Orovalle retira los expedientes sancionadores y el comité suspende la huelga durante dos días
Asturias
La plantilla, compuesta por 480 trabajadores, llevaba mes y medio secundando paros en protesta por el bloqueo del convenio colectivo
02 Jan 2024. Actualizado a las 16:05 h.
La dirección de Orovalle, empresa que extrae oro, plata y cobre en Belmonte de Miranda y Salas, ha aceptado retirar los expedientes disciplinarios iniciados el pasado viernes contra siete trabajadores, con el compromiso de la parte social de suspender la huelga los próximos dos días.
Según ha informado la dirección de la compañía, el acuerdo se ha alcanzado este martes en una reunión en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec).
La plantilla de Orovalle, compuesta por 480 trabajadores, lleva mes y medio secundando paros en protesta por el bloqueo del convenio colectivo.
El acuerdo alcanzado hoy supone la suspensión de la huelga mañana, miércoles, y el jueves, dos jornadas en las que se retomarán las negociaciones sobre el nuevo convenio.
En la última reunión, la dirección ofreció un incremento salarial del 4 por ciento para este año y del tres en 2024 y 2025 más un plus consolidable vinculado a la evolución del IPC, tiempos efectivos de trabajo y resultados de la compañía, además de una reducción paulatina de la jornada anual, hasta situar la jornada del personal que realiza funciones en interior de mina en 1.568 horas en 2025, y la del personal de exterior en 1.768 horas.
Por su parte, el comité de empresa está en contra de que se les elimine el plus de asistencia y se intente penalizar a los empleados que no fichen, incluso si están de baja o de permiso, y se opone a que la subida salarial anual esté ligada al nivel de absentismo y de productividad.
Los sindicatos han advertido en varias ocasiones que la plantilla está dispuesta a mantener las movilizaciones hasta que la dirección se abriera a negociar, mientras la compañía empezó la semana pasada a paralizar la actividad extractiva en la mina que explota en Belmonte de Miranda al considerar que mantener el proceso productivo resulta imposible «sin poner en grave riesgo las instalaciones y especialmente y de manera principal a las personas», informa Efe.