Estos son los tiempos de viaje del AVE entre Asturias y Madrid
Asturias
La secretaria de Estado de Transportes asegura que en el catálogo de servicios de la nueva línea de alta velocidad «habrá multitud» de frecuencias. «A nadie se nos ocurre dejar los trenes tirados en Pola de Lena», deja claro
24 Jan 2023. Actualizado a las 17:55 h.
Tres horas entre Madrid y Oviedo y entre 20 y 25 minutos más hasta Gijón. Ese es el tiempo de viajes, sin paradas, con el que abrirá la línea de la alta velocidad entre Asturias y Madrid sin paradas. La secretaria de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Isabel Pardo de Vera, explicó esta mañana que ese es un primer hito en la próxima puesta en servicio de la variante de Pajares y que, en los servicios que no sean directos, los tiempos de viaje dependerán del número de paradas que se establezcan en el catálogo de servicios de esta nueva línea de alta velocidad, que abarcará todas las frecuencias posibles.
«En función de la paradas, habrá servicios más rápidos que serán más directos y los habrá que tengan que ir cohesionando la línea en orden a lo que se ha diseñado», indicó, añadiendo en este sentido que «habrá multitud de servicios y aún más cuando dispongamos de los trenes Avril». Una vez que se disponga de estos trenes, de rodadura desplazable y que alcanzan los 330 kilómetros por hora, se arañarán minutos en el trazado entre Madrid-Palencia-Valladolid-León y ése será el segundo hito de la línea de alta velocidad a Asturias, que aparte de los servicios directos podrá tener también trenes con parada en León o por ejemplo en otras capitales de provincia.
«A 300 kilómetros por hora supondrán una reducción de minutos que permitirán neutralizar las paradas si no son muchísimas, pero como se supone que hemos hecho esta infraestructura para llenarla y dotarla de servicios tiene una capacidad suficiente, si hay trenes, para dar servicio al largo recorrido y a las exigencias de unos determinados viajeros y a las de otros que hay que ir acogiendo aunque la demanda sea menor», señaló Pardo de Vera, que recordó que la línea de Asturias está diseñada para mercancías y viajeros por lo que tiene una velocidad máxima de entre 225 y 250 kilómetros por hora que se verá compensada con los 300 kilómetros del trazado entre Madrid y León, que ya se está realizando en algo menos de dos horas. «Todo cabe en esta red que tiene una capacidad infinita con el RTMS», indicó la secretaria de Estado de Transportes.
También recordó que las dos horas y media en que supuestamente iba a quedar el trayecto entre Asturias y Madrid son tiempos de viaje que fueron apuntados en su momento por el exministro de Fomento Francisco Álvarez-Cascos, «cuando planteaba diseñar unas variantes entre Pola de Lena y Oviedo y Gijón que ni siquiera estaban diseñadas -el propio PP dejó caducar las declaraciones de impacto ambiental- y que en todo caso suponían un ahorro de tres o cuatro minutos y destrozar el territorio asturiano». Aparte de la cuantiosa inversión que supondría esa obra para apenas cuatro minutos de ahorro.
«Nuestra prioridad tras la puesta en servicio de la línea será que entren los nuevos trenes y, hasta entonces, son tres horas de viaje entre Madrid y Oviedo, tres horas y 20 minutos a Gijón, y con paradas un poco más dependiendo de qué paradas, que se especificarán en cuanto esté el nuevo catálogo de servicios», reiteró Pardo de Vera, que explicó que ese catálogo de frecuencias se verá ampliado en cuanto estén disponibles los Avril, que ya están fabricados y pendientes de ser homologados. También se ampliarán las frecuencias con la liberalización ferroviaria, con operadoras privadas que ya han mostrado interés en el trazado hasta Asturias.
Trazado de Pola de Lena a Gijón
En cuanto a las obras de modernización el trazado entre Pola de Lena y Gijón, explicó que no hay nada licitado y por tanto ninguna decisión tomada sobre cómo se abordarán las obras, con el objetivo puesto en 2030. «Son estudios que llevamos haciendo desde 2016 que requieren de cuatro proyectos coordinados que han de empezar la vez y claramente hay que hacer un acopio de materiales para que no haya ninguna ineficiencia ni se causen más impactos negativos de los que se tienen que causar», indicó al respecto, explicando también que ese acopio de materiales se prolongará durante 18 meses «para tenerlo todo y que los tiempos sean los mínimos». También dejó claro que no se plantea cortar la línea durante los fines de semana y que, en cuanto a cómo se abordará la planificación de esas obras, todo va a depender del abanico técnico de posibilidades y de lo que se acuerde con el Gobierno asturiano. «Los trenes van desde Madrid a Oviedo y a Gijón y no se nos ocurre a nadie dejarlos tirados en Pola de Lena y cuantos más trenes se incorporen más servicios habrá», insistió.
También recordó que la rampa de Pajares, en cuanto entre en servicio la variante, quedará invalidada para la circulación dado que precisaría de una inversión de 1.200 millones de euros para su adecuación que no garantizará su competitividad dado que seguirá sin poder acoger a convoyes de 700 metros, pero sí se están analizando las posibilidades de dar servicio a los pueblos que se quedan fuera de la red ferroviaria.