La escuela de jóvenes artistas que se estrena en la ópera

Las salas de ensayo del teatro Campoamor trabajan a pleno rendimiento desde hace ya unos días.  Hoy, domingo 11 de septiembre, arrancará la 75.º temporada de la Ópera de Oviedo y lo hará con un estreno absoluto, «La dama del alba», una ópera «muy asturiana». Una obra compuesta por el gijonés Luis Vázquez del Fresno y dirigida por otros dos asturianos, Rubén Díez y Emilio Sagi, además de un gran elenco de artistas entre los que se encuentran cuatro jóvenes alumnos de la Escuela de Música Divertimento de Oviedo.

Los benjamines Rita García, las hermanas Irene Gutiérrez y Carla Gutiérrez y Gabriel Orrego, del Coro Divertimento (del Coro Infantil y el Coro Arsis), se transformarán hoy, de manera oficial, en Andrés y Falín después de meses de trabajo. «Hemos estado desde mayo con los ensayos. Es una obra complicada y ellos estaba acostumbrados a actuar en coro y no en solitario, así que hemos tenido que trabajar mucho en eso», explica Mercedes Menéndez, fundadora y profesora de la escuela de música.

A estas alturas ya casi nadie oculta su cansancio. «Han sido meses de mucho trabajo, pero estamos muy contentos con el esfuerzo de los chicos», cuenta Menéndez, que espera emocionada el debut de sus alumnos: «Estamos todos nerviosos, pero con muchas ganas de que se estrene y todo salga fenomenal. Llevan trabajando mucho tiempo para que todo salga bien».

Mercedes esta viviendo esta obra casi como «propia», además de sus alumnos, su hija Cristina, la encargada de ayudar y dirigir a los jóvenes intérpretes en la escuela, es la imagen del cartel promocional de la obra. «Querían que la imagen fuese alguien del sector y la pusieron a ella. Es una foto que representa muy bien la obra y está muy chula», cuenta.

Menéndez, lleva 29 años al frente de la escuela en la que ha puesto todos sus conocimientos para formar a jóvenes artistas. «En la escuela formamos a todos los niveles, desde los primeros hasta la preparación para entrar en el conservatorio. Además, a mí, me gustan mucho las agrupaciones, lo que es tocar y cantar en grupo, y es un no de mis objetivos con la escuela», explica la directora que anima a los más pequeños a probar: «Una de las agrupaciones es `Minie Winnie´, sería como la cantera musical de la escuela, donde enseñamos a los niños a cantar a una voz con o sin acompañamiento. Aquí empezarían a formarse y luego pasarían a otros coros».

Estos coros, que con la pandemia se han visto afectados, son una de las mayores alegrías de Mercedes y de la escuela. La Federación de Coros de Asturias (Fecora) les otorgó el premio Axuntábense 2019 en la categoría de entidades que trabajan por la promoción de la actividad coral, unos días antes de que estallase la pandemia. «Fue muy importante y un momento de alegría al ver reconocido el trabajo de todos estos años. Fue una pena no haber podido disfrutar esté reconocimiento por culpa de la pandemia», reconoce Mercedes que ya planea grandes cosas para este año: «El parón nos obligo a parar muchos planes que teníamos en marcha y que este año pensamos recuperar. Queremos organizar algo grande para los 30 años de la escuela y empezaremos a trabajar en ello pronto».