La Universidad de Washington predice cuándo se producirá la última víctima por coronavirus en Asturias
Asturias
09 Apr 2020. Actualizado a las 05:00 h.
Ha sido un informe de gran repercusión a nivel mundial aunque sus predicciones son un fiasco respecto a Asturias. Se trata del estudio elaborado por al Instituto de Evaluación y Métrica de Salud (IHME) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington que ha estimado el impacto en muertes de la pandemia del coronavirus. El informe asegura que en España e Italia ha pasado lo peor. Que el pico máximo de contagiados y muertos por coronavirus se ha alcanzado hace varios días y ambos países se encuentran en una fase de control. No ocurre lo mismo en el resto de Europa ni en EEUU, donde aún se espera la sacudida más virulenta de la enfermedad para los próximos días o semanas.
El problema viene cuando se analizan los datos regionales. Para España prevén un total de 19.209 muertes de aquí al próximo 4 de agosto. En el análisis regional es cuando llega el desconcierto: en Asturias calculan un total de 88 muertes en agosto, cuando la región ya ha superado a estas alturas de abril el centenar de víctimas. Para la Universidad de Washington, Asturias será la región con menos fallecimientos de España junto a Murcia, con 68 fallecimientos. Comunidades de nuestra esfera geográfica como Cantabria (129), Galicia (481) o Castilla y León (1.165) superarán con mucho los efectos en el Principado.
Pero la Universidad va más allá: también prevé que el día 10 de abril, viernes santo, se produzca el último fallecimiento en la región. ¿Acertará? Ojalá. A partir de entonces se entraría en una meseta cero de muertes, a la espera de una segunda oleada en otoño. Para redondear la predicción, añade que el día 20 de abril Asturias ya no tendrá ninguna cama de UCI ocupada por enfermos de coronavirus y tampoco se necesitarán respiradores mecánicos. Ese día solo se precisarán tres camas de hospitalización para enfermos, una predicción de optimismo desatado y altamente improbable.
Para el resto de los principales países europeos la cifra conjunta de decesos se elevará a 151.680 personas y para Estados Unidos a 81.766.