Pablo de Soto, coautor de «Asturias, refugio climático»: «Es un momento crucial para configurar el futuro de la región»
Asturias
El director de LABoral Centro de Arte es coautor, junto a Nadia Penella, del documental «Asturias, refugio climático», una obra que busca generar diálogo en torno al reciente «redescubrimiento» del Principado como escape frente al aumento de las temperaturas y las consecuencias económicas, turísticas, sociales y medioambientales que eso puede tener
23 Dec 2023. Actualizado a las 05:00 h.
Un documental dirigido por Pablo de Soto y Nadia Penella titulado «Asturias, refugio climático» se acaba de estrenar hace apenas un par de meses. Busca generar diálogo y poner sobre la mesa el debate en torno al reciente «redescubrimiento» del Principado como escape frente al aumento de las temperaturas y las consecuencias económicas, turísticas, sociales y medioambientales que eso puede tener a medio y largo plazo para una región de apenas un millón de habitantes, cuyo modelo turístico, hasta ahora, no estaba acostumbrado a la masificación.
La pieza, estrenada en la pasada edición del Festival Internacional de Cine de Gijón, surge a partir de la muestra colectiva «Motores del clima», estrenada en octubre y que podrá disfrutarse hasta mayo de 2024 en LABoral Centro de Arte. Se trata de una exposición internacional comisariada por Daphne Dragona y Jussi Parikka, que explora las poéticas, políticas y tecnologías del medio ambiente y que se encuentra incluida en el programa cultural de la Presidencia Española de la Unión Europea.
Se acompaña del Taller de Investigación: Asturias, de Paraíso Natural a Refugio Climático y de la publicación «Words of Weather: A Glossary» que mapea términos para una ecología política de la experiencia que ahora se publica por primera vez en español.
En efecto, el posicionamiento de Asturias como refugio climático ha surgido recientemente en el debate público como un nuevo paradigma turístico que sucede, en cierta medida, al de «paraíso natural». El concepto se refiere a una región que, en comparación con otras, experimenta condiciones climáticas más favorables y menos extremas en el contexto del cambio climático global. En este escenario aún lleno de incertidumbres, un grupo de expertos y estudiantes de diversos perfiles (geografía, biología, turismo, arquitectura, arte, filosofía, sociología, comercio y marketing) comparten en esta obra sus pensamientos tras un evocador viaje por Asturias.
Pablo de Soto, director de LABoral Centro de Arte, y coautor del documental junto a Nadia Penella explica que la semilla de «hacer un documental sobre el cambio climático» surgió a partir de la muestra colectiva «Motores del clima», organizada a partir de «una gran sala con 125 metros cuadrados dedicados el cambio climático».
El director de LABoral Centro de Arte explica que en el centro disponen de «varios varios mecanismos y actividades que interaccionan con la ciudadanía». «En este caso quisimos interaccionar con expertos en muchas disciplinas», añade y señala que la idea era juntar a «figuras académicas y también de movimientos sociales» en una conversación en torno a un fenómeno nuevo para Asturias.
Pablo de Soto resalta que «el debate en torno al cambio climático es necesario» y es necesario «dar una respuesta de la sociedad en su conjunto, por parte de las políticas públicas, de los expertos, del ámbito académico, movimientos vecinales, ciudadanía y de las empresas».
En este sentido, una de las claves de «Asturias, refugio climático» es que no trata de pontificar o dirigir la opinión del espectador hacia una u otra posición, sino tratar de averiguar «hacia dónde va a Asturias en relación a los modelos de turismo sostenible, por ejemplo». El codirector del documental considera que estamos ante «un momento crucial para configurar el futuro de Asturias», por lo que se hace imprescindible «dar a voz a aquellos jóvenes que se están formando».
En este sentido resalta que «hay una parte del documental que es muy bonita, que es cuando cinco estudiantes de Geografía, cinco de Turismo y cinco de Biología debaten sobre ese concepto climático y sobre cuáles son las oportunidades y las amenazas». De Soto destaca que esta obra «se puede ver en la exposición, pero también queremos ir más allá de los muros del centro».
A su juicio, «la voluntad del documental no es dar soluciones», sino que «cada persona que habla en el documental exprese su propia perspectiva». «Vimos que podíamos ser útiles en ese sentido y por eso creamos este escenario de múltiples voces», concluye.