Casi la mitad de los médicos de familia en Asturias se jubilan en 5 años

Un manifestación multitudinaria, la más concurrida de los últimos años (marcados por las restricciones de la pandemia) llenó las calles de Madrid en defensa de la sanidad pública y en concreto por las carencias de Atención Primaria. El debate en la capital es muy encendido con el Ejecutivo regional señalando directamente a los sanitarios. Y pese a todo, los problemas de la Atención Primaria, el primer escalón del sistema sanitario público, aún en distinto grado son compartidos en la generalidad de las comunidades autónomas, también en Asturias. Los profesionales se quejan de una carga de trabajo, que redunda en falta de tiempo para prestar la atención debida a los pacientes, falta de prestigio en la medicina de familia (con los más jóvenes huyendo a otras especialidades) y falta de relevo generacional suficiente: en cinco años el 40% de los médicos de familia de Asturias se habrán jubilado «y no hay relevo» dice Javier Alberdi, anterior responsable del Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA).

El médico asegura que la situación de la Atención Primaria en Asturias es muy mala «incluso peor que Madrid», con muchos problemas cuya solución se ha postergados y que pueden derivar en el medio plazo en «movilizaciones que también llegarán aquí». La Atención Primaria sufrió en la pandemia no un test de estrés sino un crudo palizón y más en una comunidad tan envejecida como Asturias. A los problemas para la población general para adaptarse a citas telefónicas se unieron acumulación de listas de espera, y retrasos varios. En los últimos años los conflictos, incluso con crudos cruces de acusaciones entre colectivos sanitarios, especialmente entre médicos y enfermeros, se han repetido para el ajuste del reparto de trabajos en los ambulatorios.

«No hay gente para cubrir los puntos de atención continuada, hay puntos que se están quedando sin médicos, sólo cubiertos por enfermería, o sin médico ni enfermeras y terminan cerrándolos porque no hay capacidad para asumir la carga asistencial», asegura Alberdi.

La falta de médicos es un problema generalizado en todo el país, hasta el punto de que ha llegado a debatirse (esta propuesta se llevó de forma reciente al parlamento asturiano) aceptar a médicos procedentes de hispanoamérica. Pero el problema es el MIR. Y también, recalcan los profesionales, que los jóvenes que hacen la residencia en medicina de familia huyen despavoridos «piensa en repetir el MIR para hacer otra posibilidad o marcharse al extranjero donde la consideración y la retribución es mucho mejor».

La Consejería de Salud de Asturias reconoce que hay un problema acumulado de falta de médicos y pone el foco en los recortes de 2012. Aseguran con en los últimos años se tratado de corregir ese rumbo y que desde 2018 se ha aumento la oferta a 62 médicos de familia. Alberdi asegura que una docena de plazas se quedaron sin cubrir «la mitad de la plantilla es mayor de 55 años y a médicos y enfermeras se les está denegando la exención de guardias, porque no hay gente».

¿Peor que en Madrid?

Y pese a todo, en Salud defienden que es incomparable de la situación de Asturias con la Comunidad de Madrid, allí ha habido un enconado desencuentro con médicos que en los centros de atención continuada ha derivado, en casos puntuales, en agresiones. En Madrid los centros se cerraron en la pandemia y se han reabierto en ocasiones sin profesionales (en Asturias se reordenaron en el doble circuito, arguye Salud, para evitar la coincidencia de pacientes con covid). Pero la consejería sobre todo se defiende con números, primero con un dato no por repetido menos constatado: Asturias es la comunidad del régimen general (excluyendo a las forales de Navarra y País Vasco) que más invierte en salud por habitante.

Los números varían en función del año que se tome como referencia en la estadística pero en la comparación entre ambas comunidades el Principado está a la cabeza en inversión: más de 1.900 euros por habitante frente a los 1.300 euros por madrileño de la capital, según las cifras de este 2022.

La estadística europea (el cálculo de Eurostat va de 2015 a 2019) pone a Asturias a la cabeza del país en camas por habitante.

El ratio de médicos es de 9,1 por 10.000 habitantes en Asturias, en Madrid es de 7,2, el menor de España. Salud asegura que el despliegue de centros en el territorio también marca una diferencia: Madrid tiene 42 zonas básicas de salud por millón de habitantes, Asturias tiene casi el doble; el Principado se organiza territorialmente en ocho áreas sanitarias, subdividas en 68 zonas básicas de salud y 16 zonas especiales de salud.

La consejería destacó además que en Asturias se ha cerrado un plan de Acción en Atención Primaria, vigente has 2030 y que ha sido consensuado con todas las sociedades científicas de Atención Primaria y también con los profesionales «y con dotación presupuestaria». Entre sus propuestas está la creación de equipos multidisciplinares o potenciar la investigación.