Asturias no pedirá abrir las fronteras con Galicia y Cantabria

Asturias no pedirá abrir las fronteras con Asturias y Cantabria, las dos comunidades limítrofes que se encuentran en su misma fase de la desescalada y que, en principio, iban a plantearse reanudar la circulación el próximo 15 de junio. El Gobierno se ha apoyado en criterios de salud pública para tomar la medida. 

Asturias se había marcado esta fecha y contempló durante varias semanas un escenario de apertura de la movilidad entre comunidades del norte de la Cordillera Cantábrica pero finalmente ha dado un paso atrás. Ayer el presidente de Galicia anunció su intención de levantar el Estado de Alarma por su cuenta antes del próximo 21 de junio, mientras que Asturias había anunciado no sólo que agotaría las dos semanas previstas de la fase 3 sino que mantenía restricciones a la apertura del ocio nocturno y las discotecas además de limitar las reuniones a 15 personas y no 20 como ya permite la normativa estatal. Esta discrepancia, además de los rebrotes en otros territorios han hecho a Asturias dar marcha atrás.

El gobierno asturiano afirmó que había tomado esta decisión apoyándose fundamentalmente en criterios de salud pública. «La existencia de brotes epidémicos en el País Vasco y las decisiones adoptadas por diversos gobiernos autonómicos han llevado al Ejecutivo del Principado a modificar su previsión inicial, en la que consideraba la posibilidad de solicitar autorización para permitir los viajes con Cantabria y Galicia».

El Gobierno indicó que el presidente del Principado, Adrián Barbón, había abordado la situación actual con los presidentes de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y de Cantabria, Miguel Ángel Revilla. También ha conversado con la presidenta de Navarra, María Chivite.

En un primer momento, las comunidades cantábricas sopesaron la opción de una especie de corredor del Norte que permitiera la movilidad a lo largo de la cornisa, dado que todos los territorios han alcanzado ya la fase 3 de la desescalada, la última antes del fin del estado de alarma. Un primer paso en ese propósito sería la autorización de los viajes entre Asturias, Galicia y Cantabria a partir del 15 de junio.

El Prinicipado abundó en que «los brotes del País Vasco han aconsejado extremar las precauciones. Hoy mismo, el Gobierno de Cantabria ha anunciado que renuncia a permitir la movilidad. Quedaría, por tanto, sólo la opción de Galicia, pero en este caso se plantea otro problema: el gobierno gallego es partidario de levantar el estado de alarma, mientras que el Principado defiende que se mantenga hasta el final. Además, Navarra también ha anunciado que no permitirá la movilidad, una decisión que al parecer compartirá el gobierno de Aragón. Ante estas circunstancias, el Consejo de Gobierno ha decidido que no solicitará la autorización de la movilidad con las comunidades fronterizas. Insistimos en que el criterio básico ha sido la defensa de la salud pública».

Según citó la agencia Efe,  El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha anunciado este jueves que no se abrirá la movilidad a los ciudadanos del País Vasco el 15 de junio, como se había planteado, porque así lo recomienda un informe de la Consejería cántabra de Sanidad ante los brotes de la covid-19 registrados en Euskadi.

Revilla ha explicado a los periodistas que ha comunicado ya esta decisión al lehendakari, Íñigo Urkullu, y al presidente de Asturias, Adrián Barbón, con el que ha hablado esta mañana y también le ha informado que la comunidad autónoma vecina tampoco abrirá a la movilidad de otras regiones el 15 de junio.

La decisión de no abrir Cantabria a la movilidad ha sido acordado por el Consejo de Gobierno de la región, reunido esta mañana y del que ha informado el vicepresidente, Pablo Zuloaga, y que ha analizado el informe de Sanidad que explica que la evolución de la pandemia ha sido buena en la comunidad autónoma y también en las vecinas, pero recomienda no abrir por los últimos brotes detectados en el País Vasco.