La tercera ola se acerca a Asturias: estas son las restricciones que barajan los expertos
Asturias
La región se mantiene vigilante ante un posible cambio de tendencia tras las fiestas navideñas derivado de una mayor interacción entre las personas. Acuña aconseja aplicar medidas a modo de «dique» de contención del virus «si la incidencia sube de manera considerable»
11 Jan 2021. Actualizado a las 05:00 h.
Asturias es hoy por hoy la comunidad autónoma con menor incidencia por la COVID-19 de toda España. Es más, está entre las regiones europeas con mejores cifras en el acumulado de las últimas semanas de 2020, lo que le ha supuesto ser el único territorio de la península con el semáforo establecido por la Unión Europea en ámbar. Sin embargo, los datos de los últimos días, en los que el número diario de personas contagiadas ha vuelto a estar por encima del centenar, hacen prever que la tercera ola de la pandemia que ya azota con fuerza a media docena de comunidades del país se acerca a Asturias.
«Tres o cuatro días» es el margen que da el epidemiólogo Pedro Arcos para ver si efectivamente en la región se confirma que hay un cambio de tendencia en las cifras, un cambio que vaticina el ex directivo de la OMS, Daniel López-Acuña como consecuencia de la «mayor interacción que han tenido las personas» durante las recién concluidas navidades. Así, el mismo señala que «hay que estar preparados para la idea de que, a diferencia de lo que quisiéramos ver, las cifras se van a estancar o incrementar». De ser así, el planteamiento que barajan es el de establecer «restricciones que eviten los contactos sociales», además de otras medidas que contribuyan a contener el virus.
López Acuña, exdirector de Acción Sanitaria en Situaciones de Crisis de la Organización Mundial de la Salud (OMS), considera fundamental mantener a raya los brotes y aumentar el número de pruebas PCR que se realizan diariamente «para diagnosticar y aislar a los asintomáticos positivos» y así «poner un dique» al coronavirus que evite tener que ir a restricciones drásticas o de confinamiento porque la tercera ola se dispare cuando por el momento Asturias es la comunidad en la que la COVID está ocasionando un menor problema.
Por eso mismo, el ex directivo de la OMS apuesta por «blindar Asturias» y mantener el confinamiento perimetral de la región e, incluso, establecer cierres perimetrales en las ciudades o municipios «si llega el momento en el que la incidencia sube de manera considerable». Esa incidencia la fija Acuña en los 250 casos por 100.000 habitantes, manteniendo la concordancia con el semáforo epidemiológico acordado en el consejo interterritorial de la Unión Europea. El objetivo de esos cierres, apostilla, sería «no irradiar el virus o establecer los diques necesarios para evitar su propagación», por lo que tiene claro que «hay que valorar medidas en aquellos sitios en los que la incidencia se eleve» porque «no queremos el descontrol de la segunda ola».
En un escenario así de aumento importante de los casos, plantea que habría que tomar «medidas restrictivas totales» dirigidas «a evitar las aglomeraciones en espacios cerrados», como pueden ser «aforos muy limitados en el comercio». «Hay que establecer medidas en función de la situación epidemiológica, manifiesta Daniel López Acuña, para intensificar la lucha contra el virus».
«Afortunadamente en Asturias se abatió la incidencia. Ojalá consigamos mantenerla a raya ante el efecto de las semanas anteriores», comenta el ex directivo de la OMS, que añade que la variante británica del virus «es un factor que se agrega» al riesgo de la tercera ola por el efecto de las fiestas navideñas. En este sentido, aboga por mantener las restricciones con el Reino Unido y continuar con el rastreo retrospectivo de quien haya viajado desde ese territorio.
«Tenemos que hacer un esfuerzo de contención mientras avanzamos en la vacunación», aconseja Daniel López Acuña, que pone de relieve que Asturias haya logrado vacunar a una mayor proporción de personas vulnerables hasta cubrir entre un 35 y un 40% de las personas que viven en residencias.
«Nos podemos permitir unos días más», dice Arcos
Pedro Arcos, epidemiólogo y director de la Unidad de Investigación en Emergencias y Desastres de la Universidad de Oviedo, considera que Asturias está en este momento «en unos niveles aceptables y razonables» en cuanto a incidencia de la COVID-19 y entiende que «por el momento el nivel de restricciones es el adecuado». Para ir a restricciones más drásticas señala que habría que esperar «tres o cuatro días para ver si el cambio de tendencia se confirma» y la curva asciende o se mantiene por el efecto de la Navidad.
En su opinión, si la incidencia del virus creciera nuevamente en la región quedaría «poco margen» para aplicar nuevas restricciones puesto que durante estas semanas se han mantenido limitaciones de aforo, medidas en la hostelería, el toque de queda o el cierre perimetral de la comunidad autónoma, por lo que apostilla que lo que quedaría sería «el cierre total» de hostelería y comercio. No obstante, señala que «por el momento no hay indicadores para forzar más restricciones» y lo que aconseja es «seguir la situación porque epidemiológicamente hablando nos podemos permitir unos días más». Además, Arcos apunta que en la región, en la que «es probable que pase como en el resto de sitios, las medidas funcionan bastante rápido».