Montero ve a Feijoo preocupado por la «amenaza para su supervivencia» de otros presidentes del PP

La ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, ha asegurado este jueves que el líder del PP, Alberto Núñéz Feijóo, está más preocupado por la crisis interna de su partido y la «amenaza para su supervivencia» que suponen algunos de sus dirigentes autonómicos que por definir un modelo territorial para España que incluya «un encaje» para Cataluña.

En declaraciones a los periodistas antes de clausurar la 23ª Escuela Internacional de Verano Manuel Fernández 'Lito' de UGT-Asturias, Montero, que ha asegurado no ser constitucionalista para juzgar si dentro de la Carta Magna cabe una amnistía para los procesados por la intentona independentista en Cataluña -«ese debate corresponde a los expertos», ha dicho-, ha subrayado que los «bandazos» de Feijóo en esta materia constatan su «falta de rumbo» y su «miedo a la crítica interna».

A su juicio, un PP «que está a punto de eclosionar» concurrió a las últimas elecciones generales «con una hoja en blanco» sobre el modelo territorial de España lo que constata, ha apuntado, «la falta de proyecto de un partido que se presentó con el único lema de derogar al sanchismo» y con el horizonte de un gobierno de coalición con Vox «al que la ciudadanía ha dicho no».

«Al señor Guerra le tengo cariño y respeto», ha respondido la titular de Hacienda sobre las críticas del ex vicepresidente del Gobierno al proceso de negociación de la investidura de Pedro Sánchez para obtener los imprescindibles votos de JxCAT, a la vez que ha garantizado que esas conversaciones se llevarán a cabo «con discreción» y sin salirse del marco de la Constitución.

Para Montero, el objetivo del PSOE es lograr «una convivencia fluida» en España y, para ello, «el instrumento es el diálogo» entre quienes piensan distinto como ya se hizo en la anterior legislatura, lo que posibilitó que la situación en Cataluña mejorara respecto a la existente en 2017.

El calendario político obliga ahora a afrontarse «una investidura falsa», la de Núñez Feijóo, que supondrá «una pérdida de tiempo para un país que no puede perder ni un segundo» pese a la actitud del líder del PP de «negarse» a asumir los resultados electorales y, mientras tanto, el PSOE seguirá trabajando «con discreción» para conformar un Gobierno progresista para la próxima legislatura.

Por otra parte, la ministra de Hacienda en funciones ha mostrado su «respeto» por la decisión de la ex presidenta del Congreso, Meritxell Batet, de renunciar a su acta de diputado y ha asegurado que, como amiga suya, está segura de que su abandono de la primera línea de la política responde «de forma exclusiva a razones personales»; informó EFE.

Financiación autonómica con amplio consenso

Montero, ha señalado que la aplazada reforma de la financiación autonómica será una prioridad para el próximo Gobierno en caso de que el PSOE siga en el poder y ha abogado por sacar adelante con el mayor consenso parlamentario posible en el Congreso de los Diputados.

«Es una ley orgánica y al final los que votan son los partidos», ha recordado Montero tras lamentar que en la pasada legislatura no fuera posible conseguir que cada territorio abandonase su «legítima» posición de máximos para afrontar una negociación en la que es necesario «que todo el mundo gane».

A su juicio, ante ese proceso negociador la pregunta es «qué modelo defiende el PP» dado que sus presidentes autonómicos «dicen una cosa y la contraria» y sería necesario conocer la opinión de ese partido «más allá» de lo que digan sus líderes territoriales, más aún en un momento en el que los populares gozan de un amplio poder autonómico ante un PSOE que solo gobierna tres comunidades.

No obstante, ha incidido en que esas futuras negociaciones «serán transparentes y estarán abiertas al criterio de todo el mundo» y en que el PSOE será en ese proceso «el garante de la igualdad entre todos los ciudadanos y todos los territorios». «De ahí nunca nos vamos a mover», ha subrayado.