López-Otín sopesa irse de Asturias

El catedrático en el área de Bioquímica y Biología Molecular en el departamento de Bioquímica de la Universidad de Oviedo, Carlos López Otín (Sabiñánigo, Huesca, 1958), ha reconocido que tiene su vida «cumplida» y contempla salir de Asturias para dedicarse a escribir o irse a otros lugares donde «las condiciones son infinitamente mejores». El investigador se ha pronunciado en estos términos en una entrevista concedida a Radio Asturias (SER) recogida por Europa Press. A pesar de que ha dicho que siempre se ha sentido «muy asturiano» y que encontró el Principado su lugar en el mundo, pero ha dicho que actualmente ha perdido su propósito de vida.

«Tengo una carrera profesional y he creado un ejército de discípulos que la van a seguir», ha comentado Otín, mostrándose orgulloso de su etapa en la Universidad de Oviedo. Ha dicho además que también ha contribuido a «construir empresas», junto a compañías como Alimerka, para dar salida a los estudiantes de la universidad asturiana y que así no tengan que emigrar. No es la primera entrevista, de las que está dando con motivo de la promoción de su último libro, en la que Otín deja entrever su salida de Asturias. Preguntado al respecto esta semana, el Rectorado de la Universidad de Oviedo se ha limitado a decir que contar con Otín es un privilegio y que hacen todo lo posible para que siga vinculado a la institución.

Otín sostiene que fue víctima de acoso de baja intensidad durante años y que la situación se agravó cuando a finales de 2017 le dijeron que alguien estaba revisando sus artículos para encontrarles fallos. A finales de enero de 2019 trascendió la noticia de que habían sido retirados a requerimiento de la revista Journal of Biological Chemistry ocho de los artículos firmados por Otín publicados entre 2007 y 2009 al apreciarse errores en las imágenes. Antes había sido retirado otro artículo en la revista Nature Cell Biology.

Fue entonces cuando Otín, que estaba entonces en París en una estancia sabática, reveló públicamente que había sido víctima de una campaña de acoso y dio a conocer un misterioso episodio relativo al sacrificio de más de 5.000 ratones con los que investigaba en la Universidad de Oviedo por culpa de una infección. La Universidad de Oviedo explicó que la infección, que tuvo lugar en mayo de 2018, se debió a un brote de virus murino cuyo origen no se ha podido determinar y añadió que se trata de episodios que pueden suceder en ese tipo de instalaciones.

European Research Council (ERC)

Los máximos responsables del Rectorado de la Universidad de Oviedo explicaron el pasado 1 de marzo que estuvieron ofreciendo apoyo a Otín en todo momento, desde que en octubre de 2017 llegaron correos electrónicos poniendo en cuestión algunos de sus trabajso. Sin embargo, negaron categóricamente que tuvieran identificada a ninguna persona física o jurídica que hubiese acosado a Otín.

Ese mismo día, los responsables del Rectorado, explicaron que European Research Council (ERC) se había puesto recientemente en contacto con la institución para solicitarles información tras la retirada de los artículos. En abril de 2017 una propuesta liderada por Otín consiguió una ayuda Advanced Grants, de ERC casi 2,5 millones para desarrollar un proyecto sobre el envejecimiento de mecanismos moleculares. ERC ha confirmado a Europa Press que ya ha recibido toda la información requerida por parte de la institución asturiana.

Ganar tiempo

En una de las entrevistas concedidas esta semana, la publicada por el diario El País el 11 de abril, Carlos López Otín afirma que sufrió acoso laboral dentro de la Universidad de Oviedo. Añadió que también acosaron a estudiantes que habían participado en trabajos. Cuando se le preguntó por la importancia que tenía la retirada de los artículos retirados del Journal of Biological Chemistry respondió que ninguna y se refirió al episodio como algo irrelevante. Luego, sin embargo, admitió que lo único que se produjo fue un intento de ganar tiempo para publicar antes los resultados.