Suspendida a pie de quirófano la operación de un bebé de 5 meses: «Alguien no ha hecho bien su trabajo»

«Alguien no ha hecho bien su trabajo». Con esta frase y una reclamación finaliza la historia que Luis Álvarez Alonso y su bebé de acogida de cinco meses han tenido que vivir esta mañana en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), debido a la huelga médica convocada para este martes.

Álvarez, portavoz de la Asociación de Familias de Acogida del Principado de Asturias (AFAPAS), es tutor legal de un bebé de cinco meses que padece de una hernia inguinal desde antes de cumplir el primer mes de vida. El niño tenía una operación programada para las 10.00 horas de este martes. A las 8.46 horas, esperando para entrar a quirófano, Luis Álvarez recibe la siguiente notificación del personal de cirugía pediátrica del HUCA: «La intervención queda suspendida por huelga del personal médico».

«No es una operación urgente, pero sí tienen que sedar al bebé», señala el padre de acogida, que pone el grito en el cielo por la tardanza en el aviso, «tal y como está la pandemia» y por «el riesgo gratuito que supone ir al hospital». No ha sido la única operación cancelada esta mañana, la primera fue la de un bebé de una familia de León, programada para las 8.00 horas. «Tiene tela venir desde allí para que te cancelen la operación a última hora por la huelga», clama Luis Álvarez.

Crispación de la familia por «la falta de respeto»

La crispación de Álvarez se suma a los inconvenientes por los que ha tenido que pasar el bebé, para al final no ser operado. «El lunes de la semana pasada recibimos una llamada para concertar la fecha de la operación y una prueba de covid-19, que se la hicieron el pasado domingo a las 10.30 horas en el HUCA. Además, el miércoles recibimos la llamada del anestesista y estaba todo listo». Con la operación programada para este martes, el bebé ha tenido que seguir algunos protocolos que han visto interrumpida su rutina diaria. Por ejemplo, de estar acostumbrado a comer cada cuatro horas se ha visto obligado a hacer un ayuno de ocho esta última noche, previa a la intervención, además de someterse a una PCR con tal solo cinco meses. «Es una falta de respeto», sentencia el afectado.

Con la operación ya cancelada, Álvarez ha presentado una queja formal en el hospital. «Con todas las cancelaciones, la mía era la primera. Nadie reclama. Tragamos con todo», denuncia. Ahora, la solución que le han dado es que la operación se posponga para «igual dentro de una o dos semanas», señala. No obstante, aclara que «el personal médico seguro que ha solicitado la huelga en tiempo y forma, lo que pasa que si ya saben que no van a operar, lo normal es que nos hubieran avisado. Es una negligencia administrativa»