La Universidad de Oviedo, sobre la violencia de género entre jóvenes: «Las chicas son más conscientes que los chicos»

La profesora del Departamento de Ciencias de la Educación en el área didáctica y organización escolar de la Universidad de Oviedo, Soraya Calvo, ha señalado la necesidad de potenciar otras formas de «masculinidad» y concienciar sobre la igualdad entre los hombres jóvenes como una de las claves para combatir la violencia contra las mujeres. Así lo ha indicado antes de la celebración de la mesa de diálogo «Investigación y compromiso de la Universidad de Oviedo contra la violencia de género», presentada por el rector, Ignacio Villaverde, con ocasión del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, que se celebra el sábado 25 de diciembre.

Para Soraya Calvo, un objetivo prioritario es educar para conseguir identificar situaciones de malos tratos para poder cortarlas o pedir ayuda si fueran necesario. Afirma que en las últimas dos décadas se ha avanzado en igualdad entre los jóvenes y las jóvenes aunque ha calado más en las chicas que en los chicos. «Las chicas son más conscientes de las situaciones que son violencia de género y los chicos no, y cuando hablamos de una sociedad en la que una buena parte de las relaciones son heterosexuales, entre chicos y chicas hay un conflicto de comunicación que tenemos que abordar», apunta, abogando por dar formación a los chicos y «otras ideas de masculinidad y otras formas de relacionarse».

Asimismo, la directora del Área de Igualdad de la Universidad de Oviedo, Paz Menéndez Sebastián, se ha referido a la actividad desarrollada por el departamento para tratar de conseguir, por vías distintas, la igualdad real y efectiva entre la comunidad de la universidad. Entre otras medidas, ha señalado el Plan de Igualdad y políticas de conciliación, así como el protocolo de prevención del acoso ofreciendo un acompañamiento de las víctimas, también desde la perspectiva legal y psicológica.

En concreto, el Área de Igualdad ha detectado una media anual de cinco casos de acoso sexual entre el alumnado, que se han resuelto «en fase de mediación, evitando que la cosa fuese a más y que por tanto se provocasen daños mayores». Además, este servicio atiende algún caso de personas que ejercitan sus derechos como víctimas de violencia de género entre el personal de la universidad. Incide su responsable en que puede haber casos que quedan «en la sombra» a los que no se consigue llegar porque se desconoce su existencia. Por ello, desde el Área de Igualdad están haciendo un esfuerzo para dar a conocer este servicio de ayuda entre la comunidad universitaria.

Una de las perspectivas que se ha analizado en la sesión es la especial vulnerabilidad de las mujeres con discapacidad. A ellas se ha referido Ángeles Salcedo Rodríguez, profesora de la Facultad de Psicología, remarcado que se trata de uno de los colectivos «más invisibilizados» pese a que la violencia cruza «toda su vida». Así, ha reivindicado mayor compromiso social e institucional para avanzar en la atención a sus necesidades apostando por mejorar la educación y los protocolos. «El porcentaje de mujeres con discapacidad víctimas de violencia de género son casi 10 puntos porcentuales más que el de mujeres sin discapacidad», ha indicado, añadiendo que «la tasa de denuncias es bajísima» y cuando llegan a las distintas instituciones «en muchos casos son revictimizadas porque, en muchas ocasiones, no se las cree».

En la sesión también han participado Andrea Llano Suárez, Área de Ciencias de la Salud; Javier Fernández Teruelo, Área de Derecho Penal; Yolanda Fontanil, Área de Psicología; Ángeles Alcedo Rodríguez, Área de Psicología; Melissa Cicchetti, Área de Filología; Rosa Cid López, Área de Historia Antigua; y Sonia Villa Sierio, Área de Derecho Penal, informa Europa Press.