La Voz de Asturias

El caos del voto rogado aparta de las urnas a miles de emigrantes asturianos

Asturias

s.d.m.
Una urna con votos

El plazo para inscribirse en el censo y participar en los comicios del 28 de abril expira el próximo lunes

14 Mar 2019. Actualizado a las 05:00 h.

Un asturiano que esté interesado en votar el próximo 28 de abril tendrá que marca en rojo un montón de fechas en el calendario y actuar con rapidez. Antes del próximo lunes, 18 de marzo, tendrá que solicita su inscripción en el censo, si es que todavía no lo está. Después deberá estar atento a un camino de obstáculos, aprobado en el año 2010 ,que ha reducido a mínimos históricos la participación de los emigrantes. El conocido como voto rogado, aprobado con un acuerdo de PSOE y PP, fue una reforma de la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (Loreg) que ha despertado una gran controversia y que los socialistas se habían comprometido a revertir en la actual legislatura. Este nuevo adelanto electoral ha dejado en tierra de nadie a los españoles en el extranjero y, previsiblemente, volverá a suponer una sangría y un lazo menos en la conexión con la comunidad migrantes.

Los números demuestran esa desconexión. Las elecciones generales del 2008 fueron las últimas antes de que el voto rogado entrase en la política española. Ese mes de marzo, el Censo Electoral de los Residentes Ausentes (Cera) contaba con 67.643 asturianos registrados. Del total, ejercieron su derecho 25.101, es decir, el 37,11%. En esa ocasión, la participación total en el Principado fue del 71,29%. La siguiente cita electoral se convocó en noviembre de 2011. La reforma electoral ya había entrado en vigor. El Cera había crecido considerablemente hasta los 87.930 inscritos. Con ese incremento, era de prever una mayor participación. Sucedió justo lo contrario. Solo 8.981 asturianos solicitaron su derecho a votar, la nueva barrera que el Ejecutivo había levantado. De esos 8.981 solo llegaron a formalizar la papeleta 4.906. Eso implica que la participación cayó del 37,11% de cuatro años antes al 5,58%.

Las quejas proliferaron de manera exponencial. El voto rogado, un sistema que en teoría había nacido para acabar con el posible fraude del voto exterior y que se había ideado como un sistema por el cual el elector tiene que solicitar un doble trámite: permiso para votar y las papeletas, se había convertido en un gran fiasco. Unos denunciaron la falta de información. Otros que sí cumplieron con todos los trámite en tiempo y forma no recibieron la documentación. Llegaron a bromear con la terminología y llamar voto robado al voto rogado

Cuatro años después, en diciembre de 2015, con el sistema ya rodado, los datos fueron incluso peores que en 2015. El CERA asturiano, lleno de exiliados laborales por la crisis, rebasó la barrera de los 100.000 inscritos y llegó a 108.916. Sin embargo, las solicitudes de los permisos para votar y de las papeletas descendieron de 8.981 a solo 6.739 y la participación real bajó a 4.207. en porcentaje apenas el 3,86%. Las quejas de la comunidad exterior no se atenuaron, aunque en junio de 2016, en las generales de seis meses más tarde, remontó ligeramente. La participación alcanzó el 5,18%.

No obstante los partidos son conscientes de que es necesario hacer algo ante la cadena de quejas y denuncias de inmigrantes de todas las comunidades. Pedro Sánchez había prometido una reforma del Loreg. Con el adelanto electoral, es uno de los asuntos que ha quedado en el tintero.

Los plazos  

El reloj ya ha comenzado correr para los emigrantes del Principado. Del 11 al 18 de marzo deberá inscribirse en el censo, si es que sus nombres todavía no están en el CERA. Después tendrán hasta el 30 de marzo para solicitar el voto. Deberá recibir la documentación, en principio, antes del 16 de abril y enviar su papeleta por correo antes del 24 de abril, es decir, cuatro días antes de la fecha oficial de los comicios. Todos estos plazos son para las generales. Pero en paralelo discurren los plazos para las municipales y la europeas. En ese caso, la inscripción oficial en el CERA abarca del 8 y el 15 de abril. Tendrían que rogar el voto antes del 27 de abril y esperar a que le lleguen las papeletas para votar, como muy tarde, el 22 de mayo.

Es difícil saber qué sucederá en sprint electoral de los dos próximos meses. El censo ha vuelto a crecer, nada menos que en 10.000 asturianos solo en cuatro años. Según los datos recogidos en el Instituto Nacional de Estadística (INE) a finales de febrero, le corresponden a Asturias para 2019 un total de 117.077 personas con derecho a voto. Por orden de países, destacan Argentina (con 30.618), México (con 19.795) y Cuba (con 14.818). Los países europeos que cuentan con más asturianos son Bélgica (7.410), Francia (4.281), Alemania (3.357) y Suiza (3.034). Emigrantes de otra generación son los 2.450 que están registrados en el Reino Unido.

 


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