Barbón: «Si no hay acuerdo, la sociedad me va a obligar a mí como presidente a afrontar un cambio de modelo en las ITV»

Asturias tiene encima de la mesa dos conflictos empresariales y laborales que preocupan especialmente a la sociedad. Por un lado, ArcelorMittal, multinacionalidad que tiene aprobados 500 millones pero que no concreta la ejecución de las inversiones comprometidas. Por otro, las ITV, con una negociación enconada entre las partes. En este punto, Adrián Barbón pide abandonar el inmovilismo y, aunque asevera que nunca habló de privatización, adelanta que si no hay acuerdo existe la posibilidad de cambiar a un sistema mixto, como ocurre en otras comunidades. En política nacional, asegura que defiende la ley de amnistía siempre que sea constitucional, y subraya que «no hay un partido más constitucionalista que el PSOE». También sostiene que la quita de deuda beneficiará a Asturias siempre y cuando se cumplan las directrices avanzadas por el gobierno central.

-¿Por qué no se desbloquea el conflicto de las ITV? ¿Es la privatización una opción?

-Yo hablé de un cambio de modelo, no privatización, pero no me planteo, de modo alguno, o no me he planteado vender las ITV a un empresario privado. No, lo que yo estaba hablando es que en otras partes, en otras comunidades, funcionan sistemas mixtos y Asturias es un rara avis en este sistema. La reflexión que hago, con el espíritu y la vocación de que haya entendimiento, es la siguiente: para que los servicios públicos sigan teniendo la creencia del ciudadano, que los ciudadanos sigan creyendo en ellos, necesitan del esfuerzo de todos. Del gobierno, sí, pero también de los trabajadores. Si no cuidamos los servicios públicos, lo que puede llegar es un momento en el que los ciudadanos nos empujen a todos a un cambio de modelo. A mí el primero. ¿Por qué? Porque te digan que esto no funciona, no nos esta generando más que perjuicios. Por eso hice esa reflexión de pedir que se alcanzara un acuerdo, porque además es que el Gobierno de Asturias ha hecho cesiones importantes. Hay cuestiones que no podemos por ley, pero en las que sí podemos por ley las hemos hecho. Por ejemplo, rebajar la jornada a 35 horas. Les hemos dicho que sería a partir del mes de septiembre para recuperar este tiempo perdido por todas las revisiones que están en marcha, y a cambio les pedimos un único esfuerzo, que es aumentar un poco la productividad de revisiones que tienen lugar cada día. Por cierto, Asturias es la que menor número de revisiones tiene por trabajador al día. No estamos pidiendo un esfuerzo extraordinario imposible de asumir, les estamos pidiendo a todos comprensión y un esfuerzo porque si no, no es que yo quiera, es que la sociedad me va a obligar a mí como presidente el Principado a afrontar un cambio de modelo.

-Al margen de las dudas con la inversión de ArcelorMittal, la otra gran multinacional que no acaba de decidirse es Amazon. ¿Son optimistas?

-Nosotros tenemos noticias de que va a ser la propia empresa en su momento la que anuncie sus planes en cuanto a las fechas, sus plazos y todas estas cuestiones. Por tanto, ahí permítame que sea muy prudente. Además, creo que es bueno que sea así. Ya sé que los políticos tenemos tendencia natural a intentar apropiarnos de todo. Nosotros tenemos que crear el clima adecuado para que una inversión se establezca aquí en Asturias permanentemente. Todos los años se están estableciendo inversiones, a veces pasan desapercibidas porque lo negativo brilla más que lo positivo, pero lo cierto es que es así. Hace poco la ministra de Defensa, por ejemplo, exigía a Santa Bárbara que abriera una segunda línea de inversión. Permanentemente estamos teniendo buenas noticias desde el sector inversor, pero en este sentido tienen que ser las propias empresas las que anuncien las fechas. A mí no me gusta decirlo yo, sino que lo digan ellas.

-Para la llegada de otra de estas de estas grandes empresas como es Costco hace falta la modificación de la ley, ¿están trabajando en esos cambios?

-Vamos a hacer un análisis y a escuchar a todos los agentes implicados. Aquí hay que tener en cuenta a muchas personas implicadas.

Política nacional

-¿Qué opina de la ley de amnistía? ¿Le incomoda todo el ruido mediático alrededor de la medida?

-Yo defiendo la amnistía siempre que sea constitucional. La alternativa del Gobierno en España se reducía a un gobierno de PP-Vox, que era, por cierto, la alternativa del Gobierno de Asturias. Ha visto lo que pasó en el resto de comunidades autónomas. Es decir, por mucho que el PP quiera disimular, aquí ya tenían un prepacto acordado con Vox, como lo tuvieron en toda España, y no disimularon, además, con medidas regresivas que van en contra de los derechos de las mujeres, del colectivo LGTBI, de la cultura o volviendo a la censura, como lo intentaron en Gijón. La alternativa a eso es un gobierno de PSOE y Sumar, con esa complejidad parlamentaria de la que hablamos. Frente a un gobierno de PP-Vox, lo tengo clarísimo. Con todas las dificultades del mundo, un gobierno de PSOE-Sumar sube las pensiones de acuerdo al IPC. A mis padres, por ejemplo, ya les ha llegado la subida, y no tiene nada que ver con el 0,25% de aquellas subidas que había antes. Está la subida del salario mínimo, la reducción de la brecha de género, el incremento de becas, la incorporación de nuevas medidas sociales... Entre un gobierno que prime los derechos de las mayorías sociales de este país y que tenga especial sensibilidad con las clases trabajadoras, las clases medias, y las personas más vulnerables y un gobierno de PP- Vox, que es un gobierno de involución, lo tengo claro. Si hubiera otra mitad alternativa, podríamos discutir sobre ello, pero es que la alternativa del gobierno nacional era este y yo tengo mucho miedo a un gobierno de Vox cuyo primer ataque es a las identidades, también a las territoriales. Lleva en su discurso ir en contra de los derechos de las comunidades autónomas.

Lamento ese efecto contagio de Vox en el PP. No tiene nada que ver con lo que nosotros conocíamos, con la forma de ser de Feijoo. Yo soy el primer sorprendido, de verdad. También tiene mucho que ver con el microcosmos de la política madrileña, esa especie de olla a presión en la que el insulto se convierte en habitual, en la que los presidentes o los diputados se insultan. Jamás usted va a escuchar un insulto mío, ni en público ni en privado, a ningún político, ni tan siquiera a los dirigentes de Vox, que en esto están en las antípodas. Tienen mi respeto personal, lógicamente no voy a dialogar con ellos y no voy a pactar nada porque estoy en las antípodas de alguien que niega los derechos del colectivo LGTBI. Como comprenderá, no voy a ser yo el que acuerde con ellos, es imposible, pero hombre, lo que sí digo es que les respeto como personas y respeto a sus votantes. De hecho, intento convencer a sus votantes del error de votarles. Bueno, pues la alternativa es eso, o PSOE- Sumar o PP-Vox a nivel del Estado. No había más. El límite es que la amnistía sea constitucional y estoy convencido de la constitucionalidad de mi partido. Yo creo que no pueden darle lecciones al PSOE de constitucionalidad. No tengan ninguna duda que la defendimos en el pasado y la defendemos en el presente. El gobierno defiende plenamente la Constitución y la va a defender en el futuro. No tengo ninguna duda.

-¿Ya sabe cómo va a beneficiar a Asturias la condonación de la deuda a la que se comprometió Pedro Sánchez?

-Yo dije entonces y siempre digo eso de Asturias lo primero. Y no estoy imitando a Trump, no es «American first», lo que quiero decir es que cuando en un contexto, en una decisión política del Gobierno de España, me toque elegir entre la lealtad a Asturias y la lealtad institucional al Gobierno de España, lógicamente la lealtad a Asturias es lo primero. Lo primero que yo pedí es que la condonación fuera para todas; en segundo lugar, que no fuera solo el FLA; y en tercer lugar que fuera una fórmula objetiva. Las tres cosas están en el anuncio que ha hecho la ministra de Hacienda y vicepresidenta y ahora falta la aplicación práctica. Vamos a ver cómo queda eso, pero yo le digo una cosa clara, siendo Asturias una de las comunidades con menos deuda por habitante, siendo Asturias una de las comunidades en términos absolutos con menos deuda, de hecho durante mi mandato se ha reducido no sólo la deuda en términos del PIB sino también en deuda absoluta, claro que si hay una quita de deuda también nos beneficia. Soy el primero que reconoce que si se calcula de forma objetiva, no solo en base al FLA, y tiene en cuenta la deuda con terceros, me beneficia y va a significar para Asturias que nuestro sistema sea más sostenible. Pero necesitamos saber la fórmula, parece ser que en febrero es cuando la va a anunciar la ministra. Haremos los números y diremos y defenderemos nuestra postura. 

 -¿Está de acuerdo con las críticas de Emiliano García Page al Gobierno o considera que debería ser un poco más comedido en sus afirmaciones?

-En realidad, por lo que vi, fue una conversación que tuvo lugar después de la inauguración de Fitur. Estábamos todos en la línea de saludos de los reyes, que la gente no se extrañe si a mí me ve hablando con presidentes del PP, estoy rodeado de ellos porque las filas se hacen por orden de aprobación del Estatuto y, efectivamente, solo hay tres presidentes socialistas, que tenemos buena relación entre los tres: la Presidenta de Navarra, el presidente de Castilla-La Mancha y yo.

-Pero usted en esas reuniones que tiene con otros presidentes no critica al presidente del Gobierno, ¿no?

-Evidentemente, yo nunca hago declaraciones de ese tipo.