Sin acuerdo en Orovalle: los trabajadores retoman la huelga indefinida

Los sindicatos han decidido retomar desde este viernes la huelga indefinida en Orovalle, la compañía minera que extrae oro, cobre y plata en Belmonte de Miranda y Salas, tras el fracaso en la reunión que mantuvieron ayer con la dirección de la compañía, según han informado a EFE fuentes sindicales. Por su parte, la empresa lamenta «la imposibilidad» de alcanzar un acuerdo y considera que el motivo es «la posición inmovilista de determinadas personas de la parte social». Por este motivo, insiste en la necesidad de que los sindicatos negocien «de buena fe, buscando el interés general de la plantilla y no sobre la base de directrices sindicales o intereses personales».

Los representantes de los trabajadores han vuelto convocar, a partir de este viernes, a los 480 trabajadores de Orovalle a la realización de tres horas de paro por cada turno de trabajo tras no haberse llegado a un acuerdo en la negociación del convenio colectivo.

El pasado martes se alcanzó un acuerdo para volver a reunirse en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec) tras la decisión de la empresa de retirar los expedientes disciplinarios iniciados el pasado viernes contra siete trabajadores y el compromiso de la parte social de suspender la huelga los siguientes dos días, el 3 y el 4 de enero.

Las negociaciones celebradas ayer, jueves, se cerraron sobre las 2:30 horas de hoy sin que se alcanzara un acuerdo entre las partes, con especial discrepancia en relación a la subida salarial de los próximos años, ya que, según los sindicatos, la empresa quiere vincularla a los «fichajes de asistencia». Este punto ha sido rechazado por las organizaciones sindicales, al oponerse a que esté ligada al nivel de absentismo y de productividad. Orovalle sostiene -y aporta el documento presentado en la negociación- que eso no es así y que su planteamiento pasa por una cláusula de revisión salarial, con límite del 1%, vinculada de forma acumulativa al IPC «y tiempos efectivos de trabajo del conjunto de la plantilla».

En concreto, los sindicatos aceptan un incremento salarial del 4% para este año y del 3% en 2024 y 2025, más un plus consolidable vinculado a la evolución del IPC, pero han señalado que, si accediesen a la propuesta de la dirección, «los trabajadores que estén de vacaciones o de permiso de paternidad perderán dinero con la vinculación de la producción a sus salarios».

Además de este «principal escollo», los sindicatos también han rehusado la intención de la empresa de endurecer los controles de drogas y alcohol a los trabajadores de la plantilla «a un nivel tan estricto que no tienen ni los pilotos de Iberia», han subrayado. La empresa también discrepa en este punto y señala que en su propuesta en ningún momento se fijan límites de consumo.

Los sindicatos tienen previsto ahora iniciar una ronda de asambleas con los trabajadores para informarles de las negociaciones con la dirección de la empresa y para tratar las movilizaciones que prevén realizar en el marco de esta huelga que comenzó el pasado 13 de noviembre.