¿Cuánto bajará el precio del billete del AVE de Asturias si hay otros operadores?

La experiencia española en el mercado liberalizado de alta velocidad es breve y por el momento se limita a un solo competidor de Renfe —Ouigo, filial de bajo coste de la operadora pública francesa SNCF— en el corredor Madrid-Barcelona. Esta compañía espera competir pronto en Madrid-Valencia-Alicante y, más adelante, en las conexiones andaluzas. Iryo, la marca comercial de la hispano-italiana Ilsa, espera a que se homologuen sus trenes Flecha Roja para comenzar a operar en noviembre.

El ADIF prepara ahora la segunda fase de la liberalización, en la que se incluirán corredores de alta velocidad como el que llegará a Asturias. Ahora podrían entrar otros operadores que se quedaron fuera en la primera tanda, como Alsa Rail (la división ferroviaria de la multinacional de origen asturiano), Motion Rail (la operadora de Talgo) y Ecorail (empresa andaluza), entre otros. Uno de los objetivos de la liberalización es tener un retorno económico tras la inversión de 55.000 millones en la red de alta velocidad más extensa de Europa. Los operadores no compiten en régimen concesional, sino bajo riesgo y ventura. Es decir, no habrá que rescatarlos si fracasan. En cambio, abonan cánones por el uso de la red al ADIF, que servirán para apaciguar la abultada deuda de la empresa pública. Los precios de los billetes en Asturias llevados por la competencia entre operadoras podrían caer entre un 30 y un 50%.

¿Por qué es positiva la competencia?

En esta breve experiencia de mercado libre —la liberalización comenzó el 14 de diciembre del 2020, pero el primer tren de Ouigo no empezó a circular hasta el 10 de mayo del 2021— los precios de la alta velocidad se han reducido una media de un 50 %, espoleados por la política de bajo coste de la filial española de SNCF que, a su vez, forzó a Renfe a crear su propia flota de bajo coste, los Avlo, para no quedarse atrás. En Italia, que llevan diez años de mercado libre, los billetes se redujeron un 37 %.

Como constató el lunes en el Congreso de los Diputados Helene Valenzuela, directora general de Ouigo- España, esta bajada de precios ha traído nuevos perfiles de usuarios a la alta velocidad, que hasta ahora estaba muy vinculada al viajero de negocios. Cada vez son más familias o jóvenes los que la utilizan. Otro efecto positivo es el aumento de frecuencias. Por poner un ejemplo, entre Roma y Milán, hay trenes cada seis minutos. Esto ha supuesto la práctica desaparición del modo aéreo y ha sacado a muchos viajeros de la carretera, con el consiguiente ahorro de vidas humanas. «Se ha calculado que si la alta velocidad tuviera en España una cuota por encima del 70 %, se reduciría en un 63 % la mortalidad en la carretera», aseguró Valenzuela en la Comisión de Transportes del Congreso.

¿Están los operadores interesados en Asturias?

Iryo tiene previsto operar en los corredores del norte de España a partir de 2026. Ya ha mostrado interés en la línea de Galicia y estudiará operar en la conexión con Asturias cuando esté terminada. Tras el primer viaje en pruebas por la variante de Pajares, la última fecha que se ha puesto sobre la mesa para que entre en funcionamiento es el primer trimestre del año que viene.

¿Cuál es el origen de Iryo?

Esta semana se conoció que la primera empresa ferroviaria privada estará controlada por el Estado italiano a través de la operadora pública Trenitalia. La Renfe italiana se convierte así en el accionista mayoritario de Ilsa, al vender el accionista español Air Nostrum un 25 % a Globalvia, la propietaria de la concesión de la AP-9 en Galicia. Hasta ahora Air Nostrum era mayoritaria con un 55 % del capital.