Siete calas para enamorarte de Asturias

Asturias está llena de paisajes incomparables y únicos. En el principado no hace falta elegir entre mar y montaña porque ambos entornos se funden en uno solo alrededor de innumerables playas. El Principado alberga arenales de ensueño, llenos de belleza y de paisajes fascinantes.

Cala Cordial

Entre el playón de Bayas y la playa de Munielles, a los pies del aeropuerto de Asturias, escondida y recóndita aparece la Playa de El Reguero o Cala Cordial, un lugar tranquilo, muy poco concurrido y con una gran belleza paisajística.

De difícil acceso a través del pueblo de Bayas o de la playa de Munielles, es uno de los arenales más especiales del concejo de Castrillón, un remanso de tranquilidad cerca de un centro veraniego como es Santa María del Mar. Es una cala frecuentada por nudistas.

Cala la Huelga

A lo largo de los últimos metros de la desembocadura del río Cecilio, se extiende un conjunto arenoso, que tiene incluso marismas y que está salpicado de rocas. Se trata de la playa de la Huelga, formada por bolos, roca y arena y un oleaje moderado. Está ubicada muy cerca de Hontoria y de Villahormes. A este arenal se puede acceder en coche, hasta un pequeño aparcamiento habilitado en la zona. En sus inmediaciones, se practica habitualmente diferentes modalidades de pesca deportiva

En las proximidades de la playa, en concreto en Villahormes, se puede ver un islote conocido como «Castro de las Gaviotas», peculiar por su forma de arco que parece que flota sobre el Cantábrico. En las inmediaciones, se practican habitualmente diferentes modalidades de pesca deportiva.

Playa El Picón

La playa de Picón, es una cala situada en el oriente del Principado de Asturias (España), en el concejo de Llanes. Es una cala natural de gran belleza, con forma de canal caprichosa, que en bajamar impide ver el mar desde el fondo de la arena. Buelna es una playa que pasa de 50 a 1.000 metros en función de las mareas y que está formada por arena blanca y fina y rocas. Una de las más famosas es un pináculo calcáreo denominado El Picón. A esta cala se le atribuyen poderes mágicos sobre la fertilidad y la reproducción.

Cala Salencia

La playa de Salencia o Saliencia es una pequeña cala ubicada en Novellana que forma parte del Paisaje Protegido de la Costa Occidental Asturiana. Es una cala salvaje y poco transitada a la que puedes acceder con perros durante todo el año. Para acceder a la playa de Salencia hay un camino amplio y asfaltado desde el pueblo de Novellana, donde se recomienda dejar el coche. Si te gusta disfrutar de la tranquilidad en un día de playa, ésta es una opción muy recomendable.

Playa de Guadamía

Guadamía es un ejemplo de paisaje kárstico modelado por el agua. Es una cala alargada, excavada en la roca por el mar y que tiene en las cuevas de las paredes acantiladas el mejor ejemplo de su porosidad. La salida al mar apenas es visible desde la arena. En pleamar, adopta la forma de una enorme piscina natural. Su gran interés paisajístico se suma a su sencillo acceso desde Llames de Pría.

Cala El Regolguero

A la derecha de la playa de Mendía, en la ensenada de Regolguero, se encuentra también una pequeña cala de piedra y pequeño arenal (que se puede contemplar con bajamar), con un acceso bastante difícil y empinado conocido como el Regolgueru, no hay que confundirlo con la playa, al que se puede llegar por el camino que lleva al mirador de El Picu, todo en la localidad de Pimiango, del concejo de Ribadedeva.

Playa de la Canal

En el concejo de Cudillero esta peculiar cala. Si sube la marea, la playa desaparece por completo y se convierte en una enorme piscina. Se trata de una lengua de arena de 25 metros de largo encastrada a los pies de un estrecho cañón. No cuenta con servicios y puedes acceder a ella a pie por un camino que parte de Villanueva de Pría.

Playa de Poo

Esta cala de Llanes es igual de bonita que de curiosa. Aquí arena y mar apenas se tocan. Rodeadas de verdes praderas, sus aguas están resguardadas entre acantilados. Desde la playa se puede divisar el famoso islote de castro de Poo. Se trata de una peculiar formación rocosa con forma de barco hundido y todo un símbolo de una de las playas más bonitas de Asturias.