

Según el escrito preliminar de la Fiscalía, es día iniciaron una discusión cuando el joven y su novio estaban en la habitación de la planta superior de la vivienda, momento en el que el procesado bajó a la planta inferior, donde se encontraban el dueño de la vivienda y la pareja de este. Al bajar a la planta baja el acusado golpeó con dos puñetazos y tiró al suelo a dueño de la casa y se causó lesiones propias en una mano al golpear un cuadro que tenía un cristal, heridas que su pareja intentó curar.

La pareja del dueño de la casa ha declarado que la discusión se produjo porque el novio del acusado se negó a trasladarlo en su coche al barrio de La Carriona, en Avilés para comprar «chocolate» para fumar, lo que lo puso «muy agresivo». Ninguno de los dos testigos que en ese momento se encontraban en el interior de la casa vio si el procesado se trasladó hacia una cocina exterior para coger un cuchillo, del que solo fue hallado el mango, según el informe de la Guardia Civil.

En esta primera jornada, también han testificado tres de los nueve hermanos que ejercen la acusación particular, para los se piden indemnizaciones de 23.979 euros para cada uno, así como la cuantía que se determine en la vista o, subsidiariamente en ejecución de sentencia, por los gastos de traslado del fallecido, entierro-incineración y funeral. El juicio continuará mañana, 27 de febrero, con la declaración de los agentes de la Guardia Civil que realizaron la investigación, peritos y forenses, informa Efe.