Crece el riesgo de adicción a internet en los jóvenes asturianos y baja el consumo de alcohol y tabaco
Asturias
Uno de cada 10 ha tenido ansiedad y sigue creciendo el consumo experimental del cannabis
09 Feb 2023. Actualizado a las 14:44 h.
El consumo de alcohol y tabaco sigue reduciéndose entre los jóvenes asturianos, al igual que el de los ansiolíticos, mientras que aumenta el consumo experimental de cannabis, especialmente entre los chicos, y el riesgo de adicción a internet, sobre todo entre los 15 y 24 años. Éstas son algunas de las conclusiones más destacadas de la última Encuesta sobre el Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias en España que hoy ha dado a conocer la directora general de Salud Pública, Lidia Clara Rodríguez, y Antón González, técnico de Salud Pública.
Según Rodríguez, hay una disminución del consumo de alcohol y tabaco entre los jóvenes de 15 a 24 años respecto a generaciones nacidas antes del año 2000 porque perciben que son perjudiciales para la salud y porque, según ha añadido González, han tenido efecto las campañas de sensibilización.
Menos tabaco y alcohol
El consumo de alcohol se inicia en Asturias a los 16,1 años -esta encuesta no tiene en cuenta a los menores de 15 años- y nueve de cada diez jóvenes de entre 15 34 años lo han probado alguna vez en su vida, mientras que casi siete de cada diez reconocieron haberlo hecho en el último mes antes de la encuesta.
El 22,5 por ciento de los chicos de esa franja reconoce también haberse emborrachado en el último año, 13 puntos por debajo de la media nacional, mientras que entre las mujeres lo hicieron un 22 por ciento, dos puntos inferior al conjunto nacional lo que, según González refleja que hay un cambio hacia un menor consumo.
Según este estudio, unas 48.800 personas están haciendo en Asturias un consumo de alcohol de riesgo, más entre las mujeres (27.800), que entre los hombres. El inicio en el tabaco también se mantiene en torno a los 16 años, si bien su el consumo diario sigue la línea descendente desde hace cinco o seis años con lo que ahora hay un 12 por ciento menos de fumadores habituales en el conjunto de la población.
Ansiolíticos y drogas ilegales
No obstante, siete de cada diez jóvenes lo ha probado alguna vez, aunque el porcentaje baja hasta el 33,1 por ciento entre los que lo hacen a diario. En cuanto a los psicosedantes (ansiolíticos) su consumo es entre dos y tres veces más elevado en el caso de las mujeres, aunque en contra de la tendencia que se observa a nivel nacional, se ha producido un descenso y se ha registrado la prevalencia más baja de la última década, al hacerlo un 10,7 por ciento de la población objeto de la encuesta.
El uso de analgésicos opioides también se ha reducido respecto a la encuesta de hace dos años, tanto el de carácter experimental, como el esporádico y habitual, mientras que el de carácter experimental del cannabis -sigue siendo la droga ilegal más habitual- no ha dejado de aumentar, especialmente entre los hombres más jóvenes.
Hay muchos que la prueban y que no la continúan consumiendo a lo largo de su vida, según González, que ha señalado que se mantienen los niveles más o menos estables entre los consumidores habituales respecto a 2020.
En el caso de la cocaína, la muestra señala que su consumo es básicamente experimental y preferentemente entre los hombres y entre los grupos de más de 35 años, aunque el 8,6 por ciento de los menores de esa edad reconocen haberla probado y un 0,4 por ciento haberlo hecho en el último mes.
Sobre las anfetaminas, González ha señalado que suelen ser consumidas de forma experimental por porcentajes muy bajos de la población, por lo que no se puede hablar de que los jóvenes estén tomando continuamente pastillas porque es una imagen «que no obedece a la realidad».
Uso compulsivo de internet
En cuanto al uso compulsivo de internet, unas 8.400 personas se encuentran en situación de adicción potencial, de las que 4.457 son hombres. La adicción en este caso es mayor entre la población de 15 a 24 años, franja en la que se multiplica por dos el riesgo respecto a los de 25-34 años, según ha señalado González, que ha reconocido que aún están por ver las consecuencias del uso compulsivo de internet y que desconoce si el aumento de esta adicción puede estar relacionada a su vez con la bajada del consumo de tabaco y alcohol entre los jóvenes.
Salud mental y suicidio
La encuesta refleja también que el 17 por ciento de la población asturiana, unas 109.255 personas ha sido diagnosticada en algún momento de su vida de ludopatía, depresión, ansiedad, insomnio o adicción a drogas, patologías que sufren tres veces más las mujeres que los hombres, y el doble entre quienes cuentan con más de 35 años.
Una de cada diez personas ha tenido ansiedad, el 7,6 por ciento depresión y el 6,1 adicción a drogas y ludopatías, con una prevalencia mayor siempre entre mujeres.
El suicidio también ha sido objeto de análisis por primera vez en esta encuesta, en la que el 1,2 por ciento de la población objeto de estudio 7.700 personas, ha tenido en los últimos doce meses ideas suicidas, en su mayor parte mujeres (5.500) por lo que, según González, «ser mujer aumenta el riesgo», informa Efe.