El temporal de frío remite tras dejar ríos al límite, carreteras cortadas y colegios cerrados

La borrasca Fien dejaba ayer mucho frío, abundantes nevadas y precipitaciones generalizadas en toda Asturias, que ha visto cómo el caudal de sus ríos ha aumentado hasta niveles próximos a su desbordamiento, vías cortadas o condicionadas por la nieve, clases suspendidas en seis concejos y una flota pesquera amarrada a puerto por un temporal que ha dejado olas de hasta seis metros. Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para este jueves apuntan a un «aumento notable» de las temperaturas, aunque la comunidad seguirá en alerta por acumulación de nieve, fenómenos costeros y precipitaciones acumuladas en 12 horas.

Hoy el temporal mantendrá a prácticamente toda la comunidad, salvo el litoral, en aviso naranja por el riesgo de nevadas de hasta 20 centímetros, y de cinco centímetros en cotas de entre 300 y 500 metros, así como olas de hasta seis metros en toda la costa.

La masa de aire ártico que se empezó a notarse el lunes, y que desde el martes afecta de lleno a buena parte de la península, obligaba este miércoles a cortar de forma intermitente el tránsito de camiones por la autopista AP-66, la principal vía de comunicación entre Asturias y La Meseta y en la que la circulación de camiones y vehículos articulados quedaba restringida durante horas y en distintos momentos de la jornada, a la vez que se recomendaba a los turismos no circular a más de 100 kilómetros por hora.

La otra gran vía de comunicación entre Asturias y el centro peninsular, la N-634, también sufría restricciones ya que el puerto de Pajares permaneció todo el día cerrado para el tráfico pesado, mientras que los turismos pudieron circular con cadenas, una situación que se repitió en otros 25 puertos de montaña de la red autonómica y en muchos tramos de carretera de montaña.

Los puertos de San Ignacio, en Ponga, y el de Tarna, en Caso, fueron los que más han sufrido las inclemencias del tiempo y permanecieron cerrados durante buena parte del día por la acumulación de nieve y el riesgo de aludes, peligro que ha impedido también el tráfico entre Ujo y el puerto de San Isidro; entre Tielve y Sotres; de Riaño al puerto de Tarna, en el concejo de Caso: y entre Trubia y el puerto de Ventana.

Riesgo de aludes

El riesgo de aludes no sólo afectó a estas carreteras y la Agencia Estatal de Meteorología también lanzó un aviso de riesgo importante de aludes en Picos de Europa, donde la nieve alcanzó espesores de entre uno y dos metros en cotas superiores a los 500 metros, que además se están viendo alterados por los fuertes vientos que azotan la zona. El acceso a Los Lagos de Covadonga y la circulación entre Tuiza y el puerto de La Cubilla también permanecieron cerrados por la acumulación de nieve, que dejó estampas como el monte Naranco cubierto por un manto blanco, visible desde la capital asturiana.

La nieve no sólo condicionó las comunicaciones por carretera en una gran parte del territorio, también ha obligado a suspender las clases en colegios de seis concejos -Ibias, Degaña, Aller, Ponga, Cangas del Narcea y Caso- y alteró las rutas de los autobuses que cubren zonas de montaña, por lo que muchos alumnos tampoco pudieron asistir a sus clases.

Efectos del deshielo en los ríos

El primer gran temporal de invierno, que dejado granizadas en el litoral y puntos bajos de la rasa costera, y en puntos del interior, como Oviedo, también deja importantes precipitaciones en todo el territorio asturiano, donde los ríos han visto cómo aumentaban su caudal hora tras hora. Los puntos más críticos se localizaron ayer en el río Navia, a su paso por Villayón, y en el Narcea, con un caudal preocupante en el puente de acceso a la pesa de La Barca (Belmonte de Miranda), en Requejo (Salas) y en Quinzanas (Pravia). No llegaron a desbordarse, pero habrá que esperar a ver qué ocurre a lo largo del día de hoy.

En este sentido, la consejera de Presidencia, Rita Camblor, mostraba ayer su preocupación por el hecho de que pueda darse una crecida aún mayor como consecuencia de un rápido deshielo favorecido por ese «aumento notable» de las temperaturas que prevé la Aemet. En esta cuarta jornada del temporal, las previsiones apuntan a que se mantendrán las lluvias persistentes en todo el Principado, con una cota de nieve que aumentará a lo largo del día desde los 600 a los 1.600 metros altitud y que se verá influenciada también por un viento fuerte de componente oeste y suroste, con rachas muy fuertes en el litoral, informa Efe.

El viernes subirán también notablemente las temperaturas en casi todo el país, especialmente las nocturnas, en las que el ascenso puede ser de hasta 8 grados con respecto al jueves, con heladas acotadas a zonas montañosas. Ayer la lluvia caía de forma persistente en toda la comunidad, con acumulaciones de más de 30 litros por metro cuadrado en Salas y Pajares, y de más de 20 en Oviedo, Mieres y Lena, que se suman a las abundantes precipitaciones que ya se registraron el lunes y el martes. Las mínimas han bajado por debajo de los 5 grados en Pajares y Leitariegos, y han rondado los 4 negativos en Degaña y por debajo de cero en Ibias y Aller, mientras que las máximas no han superado los 10 grados, salvo en Castropol. Hoy las temperaturas mínimas no registrarán cambios o irán en ligero ascenso, con heladas débiles en la cordillera, mientras las máximas subirán de manera notable.