Cascos declara su apoyo «incondicional» a Feijoo pero el PP descarta su vuelta

La sombra de Francisco Álvarez-Cascos es alargada. Tras su expulsión de Foro, partido del que fue fundador y con el que llegó a la presidencia del Principado, parecía que el exministro de Fomento había decidido dar un paso atrás y alejarse del foco mediático. Sin embargo, una reunión en un restaurante de Castropol ha vuelto a situarlo en el centro de la actualidad política regional. La comida con Álvaro Queipo, secretario general del PP asturiano, ha disparado todo tipo de especulaciones. A ello ha contribuido la reacción de Génova, que ha dado naturalidad al encuentro y sigue sin confirmar el nombre del candidato a las próximas elecciones autonómicas del mes de mayo. Eso sí, ha descartado la vuelta del exministro al partido y ha señalado que «con el tiempo se verá» lo que puede surgir de esa reunión. Mientras tanto, Cascos ha asegurado que «no hay novedades» y ha mostrado su apoyo «incondicional» a Alberto Núñez Feijoo. Por su parte, la actual presidenta del PP regional, Teresa Mallada, que sí ha reconocido su intención de aspirar a ese puesto, guardia silencio.  

La comida entre Cascos y Queipo tuvo lugar el pasado 4 de agosto en el restaurante Casa Vicente. Las imágenes del encuentro comenzaron a circular por las redes sociales y, a partir de ahí, el silencio de una de las partes y la ambigüedad de la otra ha desatado la tormenta en la derecha asturiana. Con el paso de las horas se han ido despejando las incógnitas, aunque la dirección nacional deja la puerta abierta a lo que pueda pasar en el futuro.

El vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del PP, Pedro Rollán, ha sido el encargado de descartar la vuelta del exsecretario general del partido Francisco Álvarez. «Avalamos la reunión y lo que surja de la misma con el tiempo se verá, pero en ningún caso hablar de personalizar en la figura de Álvarez-Cascos un retorno al PP», ha indicado Rollán. En este sentido, ha recordado que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, se ha propuesto «representar a una amplia mayoría de los españoles, independientemente de su ideología», por lo que reuniones y encuentros «que tengan como objetivo aglutinar el voto al PP bienvenidos sean».

El que también ha hablado ha sido Álvarez- Cascos. Lo ha hecho en una entrevista en Radio Intereconomía. El fundador de Foro ha asegurado que en los últimos días «han salido muchas noticias pero pocas novedades» y ha recordado que «yo voy por Asturias sin capucha y me reúno en restaurantes con mis amigos», en referencia al encuentro con Queipo.

Cascos ha aseverado que «mi pensamiento no ha cambiado» y ha puesto en valor «la importancia de la suma en vez de la resta». Esa ha sido su forma de pedir que la derecha acuda unida a las urnas para disputar la presidencia del Principado al PSOE. El exministro ha tenido palabras de elogio para Feijoo, por el que ha asegurado que siente «admiración por su enorme valía». Por este motivo, ha dejado claro que «le apoyaré y ayudaré incondicionalmente para enderezar el rumbo de España».

Por su parte, Teresa Mallada, la actual presidenta del partido en Asturias, no ha hecho ningún tipo de declaración sobre el encuentro. Ella sí que ha mostrado su disposición a ser candidata, pero tendrá que esperar al congreso regional del partido, para el que todavía no hay fecha, para saber si finalmente lo será o no.

Juicio pendiente

Cascos sigue a la espera de la celebración de un juicio al haber sido acusado de apropiación indebida por los que fueran sus compañeros de Foro. Desde este partido sí que han reaccionado con contundencia al acercamiento entre el PP y Cascos. El vicesecretario de Comunicación del partido, José Suárez, ha asegurado que a Foro «le sorprende» que el PP «repesque al imputado Francisco Álvarez-Cascos» de cara a las elecciones de 2023, y ha alertado de que «en la historia reciente de Asturias, cada vez que el centroderecha tiene la oportunidad de desbancar a los socialistas y cambiar las políticas que nos hundieron y nos mantienen a la cola de España, aparece Cascos para garantizar que eso no ocurra».